Las fotos llevan una explicación y al relato lo precede un *asterisco. Para VER las FOTOS, sus detalles, DEBEN AGRANDARSE clicando sobre ellas. AÑADIDO el 31/5/2013: LA FERRATA HA SIDO DESMONTADA. Se puede acceder a la parte superior por el camino utilizado para la vuelta.
1.- Hacia el fondo de las Hoces del río Salado
2.- Vista ant. y pared ferrata con usuarios sobre ella.
* Tenemos previsto hacer la Vía ferrata de Peña Ruaba con el grupo de la ARCDBuenavista el 1 mayo
3.- Árboles frutales en flor, frente a ferrata.
* Hay unos cuantos entusiastas desconocedores del medio, por lo que a uno de ellos, Juan-Carlos, se le ocurre hacer prácticas en alguna cercana a Madrid.
4.- Albergue rural Hoces del Salado.
5.- Avanzadilla del grupo en las clavijas de la Vía ferrata
* La única está en la Provincia de Guadalajara: Escaleras al Cielo. Abierta por Luis con ayuda de su cuñado y su sobrino. Puestos al habla con él se ofrece a hacernos de guía.
El día fijado fue el 21 de abril. Seremos 8 los que vamos por la A-2.
6.- Inicio de la ferrata. Cadena y clavijas.
* Tras atravesar Sigüenza, nos encaminamos a la pedanía de Santamera, término municipal de Riofrío del Llano, en dirección a Atienza. Una vez llegados, nos encontramos el albergue rural Hoces del Salado
7.- Grupo último en la escalera.
8.- Coronando la parte más aérea de los riscos.
* Resulta incomprensible que haya cerrado por falta de demanda ¿? estando a pie de la única ferrata en el entorno de Madrid. Estoy hablando de un radio cercano, o superior, a los 100 kms.
El propietario nos enseña la lista de precios que manejaba, similar a los de cualquier refugio de la F.E. de Montañismo para federados.
9.- Desde posición anterior: Vista hacia atrás.
*
Luis va en cabeza. Tras él: Erika, Geir, yo, Ana, Marisa, Juan-Carlos y
Blas. Lo óptimo, para avanzar con rapidez, es ir en pareja. Nosotros no
vamos buscando la excelencia, sólo ¡casi ná! disfrutar en compañía.
10.- Final del "espolón". Vista sobre la población de Santamera
11.- Vista lateral de los riscos recorridos.
12.- Idem anterior. En el valle: palomares en desuso.
13.- Vista más completa de la pedanía de Santamera
14.- Vista desde arriba del las Hoces y el embalse del Atance. Una preciosidad.
15.- Visión más aérea, y distante, de la expuesta en la foto 12
16.- A la derecha de anterior. Grupo menos una.
17.- Plano cercano parte superior derecha foto 14. Zona buitreras.
18.- Parte más distante recorrido. Vuelta por barranco
19.- De bajada
20.- Sendero. Enebros
21.- Recuperando la senda. Retamas en flor, aliagas y 4 buitres
22.- Parte más espectacular de la vuelta.
23.- Senda faja
24.- Misma faja,
desde el mismo sitio,
vista hacia atrás
25.- Seguimos en la faja
NOTA: A finales de abril, hubo cambios en blogger, a los que aún no me he acomodado.
Si en el día de hoy has observado movimientos extraños en este texto es debido a ello.
Disculpa el mareo... que yo tengo también.
26.- Cercanos al inicio
* La situación de la ferrata es inconfundible, al lado del cementerio.
27.- Vista general del recorrido de la ferrata en su cara ¿? noroeste?
Pared cementerio
Crónica siguiente http://paqquita.blogspot.com.es/2012/11/vuelta-salinas-de-imon-guadalajara.html
PAQUITA
DECLARACIÓN de INTENCIONES: Dirigida a aquellos Lectores Potenciales que, al entrar en la lectura de estas Mis Criaturas, sientan que no les gusta y ni siquiera les divierte. Abandonen de inmediato. Estas páginas están concebidas para Mi Memoria, mi Divertimento y el de Unos Pocos. Si tú no estás en este segundo grupo, yo no soy la persona adecuada para ti, deja esto y date una vuelta; seguro hallarás lo que buscas *** VER http://perrosflautadelmundo.blogspot.com.es/
mayo 11, 2012
mayo 10, 2012
Marcha Global 12 mayo Getafe–Leganés–Atocha–Sol
Posted on mayo 4, 2012 by comunicaciongt http://getafe.tomalosbarrios.net/
En una semana -ahora menos- aproximadamente tendrá lugar el primer aniversario del nacimiento del 15M. Para celebrarlo, para hacer visible que seguimos en las calles y no cedemos en nuestras reivindicaciones, se van a celebrar una serie de actos y acciones que tendrán su punto culmen en la manifestación del día 12 en SOL.
Los pueblos y barrios del Sur partiremos en una columna unitaria hacia la Puerta del Sol, a las 13 horas desde la estación de Cercanías de Leganés Central.
En Getafe quedaremos a las 12 horas en la estación Getafe Central, desde la que partiremos en bici, a pie y en metro hacia la estación Leganés Central, donde nos uniremos al resto de pueblos del sur.
Anímate a participar en la marcha y la manifestación, porque ésta es la lucha del 99% contra el 1% y ue sólo sumando conseguiremos los objetivos comunes que compartimos.
PARTICIPA y ayúdanos a difundir el evento entre tus contactos.
¡TE ESPERAMOS!!!
En una semana -ahora menos- aproximadamente tendrá lugar el primer aniversario del nacimiento del 15M. Para celebrarlo, para hacer visible que seguimos en las calles y no cedemos en nuestras reivindicaciones, se van a celebrar una serie de actos y acciones que tendrán su punto culmen en la manifestación del día 12 en SOL.
