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julio 16, 2016

Bolsa de Bielsa. 80 AÑOS DE SUBLEVACION MILITAR FASCISTA. 18 de Julio tod@s a Huesca






80 AÑOS DE LA

SUBLEVACION MILITAR

FASCISTA


El 18 de Julio tod@s a

Huesca

19h. Pza. Zaragoza


NO PASARAN ¡¡

AÑADIDO el 7/11: Kizoa Editar Videos - Movie Maker: Jornadas de la Bolsa de Bielsa 2016  https://www.youtube.com/watch?v=vs2emLT6Ovg&feature=youtu.be
Publicado el 5 nov. 2016: En homenaje a la tenaz resistencia de la 43 Division del Ejercito Popular todos los años se celebran estas jornadas.

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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo: La guerra de Irak no fue una metedura de pata: fue un crimen



Activid. en defensa de la tierra y del tren: Festival "Esfendemos A Tierra", en Artieda + Apertura línea ferroviaria Canfranc-Oloron, en Bedous

Nacho Escartin Lasierra
 Este fin de semana, no nos perderemos dos actividades en defensa de la tierra y del tren. Festival "Esfendemos A Tierra" en Artieda, contra el recrecimiento del pantano de Yesa, con charlas, pasacalles, comidas populares, conciertos y muchas risas. Y el domingo, acto reivindicativo por la apertura de la línea ferroviaria Canfranc-Oloron en Bedous, en otro hermanamiento de aragoneses y occitanos.
¿Te apuntas?

julio 15, 2016

Emilio Lledó: "Este país sería mejor si se hubiera mantenido la República"

El último premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades reflexiona para Público sobre la educación, la lengua y el momento actual: “Lo monstruoso es el imbécil con poder; me preocupa la ignorancia desde la que se legisla”. Por: CRISTINA S. BARBARROJA

http://www.publico.es/culturas/emilio-lledo-hubiera-mantenido-republica.html Publicado: 05.05.2016 

 

lledo
Emilio Lledó.- EFE
“La violencia y la crueldad son inseparables compañeros de la ignorancia”
Discurso de Emilio Lledó durante la entrega del Princesa de Asturias
de Comunicación y Humanidades, octubre de 2015
La transcripción de su discurso debería estar saturada de exclamaciones que —si existieran— tendrían que ser minúsculas. Porque exclama mucho don Emilio Lledó (Sevilla, 1927), pero lo hace en pequeño, delicado, con la humildad de quien sabe que todavía no lo ha aprendido todo. “¡No soy filósofo!” es su primera interjección. “Soy profesor de Filosofía”. Y no es modesta la afirmación del académico, paladín de la Educación (en mayúscula), “esa que se crea con la palabra de un maestro que ama lo que enseña y ama a aquellos a quienes enseña”.

Él, que ha amado durante más de medio siglo, se acuerda del que tuvo con 10 años, durante la Guerra Civil, en el entonces madrileño pueblo de Vicálvaro al que fue destinado su padre, artillero. “Nos hacía leer El Quijote, pero no un Quijote arreglado, para niños, no. Nos hacía leer El Quijote y después nos pedía: 'Escribid lo que os sugiera la lectura'. Imagínate lo que nos sugeriría con 10 años. ¡Qué hermosura! Esa frase del profesor se quedó clavada en mi vida”.
“Una educación que meta grumos pegajosos en la cabeza de los niños los aniquila para siempre”
“La palabra del maestro… —insiste con un medio suspiro al referirse a la verdadera educación— ¡y la lectura!”. Y señala una de las paredes de un salón tapizado de libros, como el resto de la casa. “Son unos 10.000 y podría recordar hasta el día que los compré”, aventura. “Porque son toda mi vida, el trabajo de un profesor. Me acompañan, me hablan y, a veces, hasta me reprochan. Como Kant, al que hace tiempo que no leo”. Y no bromea don Emilio cuando cuenta que “dialoga” con todos sus títulos.

