Carolina Garcia Mogollone· · 17.09.2020
La Comunidad de Madrid está sufriendo de nuevo el azote de la covid-19 con un gran repunte de casos en este mes de septiembre que la está situando como la región más castigada, de lejos, de toda España. Casi un tercio de los nuevos contagios diarios en todo el Estado los acumula Madrid. Este mismo jueves ha sumado 1.300 positivos más con respecto a ayer.Y los centros de Atención Primaria llevan ya varias semanas absolutamente desbordados. No tienen capacidad para atender la altísima demanda de enfermos tanto por covid-19 como por otras dolencias. Las colas a las puertas de los centros de salud son el pan de cada día, el personal sanitario trabaja sin cesar para tratar a la población pero se siente desprotegido y desamparado por el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. Falta personal de refuerzo, no hay suficientes rastreadores y los resultados de las PCR tardan días en llegar. Y si hay trabajadores que tienen que hacer cuarentena, son positivos o están simplemente librando, la situación se agrava de forma dramática. Es lo que está sucediendo en un centro de salud del barrio madrileño de Vallecas, al que esta mañana se han acercado las cámaras del programa 'Al Rojo Vivo' de La Sexta. Y la reportera se ha topado con una enfermera que le ha explicado con una contundencia demoledora lo que está sucediendo en el barrio y en su centro de trabajo. Y es que el virus, como ha apuntado en un tuit el ministro de Consumo, Alberto Garzón, sí que entiende de clases sociales. No es una cuestión del "estilo de vida de la inmigración", como soltó Díaz Ayuso en la Asamblea de Madrid. Es una cuestión de pobreza, de condiciones de vida y de trabajo y de desidia por parte del Ejecutivo regional, que estos días está protagonizando un espectáculo esperpéntico a costa de las restricciones de movilidad que se van a imponer a los barrios del sur de la capital.
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