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julio 19, 2011

Alcobendas (Madrid) 75 años antes: + E.Andradas

Publicado en 16-7-2011 www.kaosenlared.net/noticia/alcobendas-madrid-75-anos-antes

Alcobendas gusta del vino fresco de cueva y los ancianos del sol manso de la Plaza de la Constitución. Por la Calle de la Unión, Enrique López Silva, el primer alcalde de los trabajadore/as de la trayectoria de la ciudad en 1931, da pie a las sombras que montan las paredes de cal blanca en la vía pública. Va ocupar su asiento en el consistorio como Concejal-Delegado, del gobierno de guerra del alcalde Nemesio de Castro, del Frente Popular en la localidad.
El Ayuntamiento se niega a pagar los pagares revolucionarios, que quieren sustituir a la peseta y están expedidos por partidos y sindicatos proletarios. Es un Julio tumultuoso, muchos paisanos al pasar los camiones milicianos, envolvieron un pequeño petate y se subieron a Somosierra a martillear el Máuser 1893 y prender un 7 mm en las tropas fascistas del General Mola.
Por la carretera de Francia, el niño Baldomero Rodríguez “mero” saluda a las ametralladoras Hotchkiss elevadas en las camionetas de la UHP, que van al frente de Buitrago a descargarse de proyectil en los peñascos enemigos. Los campesinos recogen el trigo alegre y mandan patatas de prados Galápagos a las ollas y pucheros de la milicia de Largo Caballero estacionada en la Ermita de la Virgen de la Paz.
Los huertos cuidados de azadas áridas y pobres y las viñas dulces de Alcobendas, son la vista, para el auto pasajero de los poetas Pablo de la Torrente Brau o Miguel Hernández o del escuadrón sovietizado del “Campesino”, que van a echarse unas balas y unos versos a los picos de la sierra de Madrid. Antes del Verano y el calor de la metralla extendiéndose por la península Ibérica, los Alcobendenses miraban como izaban los DC-2 el correo, de las Líneas Aéreas Postales Españolas, desde la yerba de Barajas. En meses siguientes los Polikarpov I-15 de la escuadrilla de los “Palancares” rusos, pondrán cilindro en las nubes y dejaran estela de humo en el pueblo, procedentes del aeródromo del Algeteño Soto del Duque.
El 19 de Agosto, tras los crímenes fascistas de los barrios de Triana y la Macarena en Sevilla, el Albaicín de Granada o las matanzas de Badajoz y Almendralejo. El diario ABC de Unión Republicana, el Diario de La Noche del ala caballerista del PSOE o el mas leído por los Alcobendanos el CNTero Solidaridad Obrera, se hacen noticia de los asesinatos de las columnas de Franco, contra la población jornalera en Extremadura y Andalucía.
Patrullas a pistola y fusil del PCE de Fuencarral, matan en su término municipal al sacerdote Andrés Rodríguez Perdiguero, el mismo día que los sicarios del fascio del gobernador civil José Valdés ordenan fusilar al poeta Federico García Lorca en Viznar, por rojo, homosexual y amigo de la URSS.
El primero de Septiembre el ex de Unión Patriótica de Miguel Primo de Rivera y principal financiador del partido pro Alfonso XIII en la localidad, José Aguado Lusson, es acribillado por “Fanegas”, “Fancho” y “Negrín” motes de varios vecinos de Alcobendas, en compañía de milicianos de Fuencarral, Chamartín de las Rosas y Tetuan de las Victorias. A lo que se sumó como víctima el menudo párroco Mariano Sebastián Izuel, que antes fue linchado y dejado al raso de la luna en la Carretera de Colmenar Viejo.
El cuarto derechista de Alcobendas difunto, será el Capitán veterinario y miembro del Partido de la CEDA, Acción Popular, Francisco Sánchez López, desaparecido el 15 de Octubre de 1936 en Madrid, después de la denuncia puesta el 6 de Octubre, por el más odiado y calumniado de la historia de esta población de Castilla a orillas de Madrid, por la derecha localista, Alfonso García Mínguez. El que se atrevió durante la canícula de Agosto de asaltar la Iglesia clausurada de la villa y llevase a la Virgen de la Paz, patrona de la hermandad del mismo nombre y lugar de encuentro del tradicionalismo Alcobendense. Un par de granadas y un pozo en el Arroyo Carbonero fue el último acto de la imagen de la Santa. Este paisano osó arrancar la cruz próxima al matadero municipal, emulando a los soldados de Napoleón en 1809.
Con la llegada de Guardias de Asalto y Carabineros y el control del nuevo Alcalde-Delegado Antonio Vázquez Sobreviela, los “paseos” serán extralegales y esporádicos, efectuados por incontrolados y sin pertenencia oficial al estado de la II Republica, en el encinar de la Moraleja y finalizarán el 29 de Marzo de 1937 en este paraje. En donde no participó ciudadano/a de esta población, donde cursa geografía de agua el Arroyo de la Vega.