Cuántas veces le susurraría el filósofo prusiano la idea que vertebra también el pensamiento de Lledó: que los seres humanos son lo que la educación hace de ellos. “Yo creo profundamente en eso: una educación que meta grumos pegajosos en la cabeza de los niños, con ideología y fanatismos, los aniquila para siempre”, -y vuelve a gritar bajito: “¡Eso es gravísimo. Por eso son fundamentales las Humanidades!”.

Él las conoció en Madrid, junto a Julián Marías. Y en la Alemania de los años 50, a la que emigró siendo un veinteañero esquelético —“no pesaba más de 53 kilos por el hambre de la posguerra”— con lo puesto y una maletita de cartón. Eran los años de la emigración andaluza y extremeña. “De muchachos que llegaban con una inteligencia extraordinaria y un espíritu de trabajo excepcional. En una cafetería de la Universidad de Heidelberg, Juan José Carreras les daba clases de historia y yo, de alemán. Y aquella… aquella fue la experiencia docente más hermosa que he tenido nunca”.

Por eso se molesta tanto el profesor cuando recuerda lo que algunos entienden por educación. “El otro día oí a una política, de cuyo nombre no quiero acordarme —una politicastra— decir que ella no estaría contenta hasta que viese un ordenador delante de cada niño en la escuela. ¡Eso no tiene nada que ver con la educación!”, vuelve a exclamar en minúscula. “A los chicos no se les habla más que de economía. Solo quieren ser —dicho con todo el respeto— asesores de empresas o financieros. Se oye decir: ‘Si lleva usted al niño a una universidad privada, saldrá con trabajo’. Eso es la muerte de la vida intelectual, de la cultura, pero es también la muerte del país, incluso de su economía.
Se manifiesta rotundamente en contra de la educación privada y apoya el académico su certeza en los clásicos . “Ya estaba en La Política de Aristóteles”. Se dirige de nuevo a la estantería, coge un volumen cien veces subrayado con lápices de colores, y lee (o dialoga) con el griego: “La educación debe ser necesariamente una e idéntica para todos”. “Hay que luchar para conseguirlo”, añade don Emilio que vuelve a citar una “personajaza de la política”, que prefiere no identificar… y no hace falta.

“Hablaba esta señora de la libertad de los padres para escoger el centro donde educar a sus hijos. ¿También tiene libertad un obrero de Vallecas para llevar a sus hijos a un centro elegante del norte de Madrid? ¡Es una trampa tan feroz! El dinero no debe discriminar la forma de enseñanza. Es segregante, elitístico —valga el adjetivo. Y yo —es una utopía tonta— soy partidario de la educación igualitaria”.
Alumno de Hans-Georg Gadamer, doctor gracias a una beca de la Fundación Alexander von Humboldt, profesor en Heidelberg, Emilio regresó a España en el 62. ”Y no me arrepentí nunca, aunque los primeros años fueron duros”, asegura. Catedrático de Instituto en Valladolid, profesor en las universidades de La Laguna, Barcelona y Madrid, se cuenta —y él no lo niega— que algunos de sus alumnos iban allá donde estuviera el maestro Lledó. En el 71 escribió una de sus grandes obras: Filosofía y Lenguaje.
“Ahora que se habla tanto y que hay tantas posibilidades de comunicarse… estamos tan en silencio, tan vacíos”
“Ahora que se habla tanto y que hay tantas posibilidades de comunicarse… estamos tan en silencio, tan vacíos”. Con esa terrible verdad introduce el profesor otro de sus leitmotiv: la lengua -“la lengua matriz, no la materna que es la mano que nos acoge”, distingue. “Nacemos en ese hermoso cuenco que se llama lengua materna. Pero lo que realmente somos es lengua matriz, lengua creadora, personal, ¡íntima! Lengua idéntica pero conmigo mismo, no con fantasmas más o menos justos que nos venden ciertas ideologías; hay que creer en la identidad que tenga uno con su propia decencia. El lenguaje que yo hablo y yo digo, y que representa mis verdades… y mis equivocaciones”.