Los pueblos y barrios del Sur partiremos en una columna unitaria hacia la Puerta del Sol, a las 13 horas desde la estación de Cercanías de Leganés Central.
En Getafe quedaremos a las 12 horas en la estación Getafe Central, desde la que partiremos en bici, a pie y en metro hacia la estación Leganés Central, donde nos uniremos al resto de pueblos del sur.
Anímate a participar en la marcha y la manifestación, porque ésta es la lucha del 99% contra el 1% y ue sólo sumando conseguiremos los objetivos comunes que compartimos.
PARTICIPA y ayúdanos a difundir el evento entre tus contactos.
¡TE ESPERAMOS!!!
Fondo Extra. Solidaridad mte. Tasas a Cajeros Autom.
Fondo Extraordinario de Solidaridad mediante tasas a los Cajeros
Posted on abril 17, 2012. Copiado de la página getafe.tomalosbarrios.net/
La situación económica en la que nos encontramos, y que no tiene visos de remitir a corto plazo, pone a los Ayuntamientos en la tesitura de seguir prestando servicios, a una ciudadanía cada vez más necesitada y sin contar con los ingresos, ni con la financiación necesaria para prestarlos.
Sin obviar la necesaria austeridad en el gasto erradicando el despilfarro, es necesario que la Administración local busque nuevas fuentes de ingresos distintos al urbanismo y a la especulación Inmobiliaria.
Los ciudadanos no podemos seguir siendo los paganinis de la crisis, los únicos paganos. Tendrán que pagar también los que más tienen y los que más ganan. Los mismos que nos han metido en esta crisis, los bancos.
El pago que están realizando en Getafe por los cajeros automáticos, es cuanto menos ridículo. Estos cajeros son de dos tipos, los que se encuentran en la fachada exterior y los que se encuentran en el interior y son accesibles las 24 horas del día. (Los que se encuentran en la fachada están ocupando la vía pública, se benefician de los servicios públicos, especialmente alumbrado y Limpieza, y al mismo tiempo utilizan las aceras para vender sus productos. A estos cajeros proponemos un incremento de las tasas actuales ridículas, tasa que se establecerá en función de la categoría de la vía, con un mínimo de 14 euros al día en las vías secundarias y 21 euros al día en las principales.
Los cajeros que se encuentran en el interior, pero que son accesibles las 24 horas del día, también proponemos una tasa, ya que la modificación de sus horarios, pasar de horario de oficina a horario permanente,supone una modificación sustancial de la actividad comercial. Siendo estas instalaciones oficinas comerciales en horario de conveniencia. Proponemos para estos cajeros una tasa, o la figura fiscal que proceda, de al menos 11 euros por día.
Los hosteleros por poner un ejemplo, pagan sus correspondientes tasas por ocupación de vía pública y no se entiende por qué bula las entidades financieras no pagan, en función de su actividad comercial y de sus beneficios.
Este dinero proponemos se destine a un Fondo Extraordinario de Solidaridad, para atender a los ciudadanos y sus familias que están pasando una situación de especial dificultad. Especialmente en el caso de familias desahuciadas de sus viviendas.
Mi-PAQUITA- Comentario, día 18/4, 8h. 20´:
Totalmente de acuerdo. Este es uno de los asuntos que me llaman la atención desde tiempo ha: La utilización por parte de las empresas bancarias del espacio público para el ejercicio de su actividad privada, de la que se lucran ¡y mucho!
Posted on abril 17, 2012. Copiado de la página getafe.tomalosbarrios.net/
La situación económica en la que nos encontramos, y que no tiene visos de remitir a corto plazo, pone a los Ayuntamientos en la tesitura de seguir prestando servicios, a una ciudadanía cada vez más necesitada y sin contar con los ingresos, ni con la financiación necesaria para prestarlos.
Sin obviar la necesaria austeridad en el gasto erradicando el despilfarro, es necesario que la Administración local busque nuevas fuentes de ingresos distintos al urbanismo y a la especulación Inmobiliaria.
Los ciudadanos no podemos seguir siendo los paganinis de la crisis, los únicos paganos. Tendrán que pagar también los que más tienen y los que más ganan. Los mismos que nos han metido en esta crisis, los bancos.
El pago que están realizando en Getafe por los cajeros automáticos, es cuanto menos ridículo. Estos cajeros son de dos tipos, los que se encuentran en la fachada exterior y los que se encuentran en el interior y son accesibles las 24 horas del día. (Los que se encuentran en la fachada están ocupando la vía pública, se benefician de los servicios públicos, especialmente alumbrado y Limpieza, y al mismo tiempo utilizan las aceras para vender sus productos. A estos cajeros proponemos un incremento de las tasas actuales ridículas, tasa que se establecerá en función de la categoría de la vía, con un mínimo de 14 euros al día en las vías secundarias y 21 euros al día en las principales.
Los cajeros que se encuentran en el interior, pero que son accesibles las 24 horas del día, también proponemos una tasa, ya que la modificación de sus horarios, pasar de horario de oficina a horario permanente,supone una modificación sustancial de la actividad comercial. Siendo estas instalaciones oficinas comerciales en horario de conveniencia. Proponemos para estos cajeros una tasa, o la figura fiscal que proceda, de al menos 11 euros por día.
Los hosteleros por poner un ejemplo, pagan sus correspondientes tasas por ocupación de vía pública y no se entiende por qué bula las entidades financieras no pagan, en función de su actividad comercial y de sus beneficios.
Este dinero proponemos se destine a un Fondo Extraordinario de Solidaridad, para atender a los ciudadanos y sus familias que están pasando una situación de especial dificultad. Especialmente en el caso de familias desahuciadas de sus viviendas.
