Aclaración Inicial: vaya por delante que no soy una profesional de la materia, no soy psiquiatra, ni psicólogo, ni psicoterapeuta, ni periodista especializado ... y muchas cosas más que no soy!
Sólo soy alguien con conocimiento cercano del tema, porque lo padeció una amiga "del alma". Intentaré trasladar aquí lo que recuerdo de lo que me contó, con su permiso, aunque velaré su identidad pues ése es su deseo y aunque no comparto sus razones las respeto.
Queda pues claro que sólo voy a referirme a un caso particular, sin perjuicio de que esto pueda servir de alguna ayuda a alguien en condiciones similares, aunque no iguales.
Mi amiga, a la que llamaré Clara, es el arquetipo de la mujer moderna, trabajadora por cuenta ajena, con un salario aceptable -comparado a la gran mayoría- un marido aceptable -no se emborracha, no la pega y no se juega el sueldo, como dirían las mujeres de antes- con el que compartía aficiones y disentía en muchas cuestiones, una casa espaciosa, dos hijos sanos, juiciosos y, relativamente, estudiosos.
En resumen, disfrutaba de una situación favorable, alejada de las penurias económicas, de los disgustos con los hijos... esas cosas.
Pero... cayó en una fuerte depresión. Perdió el apetito totalmente, perdió el sueño, se vio aquejada de fuertes dolores de espalda, se quedó sin reflejos... ¿Por qué le pasó esto?
Ella hizo repaso de todo aquello que la hubiera abocado; en principio no encontraba justificación alguna, pero... escarbando, escarbando, pensó ¿y si es el exceso de responsabilidad que he asumido? -desde 10 meses atrás ocupaba un cargo para el que se sentía escásamente preparada, tenía presiones por arriba y presiones por abajo. Fuera o no cierto el caso es que ella lo vivía así. Se trató farmacológicamente durante tres meses escasos y abandonó la medicación, con conocimiento de la psiquiatra, porque se sentía una drogadicta "legal". Parecía estar remontando, pero no sería hasta pasado un año largo cuando realmente sintió que el fantasma "ya" había pasado.
Pero... volvió a ocurrir. Aquello la noqueó del todo. ¡Otra vez! ¿Por qué? ¿En qué me he equivocado de nuevo?
De nuevo acudió a un profesional, de nuevo se medicó, y no levantó cabeza hasta pasados cinco meses. Cinco meses pueden ser una eternidad cuando se padece "la muerte en vida", porque eso es la depresión, adquirió un estado de insensibilidad total, nada la llegaba, todo la atemorizaba, no quería tomar decisiones, la mínima cosa podía ser el problema más grande, contínuamente cambiaba de idea, era la inseguridad hecha persona.
Y le volvió a pasar una tercera vez, y entonces leyó que las depresiones mal tratadas se hacen recurrentes, casi siempre, y ella recordó su fobia a la medicación y entonces se preguntó por qué no se lo habían explicado claramente, por qué no le dijeron que una depresión mal curada -leyó que lo aconsejable era tratarse durante un año al menos, para reducir las posibilidades de repetición- posiblemente volvería a hacer su aparición. ¡Echó a faltar tanta información!
Nuevamente tardó cinco meses largos en ver despejado el horizonte, pero... no duraría mucho. Tras un periodo similar cayó de nuevo.
Durante todos ellos, durante todo el tiempo, se dedicó a hacer examen de conciencia, porque no estaba claro si lo suyo tenía origen orgánico -endógeno, lo llaman- o se debía a factores externos. Intentó modificar todas aquellas conductas que no le satisfacían, todas las actitudes vitales que no estuvieran de acuerdo realmente con lo que pensaba. Se movió.
Acudió a su psiquiatra actual -el que compartimos- probó nuevas medicaciones sin resultado -era una paciente atípica, no respondía a los tratamientos en la forma indicada en los prospectos y en los libros- y... perdió la esperanza.
Lo vio todo negro, absolutamente negro, su vida había desembocado en un desastre, no había sabido llevarla, amargaba la vida de su familia, daba un ejemplo repugnante a sus hijos con su comportamiento, sin querer salir de casa, sin querer hablar con nadie, casi siempre acurrucada, encerrada en sí misma, demostración absoluta de cobardía, eso es lo que veía, así lo sentía.