Y en ese reconocimiento de los errores sitúa el profesor otra de sus grandes preocupaciones. “Todos nos equivocamos; sabemos muy poco de pocas cosas, pero el error individual no tiene trascendencia. Lo grave, lo monstruoso, es el ignorante, el imbécil, con poder porque puede hacer cosas fuera de su ámbito. Una de las cosas que más me preocupan de este país, que está pasando esta época tan curiosa —por ser suave con los adjetivos— es la ignorancia desde la que se legisla, la ignorancia que organiza nuestra vida, la tuya, la mía”.

Contra la desmemoria 

Evita de nuevo poner nombre y apellidos a esos imbéciles poderosos, pero sí, ejemplos de sus imbecilidades como la política laboral y, por su puesto, la educativa. También la que tiene que ver con la Memoria.

Vuelve a los recuerdos de la niñez; levanta un dedo y muestra la cicatriz que le dejó una chincheta del caballete que le regaló su padre para que pintase. “Igual que la carne conserva, la psique, la lengua matriz que somos, está hecha de la memoria de lo que hemos vivido. Por eso me choca esto que dicen algunos de que hay que olvidarse de nuestra memoria histórica. ¡Eso es una monstruosidad!” y esta vez la interjección lleva toda la fuerza.

No podemos olvidar lo que ha pasado en este país, para no repetirlo o para aprender de sus enseñanzas. Los obsesos del olvido —es una cosa tal vez psicoanalítica— justifican cualquier vileza del presente con la esperanza de que nunca sea recordado. Y yo soy alguien de este país, que me interesa, me gusta y me duele. Y sé el país que podría haber sido”.
“Olvidarse de nuestra memoria histórica... ¡Eso es una monstruosidad!”
Confiesa el profesor lo que llama pequeña intuición: “A pesar de los errores, si no hubiera ganado la dictadura y se hubiera mantenido la Republica, este país sería distinto, sería mejor”. Aunque no tiene demasiada confianza en la posibilidad de una tercera. “Sueño con eso, pero tendríamos que madurar mucho. Y en este país siguen mandando las oligarquías, las mismas que ganaron la Guerra Civil. Por eso no se tocan ciertas cosas, tabúes que se mantienen como en el franquismo”.

Entre su despacho y un dormitorio, una pared del pasillo alberga los libros que hablan a don Emilio sobre la Guerra de España. Más allá, literatura y poesía. Y una figura que —confiesa— le conmueve sobremanera. “Todos tuvimos muchos muertos —también me tocaron en mí familia— muchos que padecieron la monstruosidad del fanatismo. Pero García Lorca. Cuando leo su poesía, su prosa, su genialidad… ¡Tenía 38 años y lo mataron! Lorca es un símbolo. Olvidar la Historia, un crimen”.

“La violencia y la crueldad son inseparables compañeros de la ignorancia”, dijo en octubre del año pasado cuando recibía el premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades. De nuevo en la estantería del salón, mira a los clásicos y recuerda a Platón: “Solo la educación nos salva”. Y, para el momento actual, receta: “Creer en la justicia, ilusionarnos con la verdad y ser verdaderos”. Evoca entonces a Aristóteles y extrae otro volumen con veinticuatro siglos de historia. “¡Fíjate tú qué texto de la Ética nicomaquéa! ¡Qué modernidad!”. Sabe exactamente en qué pagina está lo que busca, la abre: “Las relaciones amistosas con nuestro prójimo y lo que caracteriza la amistad se deriva de la amistad que tengamos con nosotros mismos”, dialoga el profesor Lledó.
"El más rico tesoro es el lenguaje; en él se recobra el pasado, se organizan las ideas que forjan al hombre y se edifica el silencioso diálogo que conforma la esencia de la humanidad como especie capaz de ser y de saberse ser”
Discurso de ingreso en la RAE de Emilio Lledó, octubre de 1994

 

La muerte NO SE CELEBRA. Nunca. A los que lo hacen, oídos sordos, de Javier Nix Calderón.

