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octubre 06, 2010

Un sol de fuego... (+ Carmela)

Publicado por Carmela en 6 de agosto de 2010 en su blog "ANDANDO CAMINOS..." haygonastur.blogspot.com/

6 de agosto de 1945, Hiroshima y Nagasaki...
Violenta luz jamás vista en el mundo, se eleva lentamente, rompe el cielo y se derrumba. Tres días después, otro sol de soles revienta sobre el Japón. Debajo quedan las cenizas de dos ciudades, un desierto de herrumbre, muchos miles de muertos y más miles de condenados a morir de a pedazos a lo largo de los años que vienen.
Estaba la guerra casi acabada, ya liquidados Hitler y Mussolini, cuando el presidente Harry Truman dio la orden de arrojar las bombas atómicas sobre las poblaciones civiles de Hiroshima y Nagasaki.
De : "Memoria del fuego" Autor: Eduardo Galeano

Caminante dijo... 8 de agosto de 2010 05:02
Para entrar en guerra con Japón, EEUU permitió que ocurriera lo de Pearl Harbour.
Hay evidencias de que el gobierno conocía -los planes- el bombardeo que los japoneses harían esa noche, para que la tropa "sufriera lo menos posible" hicieron una fiesta en que ¿todos? se emborracharan y no se percataran de lo que les venía encima.
Con esa excusa -la del bombardeo sufrido por ellos- justificaron la utilización de la bomba atómica.
De seguro, la inmensidad del horror no se pudo saber hasta que se "probó"-arrojó sobre las poblaciones elegidas: Hiroshima y Nagasaki.
Fuente: Aula de Historia de la Universidad Carlos III de Madrid, oon sede en Getafe, adonde acudo a "ilustrarme". Besos desde aquí: PAQUITA


1 comentario:

  1. No sé si el gobierno de EE.UU. dejó que Japón cometiese ese gran crimen contra Pearl Harbour. Sí existen indicios de que un tal G.W. Bush, se quedó de brazos cruzados y así se produjeron los atentados del 11-S.

    De todas formas, Japón cometió actos criminales y contra la Humanidad.
    EE.UU. cometió los atentados de guerra-terroristas más graves y en un "sólo" acto, en dos días: tirar dos bombas atómicas contra ciudades, contra la población civil. Contra niños, mujeres y hombres inocentes.

    La Historia no lo olvidará.

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