Mi-PAQUITA- Comentario, día 18/4, 8h. 20´:
Totalmente de acuerdo. Este es uno de los asuntos que me llaman la atención desde tiempo ha: La utilización por parte de las empresas bancarias del espacio público para el ejercicio de su actividad privada, de la que se lucran ¡y mucho!
mayo 09, 2012
Marcos Ana (13.8) en Rivas Vaciamadrid: 9 mayo 20h.
INF. CONOCIDA gracias a RGAlmazán y su blog Kabila. Art. de 07 mayo 2012 http://rafa-almazan.blogspot.com.es/2012/05/marcos-ana-en-rivas-vaciamadrid.html
De la mano del artista Javier Larrauri, el próximo -ESTE-miércoles se inaugura una exposición sobre Marcos Ana.
Dibujos, pinturas, fotografías, recuerdos y un vídeo memorable. El sol de Marcos Ana, brillará en Rivas durante el mes de mayo.
Un poeta que se hizo en la cárcel. El preso político de más larga vida carcelaria durante el franquismo, veintitrés años. Un hombre comprometido, irrepetible, cuyo ejemplo siempre nos guiará.
Su único pecado ser comunista y estar comprometido con un mundo mejor. Hoy, como ayer y al igual que mañana, Marcos Ana es un ejemplo de honestidad y de compromiso político. Un hombre que con sus 92 años todavía cree en una mundo mejor y sigue siendo un activo imprescindible para la auténtica izquierda en nuestro país.
En esta exposición, titulada: ‘Marcos, con eme de memoria’, Javi Larrauri trata de rendir un homenaje merecido a este poeta comprometido, un premio a una persona entrañable que tanto ha hecho por mejorar este mundo. Un personaje que forma parte de nuestra Memoria Histórica.
Allí, estaré, donde no se puede faltar, homenajeando a Marcos Ana y agradeciendo a Larrauri que haya hecho honor a este hombre único. Mi agradecimiento al pintor y mi admiración a una persona como Fernando Macarro –nombre real de Marcos Ana—, un hombre que hoy, más que nunca, sigue dando ejemplo a las generaciones jóvenes.
Como ejemplo, aquí dejo estos versos que escribió, desde la cárcel, en su “Carta urgente a la juventud del mundo”. que como se puede apreciar, están más vigentes que nunca:
Pronunciad una palabra,
decid una sola letra,
moved tan solo los labios
a la vez, y la marea
juvenil atronaría
como un mar cuando se encrespa
Marcos Ana estará en Rivas el miércoles, en la inauguración, a las 20 horas en el Centro Cultural Federico García Lorca de Rivas Vaciamadrid. Y allí, seremos muchos los que, con gran emoción, le saludaremos personalmente. Expos. de 9 a 31 de mayo.
Les dejo con un trailer del documental que se va a proyectar http://www.youtube.com/watch?v=uKemCtOIzrc&feature=player_embedded Poesía y Rebeldía - Subido por iurivas el 17/11/2011 - Video realizado por Javi Larrauri
Nos vemos en la exposición, el miércoles. Sin duda, será un acto inolvidable
Salud y República
De la mano del artista Javier Larrauri, el próximo -ESTE-miércoles se inaugura una exposición sobre Marcos Ana.
Dibujos, pinturas, fotografías, recuerdos y un vídeo memorable. El sol de Marcos Ana, brillará en Rivas durante el mes de mayo.
Un poeta que se hizo en la cárcel. El preso político de más larga vida carcelaria durante el franquismo, veintitrés años. Un hombre comprometido, irrepetible, cuyo ejemplo siempre nos guiará.
Su único pecado ser comunista y estar comprometido con un mundo mejor. Hoy, como ayer y al igual que mañana, Marcos Ana es un ejemplo de honestidad y de compromiso político. Un hombre que con sus 92 años todavía cree en una mundo mejor y sigue siendo un activo imprescindible para la auténtica izquierda en nuestro país.
En esta exposición, titulada: ‘Marcos, con eme de memoria’, Javi Larrauri trata de rendir un homenaje merecido a este poeta comprometido, un premio a una persona entrañable que tanto ha hecho por mejorar este mundo. Un personaje que forma parte de nuestra Memoria Histórica.
Allí, estaré, donde no se puede faltar, homenajeando a Marcos Ana y agradeciendo a Larrauri que haya hecho honor a este hombre único. Mi agradecimiento al pintor y mi admiración a una persona como Fernando Macarro –nombre real de Marcos Ana—, un hombre que hoy, más que nunca, sigue dando ejemplo a las generaciones jóvenes.
Como ejemplo, aquí dejo estos versos que escribió, desde la cárcel, en su “Carta urgente a la juventud del mundo”. que como se puede apreciar, están más vigentes que nunca:
Pronunciad una palabra,
decid una sola letra,
moved tan solo los labios
a la vez, y la marea
juvenil atronaría
como un mar cuando se encrespa
Marcos Ana estará en Rivas el miércoles, en la inauguración, a las 20 horas en el Centro Cultural Federico García Lorca de Rivas Vaciamadrid. Y allí, seremos muchos los que, con gran emoción, le saludaremos personalmente. Expos. de 9 a 31 de mayo.
Les dejo con un trailer del documental que se va a proyectar http://www.youtube.com/watch?v=uKemCtOIzrc&feature=player_embedded Poesía y Rebeldía - Subido por iurivas el 17/11/2011 - Video realizado por Javi Larrauri
Nos vemos en la exposición, el miércoles. Sin duda, será un acto inolvidable
Salud y República
mayo 08, 2012
Modelo Educativo (20.30) FINLANDÉS, de Carlos M. Sánchez
RECIBIDO de Mercedes G - Pide al ministro Wert que no aumente la ratio de alumnos por clase - Acción promovida por Maria Gracia Fernandez
http://actuable.es/peticiones/pide-al-ministro-wert-no-aumente-ratio-alumnos-por Tomar ejemplo del Modelo Educativo en otros Paises de la Comunidad Europea. EL SECRETO DE LOS FINLANDESES: 24 horas con uno de los jóvenes de 15 años que triunfa en Pisa. Art. publicado en XLSemanal en dic. 2007
¿Por qué lo habitual en Finlandia es que un adolescente normalito termine Secundaria con notas excelentes, hablando un perfecto inglés y leyendo un libro a la semana, y aquí muy pocos consigan algo remotamente parecido? Hemos viajado al país mejor clasificado por el informe Pisa para averiguarlo.