Por eso se decidió. Con tanto cambio de medicación había dejado infinidad de envases casi completos, había conservado todos... y un día, al quedarse sola por la mañana se preparó, se los puso todos delante, confeccionó una nota dejando claro que la culpa era exclusivamente suya... y comenzó.
Primero de dos en dos, después de cuatro en cuatro, finalmente de ocho en ocho. Se las tomó todas, 220 pastillas que contó meticulosamente.
A la una del mediodía, quizás las dos, la encontró su hija -no pensó en ella- estaba como dormida sobre el escritorio, no pudiendo levantarla pidió ayuda. Ella despertó muchas horas después, tras un lavado gástrico. Los doctores le dijeron que, gracias a los envases vacíos que había dejado debidamente embolsados, habían sabido lo que había ingerido.
¿Por qué lo hizo? Creo que a eso ya le di respuesta.
¿No pensó en su familia? ¿En el gran daño, irreparable daño, que les haría?
Para Clara, para su mente "enferma" era muy superior el daño que les estaba reportando que el que, suponía, tendrían con su "desaparición". "Vivía" su vida como un error, un error continuado, un sentimiento de frustración, de autofrustración, la envolvía permanentemente. Lo evaluó y decidió "cortar por lo insano".
Dicen que una persona que ha atentado contra su vida es muy posible que vuelva a hacerlo, y, en el caso de mi amiga, se cumplió.
Decidida a considerar su enfermedad como cualquier otra de carácter crónico tomaba su medicación diariamente, hasta que... transcurridos cinco años de "normalidad" su médico le dijo de probar a dejarla ¿quizás era innecesaria?
En estas cosas todo son ensayos, se sabe que ante determinados síntomas determinada medicación actúa, pero realmente no se puede -o quizás no se hace por problemas económicos- valorar el nivel de serotonina, noreprinefina o dopamina en el cerebro, eso nos dice el médico que compartimos. Esto no es como un análisis de sangre en el que rápidamente te calculan los niveles plasmáticos. En esto... queda mucho camino por recorrer, se está en mantillas, o casi.
Abandonó la medicación graduamente, tal y como se lo había prescrito el médico, y a los tres o cuatro meses del abandono definitivo... reapareció. Pese a lo trastornada que estaba intentó seguir haciendo una vida "normal", acudía al trabajo, hacíamos excursiones juntas pero -rechazando seguir toda la vida "en el fondo de un pozo" simulando que no estaba mal, simulando que disfrutaba, simulando que quería... cuando realmente no quería nada, no quería a nadie y menos a sí misma, decidida a acabar de una vez con una existencia ingrata para ella, ingrata para todos- repitió, nuevamente la encontraron a tiempo. Pero la depresión seguía con ella y cuatro semanas más tarde, con una excusa, abandonó su casa una mañana, adquirió una receta -le habían vetado el administarse ella la medicación- y se alejó. Se alejó lo bastante donde no pudieran encontrarla, tomó transporte público y se adentró en territorio conocido, saliéndose de los caminos habituales, para dificultar la localización.
Aún en ese momento llegó a tener un momento de duda -eso me dijo- pero lo soslayó, ¡ya no me vuelvo atrás! y continuó.
Llegada a un punto decidió que ese podía ser un buen lugar, me contó que hacía un día espléndido, con buena temperatura, se acomodó, se tomó lo recién comprado con una botellita de agua, que había preparado, y se dispuso a dormir, tapándose previamente la cabeza, no le gustaban los buitres que veía merodeando.
Y despertó, doce horas después despertó, era plena noche. No había resultado ¿Qué hacer? Quedarse y esperar que transcurriera el tiempo o bajar, volver. Y bajó, dejó que apareciera la luz, algo de luz, y comenzó la bajada. No se lo había puesto fácil, no, tuvo que atravesar infinidad de zarzas, saltar por las rocas, no sabe cuánto tardó en hacerlo pero llegó al pueblo. Desde allí llamaría a su casa. Estaban todos en pie, habían alertado a la policía, habían contactado con cuantos hoteles se les había ocurrido, hasta que recibieron la llamada. ¡Estoy bien! Vale... aquí os espero.