COPIADO de la pág de FB de Javier Nix Calderón  el 12/7/2016
Sufrimos una invasión de todólogos y opinólogos. La multiplicación de voces que da como resultado cero, produce una cacofonía contra la que no sirve cubrirse manos u oídos. El poder estuvo siglos dando vueltas a cómo acallar el ansia de conocimiento de las masas, usando la censura, prohibiendo la palabra escrita o persiguiendo al disidente, cuando la fórmula magistral era precisamente la contraria: dale a todo el mundo la posibilidad de opinar, de eructar sus ideas con poco o ningún rigor, y tendrás un gallinero en el que nadie escuchará las ideas de los otros. Estos días he visto juicios y prejuicios esgrimidos con una simpleza y banalidad asustantes. Facebook no es una red social; es un mentidero, o algo incluso peor, una cloaca por la que desaguar la bilis. Hay palabras en este espacio que asemejan regueros de mierda, ríos de vómito con tropezones, aderezados con los peores ingredientes sacados de la huerta humana: odio, cainismo, inhumanidad, inquina. La muerte de un torero ayer en la plaza, producida por una cornada en el corazón, ha sacado a la luz la auténtica dimensión de algunos, quienes por amor a los animales han paseado su odio de barra de bar y carajillo hacia los que los maltratan. Una muerte en la plaza es una muerte en la plaza, y todas nos disminuyen como pueblo. Todas son un reflejo de nuestra incapacidad para regirnos por comportamientos éticos y ponen de manifiesto que estamos en las antípodas de la mayoría de países de nuestro entorno. Cuando muere un toro, algo nuestro muere con él. Cuando muere un torero también. No cabe discusión, por otro lado, en cuanto a la voluntariedad del acto que lleva a unos y otros a la plaza. El toro sale desorientado a una superficie barrida por una luz cegadora. El torero sale a un posible patíbulo, en el que ofrece su cuerpo a la inmolación para ganarse una gloria que le conceden siempre otros. El toro no elige estar allí. El torero sí. Pero el acto, el acto en sí, es una tragedia desde que los primeros espectadores ocupan los tendidos. En España hay 12.000 tragedias anuales, con más de 70.000 toros muertos. Es un dato estremecedor, como lo es la muerte de ese muchacho de 29 años. Pero una tradición que en España se remonta más de 500 años no se combate vomitando odios, ni agitando las hoces y las antorchas de la Inquisición. No se hace así. Se hace con pedagogía, con razones, seduciendo, amando. Se hace con leyes, a las que se llega a través de consensos y que son el triunfo de cualquier Estado de derecho. La muerte NO SE CELEBRA. Nunca. A los que lo hacen, oídos sordos. No representan a nadie, salvo a su propio odio. Que cabalguen solos a lomos de su cólera. Ningún país llegó lejos sobre ese caballo, ni siquiera cuando se persiguen las causas más justas y nobles.
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MI COMENTARIO:  Paquita Caminante
Gracias por poner palabras a lo que muchos, supongo, sentimos. Cuando leí que "eso" eran opiniones de un "animalista" no lo entendí. Gente estúpida la hay en todos los colectivos Javier Nix Calderón
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AÑADIDO el 15/7/2016: Javier Nix Calderón

Niza es la constatación de que vivimos en un mundo globalizado: hace dos semanas, casi 200 muertos en Bagdad. Anoche, más de 80 en Niza. Camión o coche bomba, el terror no entiende de medios, fronteras, religiones o razas. Todos somos carne que tiembla ante el odio.
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo: Tetas, sangre e historia patológica