Les presento a Saili Sipilä. Tiene 15 años. Vive con sus padres y sus dos hermanos en Espoo, una ciudad de 360.000 habitantes a las afueras de Helsinki. He volado 4.000 kilómetros para conocerlo. ¿Por qué? Por dos razones: porque soy periodista y porque tengo un hijo de la misma edad. Como periodista, quiero saber por qué Saili, un adolescente normalito de Finlandia terminará la Secundaria con excelentes notas, hablando inglés a la perfección y leyendo un libro por semana. Lo típico para un finlandés. Como padre, quiero saber si es inevitable que mi hijo, Manuel, un adolescente normalito, acabe sus estudios obligatorios aprobando por los pelos, chapurreando cuatro palabras en inglés y sin el menor interés por la lectura. Lo típico para un español. ¿Hubiera sido diferente si hubiera nacido en Finlandia? ¿Qué comparaciones entre la educación finlandesa y la española puedo hacer como periodista? ¿Qué lecciones puedo aprender como padre?
Repaso en el avión los resultados calentitos del último informe Pisa, un examen trianual que mide las capacidades de los alumnos de 15 años de 57 países en ciencias, matemáticas y lectura. Participaron 375.000 estudiantes. En España, casi 20.000 alumnos de Secundaria de 686 coles e institutos. Veamos las notas. Ciencias: Finlandia, 1ª, 563 puntos. España, 31ª, 488 puntos. Si el aprobado lo marca la media de los países de la OCDE (491 puntos), ya tenemos el primer suspenso. Matemáticas: Finlandia, 2ª, 548 puntos, a sólo uno de China Taipei. España, 31ª, 480, a cuatro de la media de los países desarrollados. Segundo insuficiente. Lectura: Finlandia, 2ª (547), por detrás de Corea del Sur. España, 35ª (461), protagoniza además el peor descenso en comprensión lectora de los países de la OCDE (485) desde el último informe. Nuestros hijos no entienden lo que leen. A la cuarta línea de cualquier texto se pierden. Muy deficiente.
Tres cates en las tres asignaturas básicas. ¿Qué hacemos? ¿Castigamos de cara a la pared a los alumnos, a los padres, a los profesores, a las autoridades, a todos? Alemania cosechó unas calabazas semejantes hace tres años y la conmoción fue tan mayúscula que los políticos se pusieron las pilas y este año sus estudiantes han aprobado con nota. Aquí, el Gobierno culpa a Franco (la precaria educación de los padres dificulta la de los hijos). Además, la fiesta va por barrios, léase por comunidades autónomas. Los riojanos pueden sacar pecho: están en el grupito de cabeza. Los andaluces deberían ir pensando en las recuperaciones: en mates les gana hasta Azerbaiyán.
Taxi hasta Espoo. Son las siete de la mañana y todavía no ha amanecido. Ni lo hará. No veré el sol durante mi estancia en Finlandia. Cielos cubiertos y noche cerrada a las tres de la tarde. En esta época del año es un país en penumbra y con sus 5,3 millones de habitantes obsesionados en encender cirios, velas y lamparitas. Limosnas de luz. Llego a casa de los Sipilä a tiempo para ser invitado al desayuno familiar. No es lo habitual, porque cada uno suele tomar un bocado por su cuenta, pero ayer (6 de diciembre) fue el Día de la Independencia y la ocasión lo merece. Me sorprende que Saili no tenga puente, pues el festivo cae en jueves. Mi hijo enlazó cuatro días de vacaciones gracias al viaducto de la Constitución. En Finlandia, si una escuela hace puente (los centros tienen autonomía para toman estas decisiones), antes obliga a sus alumnos a salir algo más tarde cada día hasta completar las clases que se hubieran perdido.
Me descalzo, dejo los zapatos en el recibidor y converso con los Sipilä en calcetines mientras damos cuenta del café, los panecillos, el zumo de bayas y el queso lapón con mermelada. Seppo, el padre, es teólogo y se gana la vida traduciendo la Biblia. Domina una docena de idiomas, entre ellos arameo, copto y árabe clásico. Leena, la madre, es enfermera y trabaja en un hospital. Mikael, el hermano mayor, tiene 18 años y quiere estudiar Arte Dramático en la universidad, pero reconoce que las posibilidades de pasar el corte a la primera son escasas. Joel, el menor, de 12 años, es discapacitado psíquico y acude a un colegio de educación especial. La vivienda familiar es un dúplex de clase media en el centro urbano de Espoo. Lo de ‘urbano’ hay que matizarlo. Un bosque de abetos limita con la casa. «Nos mudamos aquí hace año y medio. El aire es muy puro». Espoo es la segunda ciudad de Finlandia en habitantes y la de mayor porcentaje de población universitaria en un país donde el 34 por ciento de los adultos tiene estudios superiores. «No hay apenas delincuencia. Nuestros hijos pueden pasear de noche con tranquilidad», explica el padre. Y Saili apostilla en un inglés prístino: «Finlandia es segura. Ni sunamis, ni terremotos… Me gusta vivir aquí». Yo les explico que me crié en la calle. Y eso es algo que se ha perdido en España, por los menos en las grandes ciudades. Que los niños puedan jugar al aire libre sin vigilancia.