Su hijo pasó todo el tiempo, casi, en estado de shock, le dijo que habían sido las horas más largas de su vida, la distinta medida que del tiempo tenemos según el momento que estemos transitando.
Esta vez había sido ella la que había elegido vivir; pese a todo y a que se ha prometido no volver a dejar la medicación -le diga lo que le diga el médico- no tiene garantizado que no le vuelva a pasar ¡Una jodienda, oye! Añado que Clara es una disfrutadora consciente, no se olvida del mundo, pero ha decidido no sufrir gratuitamente con boberías, por muy cerca que tenga esas boberías, no quiere perder la exacta medida de las cosas.
Como escribió Borges y otros antes que él -actualmente lo ha hecho García Márquez- "Si pudiera volver a vivir mi vida(...) tendría más problemas verdaderos y menos imaginarios"
Tras la broma... la conclusión: y es que, de la depresión se sale, por muy negro y muy hundido que te veas se sale, pese a que la autoestima desaparezca totalmente, pese a que te sientas nefast@ para tu familia, pese a que sientas la carga de ser un mal para tus hijos, para tu pareja, pese a que consideres que estarían mucho mejor sin ti, resulta... que sigue habiendo vida y, un día, de nuevo volverás a ser tú, no ese espectro aberrante en que te ves convertid@, ese algo en el que no te reconoces, la inversa de ti.
Pide ayuda, no te averguence pedir ayuda, rodéate de buenos amigos, rodéate de cariño, da cariño, date, con generosidad, sin medida, Vive la Vida.
PAQUITA
CUANDO TENÍA UNOS 18 AÑOS.INTENTÉ SUICIDARME UN PAR DE VECES..
ResponderEliminarNO HABLARÉ DEL DAÑO QUE CAUSÉ..PARA NO HASTIAR..
..AÑOS DESPUÉS UN AMIGO ME PIDIÓ AYUDA..PERO NO SUPE AYUDARLE..Y AL DÍA SIGUIENTE SE SUICIDÓ...
COMO VES ..NO SOY PSIQUIATRA...NO SOY TERAPEUTA..NO SOY MUCHAS COSAS..
PERO SÍ HE VIVIDO SUICIDIOS..E INTENTOS DEL MISMO..
SÓLO PUEDO DECIR..QUE TARDÉ MUCHÍSIMO EN RECONCILIARME CON LA VIDA..
NO PODRÍA ACONSEJAR NI SUGERIR UNA LUZ A QUIENES HABITAN EN DICHA PENUMBRA...
PERO SÍ SÉ QUE EXISTE UN MOMENTO EN QUE NADA ACEPTAS OÍR..
SÓLO ANHELAS DESCANSAR..
NO SÉ QUÉ ME CAMBIÓ..ME LO HE PREGUNTADO MIL VECES A LO LARGO DE MI VIDA..
HOY ABRAZO PAZ..
EL SUICIDIO ME PARECE UNA LOCURA..PERO CREO COMPRENDER A ESAS GENTES.
HOY..PAQUITA..SIENTO QUE SÓLO POR LOS AFECTOS SIMPLEMENTE POR ELLOS..
¡VALE LA PENA VIVIR!
PARECE SIMPLE..PERO PARA MÍ FUE TODAUNA VIDA PARA APRENDERLO
EN FIN..
TUVE MUCHAS SENSACIONES..MIENTRAS TE DEJABA LÍNEAS AQUÍ..
MUCHAS DUDAS SI ESCRIBIRLAS O NO
NO CREO QUE LE SIRVAN A NADIE
PERO ALGO..QUE DESCONOZCO..ME GUIÓ A ESCRIBIRLAS
MUCHOS CARIÑOS
RENÉ
Sabina lo decía con musiquita: "Más de cien palabras, más de cien motivos para no cortarse de un tajo las venas, más de cien pupilas donde vernos vivos, más de cien mentiras que valen la pena". Nosotros elegimos el número y las excusas. Respeto para quienes no han encontrado ni una sola excusa.