 

julio 14, 2016

Se llamaba Conchi, y era mi suegra: no pido que la quieras, pero sí que la respetes

cendio de la vivienda de Málaga en el que murió Conc

https://elventano.es/2016/06/se-llamaba-conchi-y-era-mi-suegra-no-pido-que-quieras-pero-si-que-respetes.html 4 de junio de 2016

(Foto en enlace) Incendio de la vivienda de Málaga en el que murió Conchi el pasado miércoles

Tal vez para ti su nombre no signifique nada, puede que nunca la vieras o que te pasara desapercibida. Lo más seguro incluso es que estas letras te resulten indiferentes. Pero si te digo que falleció hace dos días en el incendio de calle Héroe Sostoa, 82 igual se te active el interés. ¡Qué sociedad esta en la que nos movemos tanto por el morbo y tan poco por la solidaridad!
Sí, se llamaba Conchi y era mi suegra. Y no, no era una anciana sola que estaba descuidada como algún medio y algún vecino deseoso de un minutito de gloria han dado a entender. Era una persona con una historia detrás, historia que solo algunos de vosotros conocéis y que yo no voy a contar. Porque ante un caso tan brutal como este, en el que una persona muere atrapada en un incendio, una lee cosas que le hacen perder la fe en la dignidad del ser humano.
Porque realmente su historia ha importado muy poco; era mucho más importante sacar la foto, grabar el vídeo, quizás tomar el “selfie”, y rebuscar en la suciedad de unas mentes para dejar constancia de lo miserables que podemos llegar a ser.
Se llamaba Conchi y era mi suegra. Desde chiquita tuvo una vida dura, muy dura, pero el destino supo compensarla con el mejor de los regalos que nadie pudo hacerle: un hijo extraordinario.
Se llamaba Conchi, sí, aunque ninguno de sus vecinos, tras siete años viviendo en el edificio lo supiera. Hubiera bastado con mirar el buzón, o incluso con decirle: “Buenos días, vecina, ¿cómo se llama usted? Para lo que necesite, aquí me tiene.” Pero mola más decir en el periódico: “Era una mujer mayor que vivía sola y ni siquiera sabíamos su nombre”. Conchi: C-O-N-C-H-I.
Una vida de trabajo, de amor por los suyos y de lucha por salir adelante en un mundo que nunca se lo puso fácil. Una mujer guapa, muy educada y con unas manos preciosas. La soledad nunca le hizo mella; al revés, la buscaba con ahínco. Necesitaba su independencia. Pero nunca estuvo sola; ni un solo día de su vida ha dejado de estar atendida por su hijo, o por mí, o por otros familiares. Jamás ha tenido un momento de necesidad que no se le atendiera. Nunca desde que su hijo y yo compartimos la vida ella ha pasado sola unas Navidades. Jamás le ha faltado su regalo de cumpleaños o de Reyes. Mantenía una vida social escueta pero selecta.
A su lado, además de a su hijo y a su nuera, tenía a toda mi familia, y tenía a sus sobrinos, a los que quería como a hijos y con los que seguía compartiendo comidas, risas y confidencias. No pasaba una semana sin que su sobrina fuera a visitarla para hacerle reiki, y una vez al mes iban juntas a comer, y al traslado del Cautivo año tras año. Y tenía a dos amigos con los que salía cada día a pasear y una amiga de la infancia que le mandaba cartas casi cada mes. No. No vagaba sola por el parque de Huelin; ella misma se obligaba a salir a pasear, aun con esfuerzo, para no apoltronarse.
Llegar a la vejez con una pensión exigua, sin haber podido comprar una vivienda propia, obligada a pagar un alquiler por encima de tus posibilidades y que solo gracias a tu hijo puedes afrontar y tratar de mantener para tu vida y para la de los demás la libertad por la que siempre luchaste no es fácil.
El ritmo de vida de hoy día, que obliga a los dos miembros de una pareja a trabajar (sin mencionar nuestros irracionales horarios), nos hace imposible conciliar la vida laboral con la familiar. Es fácil señalar para levantar una sospecha de posible abandono de un anciano. Pero el hecho de que las dos únicas personas que podían atenderla al cien por cien se pasan el día en sus respectivos trabajos nadie lo ve. Y si has pensado que trabajamos afanosamente para gastar nuestros “sueldazos” (ironía en modo “on”) en darnos la gran vida, me parece que andas un poquito fuera de la realidad.