Las ocho menos cuarto. Hora de ponerse los zapatos y salir camino de las respectivas ocupaciones. Saili coge el bus urbano (no hay autobuses escolares). El billete lo subvenciona el municipio. Por ley, ningún alumno puede vivir a más de cinco kilómetros de la escuela. Podría ir caminando, un paseo de veinte minutos, pero llovizna aguanieve y no le apetece. Saili tiene moto y bicicleta, como la mayoría de sus compis, pero sólo unos pocos desafían al frío en esta época. En el exterior, las instalaciones de la escuela Saarnilaakson dan una impresión espartana, excepto por el césped de los campos de deporte que la circundan. En la entrada no se ve a decenas de estudiantes apurando el primer pitillo de la mañana, como en los institutos españoles. Ni una colilla ni una hoja ni una pintada. «Aquí no se ensucia ni la nieve», me dice el fotógrafo.
En el interior, la limpieza resalta aún más. No hay garabatos en los pupitres ni en los aseos. Todo parece recién estrenado. Saarnilaakson es una escuela pública, como el 97 por ciento de los centros finlandeses, a diferencia de España, donde el 35 por ciento son privados. Por supuesto, es gratuita. Pero el equipamiento es el de un colegio caro en nuestro país. Las aulas disponen de un televisor con pantalla gigante de plasma, acuario de 200 litros con pececitos de colores, cocina con fregadero, medios audiovisuales, aire acondicionado, muchas plantas. Hay un ordenador por cada dos alumnos. Una docena de máquinas de coser en la clase de costura, aparatos de soldar, herramientas de carpintería, esquíes… Un gimnasio cubierto, un auditorio para las clases de teatro y un comedor con autoservicio. Todo en perfecto estado de revista. Los libros de texto son gratis (¡cómo duelen los 200 euros que tengo que desembolsar cada septiembre!), el material escolar es gratis, la comida es gratis. No parece demasiado apetitosa y los estudiantes reniegan, pero la comen. Al Ayuntamiento le cuesta 65 céntimos cada menú: un plato caliente, leche y fruta. Tanta generosidad me pone los dientes largos. Y cuando Kari Kajalainen, profesor de matemáticas, me explica que si un niño quiere estudiar, puede llegar a ser médico o juez o ingeniero, lo que se proponga, si se esfuerza, aunque su familia sea pobre, pongo cara de incredulidad. «La educación de cada finlandés le cuesta 200.000 euros al Estado, desde que entra en la guardería hasta que sale de la universidad con su título. Es el dinero mejor empleado de nuestros impuestos. La presidenta del país, Tarja Halonen, se licenció en Derecho y proviene de una humilde familia de clase obrera. «Cuando regaño a mis alumnos, les digo que están malgastando el dinero de los contribuyentes». Y otra profesora, Päivi Ketola, me cuenta que los universitarios sólo han de pagar los libros y la comida (2.50 euros en la cafetería de la facultad). El Estado los ayuda a emanciparse con subvenciones para alquilar una vivienda y una paga. Todo el sistema está montado para que los finlandeses se acostumbren a ser autónomos desde bien pequeñitos y sevayan a vivir por su cuenta a los 18 años.
Pero volvamos con Saili, que ha sonado el timbre (las notas de una balada al piano de Erik Satie) y entra en clase. Cursa 9º grado, el equivalente de 4º de la ESO en España. En la escuela de Saarnilaakson hay 400 alumnos y 40 profesores, médico, asistente social, psicólogo y hasta dentista. Y la ratio es de menos de veinte estudiantes por aula (en Finlandia, por ley, no puede haber más de 24). En la clase de mi hijo hay 34. Los compañeros de Saili son formalitos, por lo menos a primera vista. Y es que en el ideario del colegio, además de en la civilización europea y el multiculturalismo (hay clases de historia del islam o del catolicismo, aunque la población es mayoritariamente luterana), se hace un hincapié obsesivo en los buenos modales. Me asombra el respeto reverencial que le tienen a los profesores. «Sí, nos sentimos respetados y valorados por la sociedad. Ser maestro es una profesión de prestigio a la que solo aspiran los mejores. Y no basta con ser muy bueno en tu tus conocimientos. Pero el respeto de los alumnos te lo ganas día a día. En 20 segundos lo puedes perder», explica Mati Karkkainen, docente de ciencias, en la sala de profesores, muy acogedora: un piano, una bandeja con bombones, cafeteras humeantes. Los maestros tienen un buen sueldo en comparación con los españoles, aunque algunos se quejan. Rocío no, desde luego. Esta madrileña imparte clases de español. «Cobro 1.800 euros por 15 horas semanales. El sistema no incentiva que trabajes más. Prefieren repartir el trabajo para que no haya paro. ¿Cómo? Aumentando mucho los impuestos a los que ganan más. A mí sólo me retienen el 10 por ciento. Pero a un médico que gane 5.000 euros le retienen la mitad. Además, tienes derecho a paro toda la vida. Tendría que pensármelo mucho para volver a España».
Ojo, a los niños finlandeses no les gusta el cole. Saili, que saca sobresalientes sin despeinarse, lo considera «demasiado fácil». Sus compañeros, menos brillantes, reconocen que hay que trabajar demasiado. Y Päivi Junkkari, profesora de inglés, recuerda su adolescencia como una etapa ingrata, de mucho sacrificio. «Los alumnos no vienen al colegio a pasárselo bomba. Es un trabajo. Pero saben que todos tienen las mismas oportunidades. Da igual a la escuela que vayan, en el centro de Helsinki o en un pueblo del Ártico. Todas tienen el mismo nivel». Kari Kajainen asiente. «Nos centramos en que la mayoría de los alumnos sean muy competentes. Que el nivel medio sea alto. No es una educación elitista. Preferimos que todos saquen aprobados y notables; que haya alumnos de matrícula no es una prioridad. Y, sobre todo, cuando vemos que alguno tiene problemas, le asignamos enseguida un profesor de apoyo. Tiene clases extra. Estamos muy pendientes y no dejamos que se retrase.»