ResponderEliminarEpv
PAQUITA..VI TUS LÍNEAS..EN MI CASA..
ResponderEliminarVINE A DARTE LAS GRACIAS.
Y ME ENCONTRÉ CON LAS PALABRAS DE
"ELENA.."QUISE TAMBIÉN AGRADECERLE..NO ENCONTRÉ SU BITÁCORA..
UN ABRAZO DE GRATITUD A AMBAS..
EST MUNDO VIRTUAL ME HA RAGALADO AFECTO TAMBIÉN..ALGO QUE JAMÁS HUBIESE IMAGINADO.
MÁS RAZONES PARA VALORAR EL MILAGRO DE "ESTAR CON VIDA"
POR ELLO DECÍA YO QUE LOS AFECTOS LE HAN DADO EL MAYOR SENTIDO A MI VIDA..
RENÉ
PD..AÚN NO DESCUBRO DONDE CORRESPONDE A VECES RESPONDER ´LINEAS..
ESPERO QUE MIS DIÁLOGOS PAQUITA NO ENTORPEZCAN TU POST..
USO LOS MAILS..CUANDO TENGO QUE PREGUNTAR O AVISAR DE ALGO..
PARA AGRADECER A ELENA TUVE QUE AUMENTAR LÍNEAS EN EST ARTÍCULO..
NO SÉ BIEN ..AÚN..LAS REGLAS DEL CEREMONIAL DE ESTE MUNDO VIRTUAL..
Creo que sí, Paquita, que quién no encuentre razones para que la vida les merezca la pena en sí mismos, siempre pueden encontrar una razón en no arrebatarles sus razones a otros (aunque, a veces, resulte muy duro aceptar que eso es así). Siempre, cada aurora, nos ofrece la oportunidad para empezar a vivir la vida.
ResponderEliminarUn abrazo
Rafa
He vivido estas situaciones como profesional y creo que, en la mayoría de los casos, he hecho lo que he podido.
ResponderEliminarLas he vivido también en mi entorno, y no he sabido ni se muy bien que puedo hacer, creo que no he estado a la altura...
Eso habla de lo complejo que se vuelve todo cuando te toca...Pero todo lo que habéis dicho sirve, vaya si sirve...
Gracias.
mi experiencia se reduce a un caso más tozudo que todos estos. 22 años y a la tercera intentona encontró la forma de que no lo encontráramos a tiempo. Todavía no tengo claro si fue bueno o no para él, porque su sufrimiento real solo podían alcanzarlo a entender él. Pero ver a sus padres nos sigue destroznado a todos los que fuimos sus amigos. El tiempo pasa, David, pero todavía nos acordamos.
ResponderEliminarAmbas sabemos que Clara, salió cuando "empezo a darse con generosidad, SIN MEDIDA" que la sacó el cariño que dió, y que se dió, y se fué alejando poco a poco de ese tremendo mal. Descubrir que amarse y amar es la cura, lleva su tiempo verdá amiga. TE QUIERO
ResponderEliminarLalola
HOY VIVO POR QUE QUIRO VIVIR.
ResponderEliminarNACI PARA VIVIR.
LA VIDA LO QUISO ASI.
HOY ESTOY EN ESTE LUGAR
MAÑANA QUIEN LO PUEDE SABER.
INTENTE MARCHAR
LA VIDA NO ME DEJO IR.
NI YO HOY DESEO MARCHAR.
BESO PAQUITA
MARINA MONTECRISTO
Esta es la 2ª depre que sufro..de la 1ª siempre presente,duró 6 meses,me sacó mi hijo de 2 años,simplemente viendo unas diapositivas. Al ver a mi niño con una tristeza infinita en sus ojitos, algo dentro de mí se reveló y empezé a luchar de nuevo,con tiempo salí a flote .A mi hijo tambien se le notó más alegría..
ResponderEliminarAhora al cabo de 23 años he vuelto a recaer llevo un año y medio de tratamiento, y siempre encuentro la razón por la que seguir adelante.Aunque es muy duro,gracias a mis hijos, y a mis amigas(pues me rodeo de buena gente y sino suelto lastre,y adios) pues sigo en la lucha por salir...aunque hay días muy duros.