Pero, bueno, ahí están los servicios sociales para echarles una mano a los ciudadanos que lo necesitan. La famosa Ley de Dependencia. Oh, sí. Tras siete años con la sensación de estar mendigando una ayuda, al final te la conceden: una “generosa” rebaja mensual de 6 euros en el servicio de teleasistencia. Genial. Es que esta es toda la ayuda que hay para una persona con el grado de dependencia de ella…
Mientras, está su hijo para ayudarla en su aseo diario, para mantener su casa limpia, para controlar su medicación, para hacerle la compra y la comida… Su hijo, que se pasa diez horas en el trabajo, o su nuera, que más de lo mismo. Pero su hijo la quiere y la respeta, como ella le enseñó. Y con su mejor disposición y con un amor infinito, no deja ni un día de acudir a cumplir con la que es su responsabilidad desde que era un niño: su madre. Una madre que le hizo convertirse en la gran persona que hoy es y cuya principal preocupación, como ella misma me decía, era inculcarle el respeto por las personas mayores. ¡Y bien que lo hizo!
Y entretanto, está el vecino cotilla, la vecina criticona… Gente que no sabe ni le interesa y que aprovecha un momento como este para hacer su aparición estelar en los medios para verter sus inmundicias, para difundir fotos del fuego, para vender a la prensa vídeos del incendio, para elaborar teorías estúpidas sobre el asunto. Quizás en un intento “bienintencionado” de dejar claro a su hijo y al resto de su familia cómo murió Conchi, mi suegra, porque tenemos que estar bien informados, claro. Pero sin importarles un bledo el daño que causan.
Conchi era mi suegra y yo la quería. Nunca hubiese esperado para ella un final como este. No te pido que la quieras, pero sí que la respetes. Y que nos respetes a nosotros, que no hurgamos en tus heridas.
Conchi, el lunes próximo hubieras cumplido 74 años. Hubieses comido con tu niño, como cada día, y acabado con un merengue de postre. Y hubieses abierto tu regalo. Y luego hubieses invitado a café a tus amigos Felipe y María. Pero ya no lo harás. Y tampoco volverás a llamarme para que le recuerde a Ignacio que te tiene que comprar pan Bimbo y kiwis o pedirme que te pinte las uñas.
Conchi, te echaremos de menos, pero sé que ahora eres libre, como siempre quisiste ser. Yo cuidaré de tu peque, la mejor herencia que pudiste dejarme. Nos quedó una merienda pendiente.
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Si has llegado hasta aquí leyendo, me gustaría que compartieras públicamente esta historia. Siempre he sido muy celosa de mi vida privada, pero hoy tengo que hablar en público para darle a mi suegra el respeto que no se le ha dado en la prensa y en las redes sociales estos días.
Y aprovecho para agradecer desde aquí el extraordinario trato que nos han brindado tanto Policía, como Bomberos, como los servicios sanitarios, funerarios y de teleasistencia. Y, por supuesto, a nuestros familiares y amigos, que mejores no se pueden tener. Gracias por estar ahí y por hacernos este trance mucho más llevadero.
Rosa Muñoz Bermudez
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo:
El PSOE avanza por la senda del suicidio asistido, de Miguel Mora



julio 13, 2016

Benasque. Picos: Salvaguarda, Aneto y Posets, Julio 1979

Viaje realizado en Julio de 1979, narrado en 2004 y publicado ahora. Las fotos llevan una explicación y al relato lo precede un *asterisco. Lo copiado aparece "entrecomillado" Para VER las FOTOS, sus detalles, DEBEN AGRANDARSE clicando sobre ellas. Fueron tomadas con cámara analógica y ahora escaneadas. Crónica anterior http://paqquita.blogspot.com.es/2016/07/costa-brava-gerona-valle-aran-montardo.html





17.- Paredón y Crestas Macizo de la Maladeta

pico Aneto a dcha.