Los deberes son sagrados. Y está muy mal visto que alguien copie, incluso por los mismos alumnos. Que alguien saque una chuleta es impensable. «En nuestra cultura son muy importantes dos valores: la honradez y el trabajo», comenta Päivi Junkkari. No es casualidad que Finlandia también encabece las estadísticas de transparencia y menos corrupción pública. Kari Kajainen apunta otra peculiaridad nórdica. No hay repetidores. Le digo que en España el 43 por ciento de los alumnos de Secundaria ha repetido curso alguna vez. Y que mi hijo, que siempre se salva al final, tiene incontables oportunidades para aprobar cada asignatura y, aun así, suelen quedarle un par para septiembre. Kajainen pone cara de asombro. «Aquí sólo tienes una oportunidad para aprobar un examen por la misma razón que la vida sólo se vive una vez. Y hay que aprovecharla. Si no apruebas, te quedas una hora más en clase hasta que demuestres que te lo sabes y si no, estudias en verano, pero la promoción es automática».
¿Dónde aprietan más las tuercas? «Sin duda, en la enseñanza de la lengua materna. Somos los primeros del mundo en ciencias y los segundos en matemáticas, pero el mayor reto de enseñar matemáticas es conseguir que los alumnos comprendan lo que leen, el enunciado de los problemas. Por eso lo fundamental es que lean. Y también es muy importante la enseñanza de lenguas extranjeras. El finés es una lengua minoritaria. Los alumnos también estudian sueco e inglés obligatoriamente. Y alemán, francés o italiano como optativas. Pero tienen una gran ventaja. Las películas y series de televisión extranjeras no están dobladas. Todas se pasan con subtítulos. Los niños se acostumbran desde pequeños a escuchar otros idiomas y, además, adquieren destreza lectora. Hay que leer rápido los subtítulos para no perder el hilo del programa», apunta Tuija Yrjö-Koskinen, profesora de inglés. Envidio la fluidez con la que todos hablan el idioma de Shakespeare en la clase de Sailu. E incluso chapurrean algunas palabras de español porque Los Serrano es la serie de moda.
La jornada de Saili es intensiva, de 8 de la mañana a 3 de la tarde. Pero las clases son muy breves: 45 minutos mal contados. Hay un recreo obligatorio al aire libre (los adolescentes se apretujan en la entrada porque en el patio hace frío) y una pausa de media hora para comer. Todo el horario está salpicado de breves descansos que hacen llevadero el día. Terminan frescos. No se los abruma con una montaña de materias. Las carteras son livianas. Se estimula el razonamiento crítico antes que la memorización. Hay clases distendidas, como baile de salón, teatro, arte digital, peluquería, artes marciales, hockey sobre hielo, esquí de travesía, ¡cocina! (Saili y su hermano Mikael aprendieron a cocinar en el colegio y preparan la cena en casa cuando les toca). También primeros auxilios, carpintería, soldadura o música. Los alumnos tocan el violín, la guitarra eléctrica u otros instrumentos, según sus preferencias. Y, sobre todo, se estimula el pensamiento crítico. Se invita a discutir. El sistema español margina el debate y la expresión oral. El alumno toma apuntes pasivamente, bosteza.
Saili vuelve a casa, juega un rato al hockey y hace los deberes. «Tardo de una a dos horas. Luego cuido de mi hermano Joel o cocino si no hay nadie más en casa. A las siete hemos cenado. Me conecto un rato al Messenger si mi padre no está trabajando en el ordenador. O juego a videojuegos de rol y de estrategia. Luego, me acuesto y me quedo leyendo hasta las once. Mis libros preferidos son las novelas de Julio Verne y todos los de Harry Potter. El último lo voy a leer en inglés».
Finlandia presume del mayor índice de lectura de libros y prensa de Europa. Tres veces por semana la familia toma la sauna en casa. «Lo hacemos juntos. Es el lugar donde se comentan las preocupaciones y los proyectos, donde se planean las vacaciones. Siempre buscando el sol. Hemos ido a Madeira, París y Túnez», explica Leena, su madre. Saili todavía no tiene claro qué quiere ser de mayor. «Químico, veterinario o diseñador de videojuegos.» Le pregunto si es feliz. Y me responde sin pestañear que sí.
Otro artículo de interes del mismo autor en el siguiente enlace: http://xlsemanal.finanzas.com/web/articulo.php?id=75100&id_edicion=6907
http://actuable.es/peticiones/pide-al-ministro-wert-no-aumente-ratio-alumnos-por Tomar ejemplo del Modelo Educativo en otros Paises de la Comunidad Europea. EL SECRETO DE LOS FINLANDESES: 24 horas con uno de los jóvenes de 15 años que triunfa en Pisa. Art. publicado en XLSemanal en dic. 2007
¿Por qué lo habitual en Finlandia es que un adolescente normalito termine Secundaria con notas excelentes, hablando un perfecto inglés y leyendo un libro a la semana, y aquí muy pocos consigan algo remotamente parecido? Hemos viajado al país mejor clasificado por el informe Pisa para averiguarlo.
Les presento a Saili Sipilä. Tiene 15 años. Vive con sus padres y sus dos hermanos en Espoo, una ciudad de 360.000 habitantes a las afueras de Helsinki. He volado 4.000 kilómetros para conocerlo. ¿Por qué? Por dos razones: porque soy periodista y porque tengo un hijo de la misma edad. Como periodista, quiero saber por qué Saili, un adolescente normalito de Finlandia terminará la Secundaria con excelentes notas, hablando inglés a la perfección y leyendo un libro por semana. Lo típico para un finlandés. Como padre, quiero saber si es inevitable que mi hijo, Manuel, un adolescente normalito, acabe sus estudios obligatorios aprobando por los pelos, chapurreando cuatro palabras en inglés y sin el menor interés por la lectura. Lo típico para un español. ¿Hubiera sido diferente si hubiera nacido en Finlandia? ¿Qué comparaciones entre la educación finlandesa y la española puedo hacer como periodista? ¿Qué lecciones puedo aprender como padre?