Paqui le dices a tu amiga.que sí me necesita...tú ya sabes mi paradero...y para los demᨴANIMO que la vida es bella .
MUA
GRACIAS por vuestra cercanía, a los que lo habéis plasmado por escrito y también a los que os habéis retraído, por timidez o cualquier otro motivo; algún día encontraréis la fuerza para desembuchar todo aquello que pretendéis ignorar sobre vosotros, que no os gusta, que os da miedo, que deberíais cambiar ¿Soy demasiado directa? Va a ser que sí.
ResponderEliminarUn abrazo, muchos abrazos. PAQUITA
He estado fuera, no sé si estoy a tiempo de hacerte llegar mi comentario. Me ha impactado este artículo como pocos. No puedo entender qué lleva a una persona aparentemente sin graves problemas a esta enfermedad. Siento un respeto enorme y no me atrevo a recomendar nada. Sólo que me alegro infinitamente por tu amiga y ojalá no vuelva a recaer nunca. Como decía Maruja Torres en un artículo referido a las malas noticias que nos llegan, que casualmente he leído hoy: "Disfrutamos de la dosis justa de falta de empatía necesaria para no enloquecer".
ResponderEliminarEstoy aquí.
Pura
"Disfrutamos de la dosis justa de falta de empatía necesaria para no enloquecer".
ResponderEliminarLa justa, pero tampoco menos. Gracias por estar ahí. Mi amiga lee ésto y le llegará, como todos los demás.
Bienvenida -ya sé que tuviste mitad y mitad: de lluvia y de sol-
PAQUITA
Creo que muy pocas veces uno puede decir q está deprimido.. esa es una de las veces.. y más cuando se piensa dos razones para querer levantarse la mañana siguiente...
ResponderEliminarEs una muy buena visión y redacción. Realmente me hac ver las cosas de otra manera a pesar de querer cortar con este sufrimiento que llevo. Si no fuese que haría sentir mal a mi familia yo no hubiese escrito esto ahora...
A Juan Pablo:
ResponderEliminarHe leído tu comentario y quiero que sepas que posiblemente todo, o casi, de lo que estés pasando lo he sentido anteriormente. Lo expuesto fue fruto de mi propia experiencia, no tuve que ir más lejos, ese "temer" el comienzo de un nuevo día, querer estar solo, a oscuras, cerrado en uno mismo, ausente de todo, comido por el miedo a todo, comido ... Si quieres compartir lo que sientes, ¡como lo vives!, hablar ... aquí estoy. Un abrazo, un fuerte abrazo. PAQUITA
Hola, no habia reconocido hasta ahora que poseo la firme convicción de un suicida,desde que me levanto en la mañana no encuentro un motivo que alegre, por lo menos, un poquito mi vida. he intentado por medio de la religión, buscando amigos, pero no logro así sea una mañana levantarme sin ese dolor intenso que te sube desde el pecho a la garganta, creo que la soledad en al cual me encierro a diario creyendo que es mi única amiga es uno de los peores consejeros que he tenido, ¡hasta ahora no me habia atrevido a confesarselo a alguien!, y he buscado sitios web de ayuda en mi país (Colombia) pero no he conseguido ninguno, y tengo miedo de hablar pues creo que a nadie la va a interesar o simplemente van a decir que es solo un capricho pasajero.¡La verdad no se a quien acudir! y lo preocupante es que llevo años con este problema, en el momento tengo 32 años de edad y este deseo comenzó como a los 16, no sé a quien acudir!!!
ResponderEliminarla verdad no se qe hago acaaa
ResponderEliminaryo no tengo ningun problema de suicidio, pero estaba buscando informacion para realizar una monografia para la universidad acerca de las causas qe ocasionan los suicidios y cuando vi esto se me ocurrio comenta algo, ya qe nunca esta de mas aconsejar a qien tiene un problema...
aiii la verdad qe es increible como tanta gente se qiere qitar la vidaaaaaa..
mas alla de los problemas qe tengo, qe entiendo qe pueden ser horribless... deben pensar en ustedess! PIENSEN AMIGOSSSSSSSS
suicidarse no es ninguna salidaaa
suicidarse es sinonimo de cobarde, es dejar el mundo debido a tener miedo de seguir viviendo. pero con eso no se soluciona NADAAAA!!!!!!!! lo unico qe ocasiona es qe todos sufran, amigos, parientes, conocidos...
la vida es algo taan bellooo!
dios nos la ha dado para vivirlaaa.
