Para destruir una democracia ya no hace falta un ejercito dando golpes de Estado, es suficiente con jueces corruptos, periodistas corruptos y una derecha atemorizada por la ultraderecha, de Lucio Martinez Pereda

 Lucio Martinez Pereda   9/3/21

Para destruir una democracia ya no hace falta un ejercito dando golpes de Estado, es suficiente con jueces corruptos, periodistas corruptos y una derecha atemorizada por la ultraderecha. Las tres condiciones se dan en España.
Los periodistas se organizan en tres tipos profesionales distintos con distribución de funciones especializadas: el Periodista Jabalí, el Periodista Mantenedor y el Periodista Editorialista.
El Periodista jabalí: se especializa en insultos y denostaciones dirigidas a los adversarios. Su función es elevar el tono emocional de la confrontación.

El Periodista mantenedor: traslada regularmente a la opinión pública un argumentario creado en un laboratorio de comunicación con su correspondiente consignario temporalizado .

Periodista editorialista: lleva a cabo un análisis de contexto general con un discurso basado en una retorica técnico-política sin connotaciones partidistas reconocibles y ajeno al lenguaje de la lucha propagandística

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