Repaso en el avión los resultados calentitos del último informe Pisa, un examen trianual que mide las capacidades de los alumnos de 15 años de 57 países en ciencias, matemáticas y lectura. Participaron 375.000 estudiantes. En España, casi 20.000 alumnos de Secundaria de 686 coles e institutos. Veamos las notas. Ciencias: Finlandia, 1ª, 563 puntos. España, 31ª, 488 puntos. Si el aprobado lo marca la media de los países de la OCDE (491 puntos), ya tenemos el primer suspenso. Matemáticas: Finlandia, 2ª, 548 puntos, a sólo uno de China Taipei. España, 31ª, 480, a cuatro de la media de los países desarrollados. Segundo insuficiente. Lectura: Finlandia, 2ª (547), por detrás de Corea del Sur. España, 35ª (461), protagoniza además el peor descenso en comprensión lectora de los países de la OCDE (485) desde el último informe. Nuestros hijos no entienden lo que leen. A la cuarta línea de cualquier texto se pierden. Muy deficiente.
Tres cates en las tres asignaturas básicas. ¿Qué hacemos? ¿Castigamos de cara a la pared a los alumnos, a los padres, a los profesores, a las autoridades, a todos? Alemania cosechó unas calabazas semejantes hace tres años y la conmoción fue tan mayúscula que los políticos se pusieron las pilas y este año sus estudiantes han aprobado con nota. Aquí, el Gobierno culpa a Franco (la precaria educación de los padres dificulta la de los hijos). Además, la fiesta va por barrios, léase por comunidades autónomas. Los riojanos pueden sacar pecho: están en el grupito de cabeza. Los andaluces deberían ir pensando en las recuperaciones: en mates les gana hasta Azerbaiyán.
Taxi hasta Espoo. Son las siete de la mañana y todavía no ha amanecido. Ni lo hará. No veré el sol durante mi estancia en Finlandia. Cielos cubiertos y noche cerrada a las tres de la tarde. En esta época del año es un país en penumbra y con sus 5,3 millones de habitantes obsesionados en encender cirios, velas y lamparitas. Limosnas de luz. Llego a casa de los Sipilä a tiempo para ser invitado al desayuno familiar. No es lo habitual, porque cada uno suele tomar un bocado por su cuenta, pero ayer (6 de diciembre) fue el Día de la Independencia y la ocasión lo merece. Me sorprende que Saili no tenga puente, pues el festivo cae en jueves. Mi hijo enlazó cuatro días de vacaciones gracias al viaducto de la Constitución. En Finlandia, si una escuela hace puente (los centros tienen autonomía para toman estas decisiones), antes obliga a sus alumnos a salir algo más tarde cada día hasta completar las clases que se hubieran perdido.
Me descalzo, dejo los zapatos en el recibidor y converso con los Sipilä en calcetines mientras damos cuenta del café, los panecillos, el zumo de bayas y el queso lapón con mermelada. Seppo, el padre, es teólogo y se gana la vida traduciendo la Biblia. Domina una docena de idiomas, entre ellos arameo, copto y árabe clásico. Leena, la madre, es enfermera y trabaja en un hospital. Mikael, el hermano mayor, tiene 18 años y quiere estudiar Arte Dramático en la universidad, pero reconoce que las posibilidades de pasar el corte a la primera son escasas. Joel, el menor, de 12 años, es discapacitado psíquico y acude a un colegio de educación especial. La vivienda familiar es un dúplex de clase media en el centro urbano de Espoo. Lo de ‘urbano’ hay que matizarlo. Un bosque de abetos limita con la casa. «Nos mudamos aquí hace año y medio. El aire es muy puro». Espoo es la segunda ciudad de Finlandia en habitantes y la de mayor porcentaje de población universitaria en un país donde el 34 por ciento de los adultos tiene estudios superiores. «No hay apenas delincuencia. Nuestros hijos pueden pasear de noche con tranquilidad», explica el padre. Y Saili apostilla en un inglés prístino: «Finlandia es segura. Ni sunamis, ni terremotos… Me gusta vivir aquí». Yo les explico que me crié en la calle. Y eso es algo que se ha perdido en España, por los menos en las grandes ciudades. Que los niños puedan jugar al aire libre sin vigilancia.
Las ocho menos cuarto. Hora de ponerse los zapatos y salir camino de las respectivas ocupaciones. Saili coge el bus urbano (no hay autobuses escolares). El billete lo subvenciona el municipio. Por ley, ningún alumno puede vivir a más de cinco kilómetros de la escuela. Podría ir caminando, un paseo de veinte minutos, pero llovizna aguanieve y no le apetece. Saili tiene moto y bicicleta, como la mayoría de sus compis, pero sólo unos pocos desafían al frío en esta época. En el exterior, las instalaciones de la escuela Saarnilaakson dan una impresión espartana, excepto por el césped de los campos de deporte que la circundan. En la entrada no se ve a decenas de estudiantes apurando el primer pitillo de la mañana, como en los institutos españoles. Ni una colilla ni una hoja ni una pintada. «Aquí no se ensucia ni la nieve», me dice el fotógrafo.