PUES VIVAMOSLA ENTONCESSSS!
un beso grandeeee
yy para las personas qe se qieren siucudar, les recomiendo no lo hagan y piesennn, pienseeeeeeeeennnn o vallan a un psiqiatra o psicologoooo.
ADIOSSSSSSSSSSSSSSSSSS.
NO OLVIDEN QE SIEMPPRE HAY AL MENOS UNA PERSONA EN ESTE MUNDO QE LOS AMA Y QE SUFRIRIA SIN USTEDESSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS.
MARIA DEL CARMEN BARBILLA.
La verdad es que me siento un poco mal después de leer esto.. me siento tan igual a tu amiga, que es como si estuvieras hablando de mí, con la diferencia de que yo no he pedido ayuda, ni la quiero, ni he tenido medicaciones para sentirme "mejor". He perdido la cuenta de las veces en que he deseado morir, y que he pensado que nadie sufriría sin mi existencia. Tengo quizas 2 amigos que ni siquiera se preocupan lo necesario de mi como para vivir por ellos. y de mi familia ni hablar, porque probablemente soy una verdadera carga. Estoy todo el dia amargandoel ambiente, creando conflictos que no puedo detener. Quizas sin mi vivirian todos mas tranquilos y hasta se ahorrarian un poco de dinero, porque no gastan mucho en mi. Y pensandolo bien, si me hubieran medicado habría temrinado igual que tu amiga... tirada y dormida, con la diferencia de que como andie nota mi ausencia, no se habrian dado cuenta sino a los días.
ResponderEliminarMaldigo cada día de mi existencia, y ni siquiera con tus bonitas palabras (puedo reconocerlas) al fin de tuhistoria, me siento bien con esta vida de mierda....
Juan Pablo,,, te entiendo perfectamente,,,,, es casi como si hibieras escrito de mis manos... y hasta tenemos la misma edad,,, esto es muy duro,,, y lo qu elo hace mas duro, es la ignorancia de la familia,sobre temas como la depresion cronica, el suicidio, y afines.... tambien vivo en colombia.. si quieres escribeme, un abrazo.
ResponderEliminarsaluso a paquita y a todos, es la primer vez que veo este blog
danielandrespat@hotmail.com
Me he dado cuenta, que contrario a lo qu emucah gente ¨normal¨puede pensar,,, es muy util tener amigos que esten viviendo situaciones similares,, porque desafortunadamente,, aparte tal vez de algun buen siquiatra,,, son los unicos capaces de entendernos,,, y lo mas importante, de creernos,,, lo que nos pasa,, sin que nos simplemente ...animo,,,o miren las cosas buenas de la vida,,,, la verdad, es qu een un estado depresivo profundo,,, ese tipo de alientos,, no sirven para nada,,, y mas bien , dan ganas de mandarlos a la porra,,,, aun reconociendo que la buena voluntad.... asi qu esi hay alguien en Colombia qu enecesite un amigo,, y que tambien quiera ayudar,,, aqui hay otro boludo,, que comprende por experiencia muchas de estas situaciones...
ResponderEliminarsde cualquier forma, al anonimo qu eescribio qu eno ha pedido ayuda ni le interesa,,, no creo qu eno te interese,,, lo que pasa es que no crees qu ela puedas encontrar , y te entiendo,, es dificil,,, pero en personas qu ehayan vivido lo mismo, puedes encontrar algo de alvio, asi sea minimo..
saludos..
http://milrazonesparasuicidarse.wordpress.com/
ResponderEliminarPersonalmente estoy viviendo esto, perdí, a mi pareja, mi independencia, mi trabajo, mis amigos, mi norte. Mi familia ya no me apoya y ya solo quedo yo y esta difícil decisión, es difícil encontrar alguien en quien apoyarte en algún momento pensé que las cosas irían mejor pero vaya bodrio el circulo se cierra nuevamente.