El lozano gobierno de Vázquez Sobreviela templará el sindical Comité de Incautación y supervisión popular, organizado por la CNT y la UGT, dirigido por los socialistas Manuel García Moreno, Alejandro de las Heras y Delfín Homobono René y los anarcosindicalistas Ángel García Moreno y Manuel Mas Guadalix, que se incautaron a partir de Septiembre de 1936 de todas las fincas rústicas y urbanas, propiedad de aquellos caciques o propietarios adictos al levantamiento fascista del 18 de Julio.
Colectivizarán las tierras cultivables, para usufructo de la cooperativa obrera de la localidad, del señorito Paulino Aguado Baena y la ganadería de Francisco Sánchez López. Con la alcaldía-delegada de Antonio Vázquez será el propio ayuntamiento quien municipalizará las posesiones individuales de los terratenientes locales, mediante unidad con la CNT y UGT pero coordinadas por el Teniente Alcalde Bernardo Espejo Higueras y siempre acompañados de Guardias de Asalto.
Entre los bienes puestos a disposición de uso social, el caserón de la hija del ex alcalde de la restauración en el siglo XIX y militar en la guerra de Cuba, en pelea contra los independentistas cubanos de Carlos Manuel de Céspedes, el General Cándido Gómez Oria, la señora Virginia Gómez-Garibay se les desposeerá de sus parcelas, el 3 de Marzo de 1938, por orden del Ayuntamiento. Su antigua casona pasará a la Unión de Muchachas de Alcobendas, sección de la Juventudes Socialistas Unificadas (JSU) en el pueblo y usada para alfabetización y cursos de costura de las mujeres de la ciudad y se incautarán de 80000 pesetas, producto de las rentas de las extensas explotaciones agrarias en la zona, durante décadas.
El gobierno de Antonio Vázquez Sobreviela, en la línea del Gobierno estatal de Juan Negrín, tendrá percance con la Agrupación del PSOE en Alcobendas y choque con la CNT. A la par con algunas Brigadas Mixtas estacionadas en la fábrica de tejas a las afueras de la ciudad, entre ellas la del anarquista Liberino González, por apropiación indebida de la leche de las vacas de que pastan y habitan en la villa. Cambiará el nombre de muchas calles y la militante de las Juventudes Socialistas asesinada por un piquete de pistoleros falangistas, Juanita Rico tendrá nombre en el callejero, a la vez que la periodista del Mundo obrero Lina Odena, muerta en el Frente sur. La republica disfrutará de una Avenida y Fermín Galán el héroe de Jaca, cambiará el titulo a la Calle Peligros.
Alcobendas mandará 1000 pesetas para ayuda a los refugiados del Consejo de Asturias y León y ocupado por las huestes de Franco. E inaugurará una arteria con la denominación de Asturias de ese territorio republicano estrangulado por el fascismo internacional. El ayuntamiento democrático del Frente Popular, acondicionara paseos y travesías, abrirá pozos y mantendrá el esfuerzo de combate del Madrid sitiado.
En Febrero de 1939, Víctor Muñoz Galán, sustituye al ya en mal estado de salud y físico, Antonio Vázquez Sobreviela. Y Alcobendas, desde el 6 al 9 de Marzo, soportará en sus lindes una guerra civil, entre los partidarios de la Junta del Coronel Casado y el Gobierno de Juan Negrín. Donde le volarán su puente de entrada por Fuencarral y dejará las puertas abiertas a la invasión franquista y a los movimientos de la Quinta columna local de la Falange Interior, acaudillada por Julián Baena de Castro. Posterior ilícito alcalde de Alcobendas, con el Yugo y las Flechas ya puestas en la fachada del consistorio de la localidad. A un centenar de vecinos/as les pondrán cárcel, campo de concentración, exilio y tumba. Pero eso ya es otra historia, que algunos elementos de la derecha extrema local, todavía amenazan con juzgados y abogados si se cuenta y escribe.
PD: Dedico este articulo pretendido de poesía a las nietas del alcalde de Alcobendas Antonio Vázquez (Judith y Yolanda) a la familia del regidor Víctor Muñoz Galán. Al militante de la JSU local Baldomero Rodríguez “Mero” y al carabinero Enrique Casas, secretario de propaganda de las Juventudes Socialistas Unificadas en el Ayuntamiento de Madrid y que en 1937 paso por esta localidad, camino del pueblo de la Cabrera. Y a los archivos históricos del Ayuntamiento de Alcobendas y del ministerio de Cultura.

Eduardo Andradas elleteoenverso.blogspot.com/
Miembro del Colectivo de Poesía –Cultura Indigente- e Investigador Histórico de la Guerra Civil en la Zona Norte de Madrid.

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