Abajo: Lago Llosás (2493m)



 










18.- Blas, en el Portillón = 
port de Vénasque (2 444 m)

Pyrénées francés 

Lagos: Les Boums de Vénasque

19.- Desde port de Vénasque. Vista a dcha. Pirineo francés




20.- Fondo:
pueblo de Luchon

Lagos 
de la
Montañeta

Vista
hacia
Francia
desde 
Pico Salvaguarda =
pic de Sauvegarde (2 738 m)

 

21.- Vista desde Peña Blanca. Valle de Benasque. Pico Perdiguero, dcha. (3220m) 





22.- Vista, misma dirección, desde cima pic de Sauvegarde

Macizo Posets, dcha. (3375m)








23.- A dcha. anterior

Valle de Benasque, abajo

Valle Remuñe, izda.

Pico Perdiguero, fondo


 



24.- Vista, a izda.
desde
pic de Sauvegarde
 
Pico Forcanada, centro.  

Pico Mulleres, dcha.











25.- A dcha. anterior


Pico Mulleres, izda.

Pico Aigualluts, abajo.

Pico Renclusa












26.- A dcha. anterior

Aneto izda. (3404m) Glaciar del Aneto. Portillones














27.- A dcha. anterior

Pico Alba (3... m) 

Las Tres Hermanas Paderna


28.- Dcha. foto 30 más cerca. Portillón Benasque =  port de Vénasque a dcha.   


29.- Bajando pic de Sauvegarde, hacia la Besurta. Picos Forcanada, al fondo. Pico Aigualluts, dcha. (foto 24)







30.- pic de Sauvegarde,

Visto
desde 
Besurta

port de Vénasquea dcha.





31.- Yendo. Cimas: Aneto, izda. Coronas, dcha.




32.- Cima Aneto

Blas y Paquita. 1ª ascensión al mismo.

La parafernalia montañera del momento: 
cruz y virgen




33.- Vista desde cima Aneto. Lago Barranc. 


34.- A dcha. anterior


35.- Vista otro sentido. Lago Coronas, helado 


36.- A dcha. ant. Cresta de Enmedio y Pico Coronas


37.- Paso Mahoma, desde cima a umbral  


38.- Aneto y Glaciar del Aneto en la distancia, julio 1979


39.- Entrada valle Estós. Tuca Gargallosa y Macizo Perdiguero, dcha. 


40.- Macizo Perdiguero, desde Tormo.


41.- Flores de Gentiana lutea. Me asombró verlas





42.-
 

Valle 
Estós 

Río 
Estós

Fondo: 
Valle 
Claravide,
desde
la Paul



43.- Posets (3375m) desde la Coma de La Paul.  


44.- Posets, desde glaciar y chimenea central. Vía de subida. Diagonal de izda. a dcha.

* Acampamos en el lugar que nos recomendó, Senarta, a  los pocos días,  e  hicimos  todas  las excursiones  que habíamos anotado: los lagos de Batisielles, Cregueña, Llosás, los Picos Salvaguarda,  Aneto, Posets y el Forau de Aigualluts
Fue todo un descubrimiento, con todos esos grandes espacios.

PAQUITA  
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo:
"El Gobierno del PP ocultó toda la información del Yak-42 a las familias de las víctimas. No fue un accidente"

La Comunidad de Madrid confirma que Aguirre le pasaba el recibo de la luz a los madrileños