ResponderEliminarYo estoy actualmente en un periodo depresivo. Todo lo que se lee y escucha apunta a que debemos pedir ayuda y actuar, no dejarse llevar por la pasividad en que te abandona/s. Al menos, salir fuera, tomar el aire, no enclaustrarse, mirar en la distancia, más allá de las cuatro paredes de una casa.
ResponderEliminarNo debemos olvidar que de esto se sale, aunque no sepamos cuanto tiempo nos costará... se sale, como otras veces.
Hacer ejercicio, por ejemplo: correr, quizá sea una receta magistral, puesto que todos los corredores están enganchados y quieren engancharte.
Hola, yo ya llevo con este tipo de problema mucho tiempo también, a periodos con medicación otros sin, pero sol ose una cosa, todo lo que he leido aquí, me parece cierto, auqnue tengo/quisiera añadir una cosa personal, a mayoría de vdes. han comentado que con ""cariño y ayuda"" se sale de est, antees o después, pero yo les pregunto, que pasa con las perosnas que ne nmuestras familias, le padres p.e. nos gira la espalda bien por ingnorancia, bien por cansancio, la madre, no sabe más, porque no entiende más del tema, y uno mismo anda ya más perdido que una bala a pesar de que lleva años tratando co medicos, y a pessar de la medicación el sentimiente de desorientación, de no servir para nada,la dificultad de levantarse ñor la mañana, la desorientación, y otros sintomas, es el pan de cada día,acaso eso no es motivo a la larga para ir pensando en escribir una carta de despido por ya nada parece tener sentido ????, al menos ese es lo que yo siento en estos momentos y no hay medicamento que por ahora me esté ayudando y en cuanto a los medicos, muchos son los del grupo que no se toman en serio lo del aviso cuando se lo cuento, o eso al menos parece,porque sin inmutarse permancen en su escritorio limitandose a escribir recetas y queriendo arreglarlo todo a base de medicamentos....Un saludo a todos y a todas por vuestra valentía por escribir aquí y dar animos auqnue no siempre sea d demasiada ayuda.....
ResponderEliminarAcabo de leer tu comentario y, también, hace escasamente 10 días que tengo clara conciencia de haber salido de mi último periodo depresivo... que es el 8º. El primero fue hace... 19 años, cumplirá en mayo.
ResponderEliminarCreo haber escrito de mis 4 tentativas de suicidio, la última me dejó secuelas físicas visibles, algo tambíen la tercera.
Ahora, si no tuviera grabado a fuego en mi cerebro, que de la depresión se sale... aunque no se pueda predecir el momento, posiblemente ¿? repetiría tamaño desatino.
Porque lo es, porque aunque estés sufriendo uno de los peores momentos, aunque veas que tu familia es de nula ayuda, te quieren y sufren por ti, no sabiendo cómo ayudarte, porque es difícil, mucho, si tan siquiera nosotros podemos comprender lo que nos pasa y por qué.
Y es que, me temo, no hay respuesta. Algún día se confirmará ¿? que los pacientes depresivos adolecemos de determinada sustancia neuronal, o sabediosqué, que por ello ¿? tenemos predisposición a este padecimiento infernal, que hace que no nos reconozcamos en lo que nos convertimos... transitoriamente, algo despreciable a nuestros ojos, puesto que la autoestima la tenemos perdida, o, al menos, oculta.
Quisiera insuflarte ánimos, pese a saber que cuando uno está con depresión severa de poco le sirven las palabras.
Pero, REPITO, SIEMPRE SE SALE y por ello, más vale que no atentes con tu vida, para no hacerte más difícil aún la existencia, caso de sobrivivir.
SI NO FUERA ASÍ, ARRUINARÍAS LA VIDA DE TUS ALLEGADOS. Pues se quedarían con el sentimiento, de por vida, de no haberte ayudado lo suficiente.
Un fuerte abrazo desde Madrid
PAQUITA