14.- Roca peculiar: Perro de la Canaleja (3/7/17)
* Menos mal que todos los caminos llevan, además de a Roma, a cualquier otra parte... siempre que no tengas inconveniente en andar más, puesto que estás alargándolo.
La diversidad de rocas es tal que muchas de ellas están "catalogadas". Para mi verguenza, sólo reconozco media docena. Seguimos por la Senda Termes, cruzando alguno de sus "jardines" -en La Pedriza: praderita rodeada de grandes piedras-. Estar aquí, en este a modo de cresta es... particular, por aquí usualmente no vemos a nadie.
15.- Grupo familiar mencionado
* Usualmente. Hoy veremos cabras, algún macho y un cabritillo. No parece asustarse, también es cierto que me quedo clavada, movimientos los mínimos, si quieres contemplarlas. Éstas no están socializadas como las de sierra de Gredos ¡mejor!
Los accesos a Tres Cestos, al igual que los del Risco del Yelmo y otros lugares de aquí, incluyen algunos pasos "pintorescos" y más o menos exigentes; como es el que tengas que reptar entre las rocas. Te mantiene en forma "pasear" por estos jardines.
16.- Hitos y pintadas blanco amarillas, indicadores de la senda. Carro del Diablo.
* La senda se hace reconocible del todo cuando nos acercamos a la pared de Las Milaneras -altos de las zonas anterior y post. a Tres Cestos-. El desnivel es más acusado. Esta ruta y la Integral son las más exigentes de la Pedriza, a mi parecer. Se admiten discrepancias argumentadas.
17.- Hitos y senda, además robles melojo
* Los robles melojo están espléndidos, con sus hojas recién estrenadas. Viéndolos te planteas el porqué de introducir pinos en esta zona, no exenta de arbolado, como demuestran la cantidad de brotes de roble que encuentras al paso. Los pinos parecen colocados con tiralíneas y es que prácticamente es así, están en hileras y muy cercanos unos de otros; no llegando a adquirir gran tamaño.
18.- Hito y Pared
* El paso va completamente pegado a la pared en un punto. Cualquier opción cercana es más complicada y por algo éste fue elegido, en su momento, como el óptimo.
No he mencionado, en contra de mi costumbre, la hora que es. Como, casi desde el principio, sabemos que no es el mejor itinerario para llegar lo estoy dejando de lado.
19.- Senda, paso conflictivo y el guía reptando
* Llegamos al punto, quizá, más difícil de todo el recorrido. Ya lo pasamos en ocasiones anteriores; en la última "alguien" había colocado presas pegadas con cemento, para facilitar la subida. Han desaparecido. Supongo que habrá sido algún amante de lo natural, en la idea de que el que esté capacitado pase y el que no... que se dé la vuelta. Y no me parece mal. El monte pone a prueba tus capacidades y se aprende a valorar los riesgos. Está mojada la piedra, ya lo dije, durante todo el recorrido está mojada, cosas de la lluvia. Esto pone un plus de dificultad a la cuestión. Paso primera ¿? No, no estoy más capacitada para ello, es que el guía me facilita el paso sujetándome las botas en los puntos inestables en que las coloco ¡no hay otros! El lo tendrá más crudo al no haber tampoco presas cercanas para las manos.
20.- Senda. Piedras curiosas y "ventanas: dos" entre ellas, en plano medio. A su izda. al fondo, el canto de El Tolmo, también al fondo, dcha. refugio Francisco Giner de los Ríos. Arriba: izda. el Risco del Yelmo, dcha. Peña Sirio
* Desde donde estamos se ve el Embalse de Santillana, el pueblo de Manzanares el Real y hasta el castillo debe verse -con buena vista-; las nubes movedizas lo han permitido. Abajo discurre el arroyo de la Dehesilla que viene del collado de su nombre y que se junta, a la altura del refugio, con el que viene del collado del Miradero, el llamado Arroyo de los Pollos, aportando ambos sus aguas al de la Majadilla. La llamada autopista de la Pedriza discurre en paralelo al mismo
21.- 1ª Vista del mogote Tres Cestos y Milaneras, detrás
* Pasado lo más crudo del asunto, alguna trepadita más, mucho tiento por los resbalones de contínuo y aparecen los tres cestos, uno encima de otro ¡que me digo yo! Está lloviznando ¡qué novedad! recorremos el entorno en busca de cobijo y lo encontraremos al otro lado, una pequeña visera -rocosa-, que será suficiente ¡deja de llover! Y miro el reloj... que ya es hora, son las 5 y diez, buena hora para comer.
22.- Tres Cestos vistos del otro lado... por la otra "cara"
* Han transcurrido 5 horas y media desde que iniciamos la marcha. Llegar aquí, en condiciones normales y por las sendas "normales" lleva unas tres horas y media. Entiendo que las dos restantes son achacables, fundamentalmente, al error de entrada y, después, al estado de la roca, que nos obliga a andar con todas las cautelas.
Hola Paquita. ¡Cundo estes en Huelva me avisas! ¡Sin falta!
ResponderEliminarTe dejo aquí unos besos, Paquita La Exploradora, toítos para tí. Un día de estos entro con calma y acabo de leerte, que llevo una temporada que estoy y no estoy. Pero amos, que estar estoy bien.
ResponderEliminarGracias por haber pensado en mi.