En el interior, la limpieza resalta aún más. No hay garabatos en los pupitres ni en los aseos. Todo parece recién estrenado. Saarnilaakson es una escuela pública, como el 97 por ciento de los centros finlandeses, a diferencia de España, donde el 35 por ciento son privados. Por supuesto, es gratuita. Pero el equipamiento es el de un colegio caro en nuestro país. Las aulas disponen de un televisor con pantalla gigante de plasma, acuario de 200 litros con pececitos de colores, cocina con fregadero, medios audiovisuales, aire acondicionado, muchas plantas. Hay un ordenador por cada dos alumnos. Una docena de máquinas de coser en la clase de costura, aparatos de soldar, herramientas de carpintería, esquíes… Un gimnasio cubierto, un auditorio para las clases de teatro y un comedor con autoservicio. Todo en perfecto estado de revista. Los libros de texto son gratis (¡cómo duelen los 200 euros que tengo que desembolsar cada septiembre!), el material escolar es gratis, la comida es gratis. No parece demasiado apetitosa y los estudiantes reniegan, pero la comen. Al Ayuntamiento le cuesta 65 céntimos cada menú: un plato caliente, leche y fruta. Tanta generosidad me pone los dientes largos. Y cuando Kari Kajalainen, profesor de matemáticas, me explica que si un niño quiere estudiar, puede llegar a ser médico o juez o ingeniero, lo que se proponga, si se esfuerza, aunque su familia sea pobre, pongo cara de incredulidad. «La educación de cada finlandés le cuesta 200.000 euros al Estado, desde que entra en la guardería hasta que sale de la universidad con su título. Es el dinero mejor empleado de nuestros impuestos. La presidenta del país, Tarja Halonen, se licenció en Derecho y proviene de una humilde familia de clase obrera. «Cuando regaño a mis alumnos, les digo que están malgastando el dinero de los contribuyentes». Y otra profesora, Päivi Ketola, me cuenta que los universitarios sólo han de pagar los libros y la comida (2.50 euros en la cafetería de la facultad). El Estado los ayuda a emanciparse con subvenciones para alquilar una vivienda y una paga. Todo el sistema está montado para que los finlandeses se acostumbren a ser autónomos desde bien pequeñitos y sevayan a vivir por su cuenta a los 18 años.
Pero volvamos con Saili, que ha sonado el timbre (las notas de una balada al piano de Erik Satie) y entra en clase. Cursa 9º grado, el equivalente de 4º de la ESO en España. En la escuela de Saarnilaakson hay 400 alumnos y 40 profesores, médico, asistente social, psicólogo y hasta dentista. Y la ratio es de menos de veinte estudiantes por aula (en Finlandia, por ley, no puede haber más de 24). En la clase de mi hijo hay 34. Los compañeros de Saili son formalitos, por lo menos a primera vista. Y es que en el ideario del colegio, además de en la civilización europea y el multiculturalismo (hay clases de historia del islam o del catolicismo, aunque la población es mayoritariamente luterana), se hace un hincapié obsesivo en los buenos modales. Me asombra el respeto reverencial que le tienen a los profesores. «Sí, nos sentimos respetados y valorados por la sociedad. Ser maestro es una profesión de prestigio a la que solo aspiran los mejores. Y no basta con ser muy bueno en tu tus conocimientos. Pero el respeto de los alumnos te lo ganas día a día. En 20 segundos lo puedes perder», explica Mati Karkkainen, docente de ciencias, en la sala de profesores, muy acogedora: un piano, una bandeja con bombones, cafeteras humeantes. Los maestros tienen un buen sueldo en comparación con los españoles, aunque algunos se quejan. Rocío no, desde luego. Esta madrileña imparte clases de español. «Cobro 1.800 euros por 15 horas semanales. El sistema no incentiva que trabajes más. Prefieren repartir el trabajo para que no haya paro. ¿Cómo? Aumentando mucho los impuestos a los que ganan más. A mí sólo me retienen el 10 por ciento. Pero a un médico que gane 5.000 euros le retienen la mitad. Además, tienes derecho a paro toda la vida. Tendría que pensármelo mucho para volver a España».
Ojo, a los niños finlandeses no les gusta el cole. Saili, que saca sobresalientes sin despeinarse, lo considera «demasiado fácil». Sus compañeros, menos brillantes, reconocen que hay que trabajar demasiado. Y Päivi Junkkari, profesora de inglés, recuerda su adolescencia como una etapa ingrata, de mucho sacrificio. «Los alumnos no vienen al colegio a pasárselo bomba. Es un trabajo. Pero saben que todos tienen las mismas oportunidades. Da igual a la escuela que vayan, en el centro de Helsinki o en un pueblo del Ártico. Todas tienen el mismo nivel». Kari Kajainen asiente. «Nos centramos en que la mayoría de los alumnos sean muy competentes. Que el nivel medio sea alto. No es una educación elitista. Preferimos que todos saquen aprobados y notables; que haya alumnos de matrícula no es una prioridad. Y, sobre todo, cuando vemos que alguno tiene problemas, le asignamos enseguida un profesor de apoyo. Tiene clases extra. Estamos muy pendientes y no dejamos que se retrase.»
Los deberes son sagrados. Y está muy mal visto que alguien copie, incluso por los mismos alumnos. Que alguien saque una chuleta es impensable. «En nuestra cultura son muy importantes dos valores: la honradez y el trabajo», comenta Päivi Junkkari. No es casualidad que Finlandia también encabece las estadísticas de transparencia y menos corrupción pública. Kari Kajainen apunta otra peculiaridad nórdica. No hay repetidores. Le digo que en España el 43 por ciento de los alumnos de Secundaria ha repetido curso alguna vez. Y que mi hijo, que siempre se salva al final, tiene incontables oportunidades para aprobar cada asignatura y, aun así, suelen quedarle un par para septiembre. Kajainen pone cara de asombro. «Aquí sólo tienes una oportunidad para aprobar un examen por la misma razón que la vida sólo se vive una vez. Y hay que aprovecharla. Si no apruebas, te quedas una hora más en clase hasta que demuestres que te lo sabes y si no, estudias en verano, pero la promoción es automática».
¿Dónde aprietan más las tuercas? «Sin duda, en la enseñanza de la lengua materna. Somos los primeros del mundo en ciencias y los segundos en matemáticas, pero el mayor reto de enseñar matemáticas es conseguir que los alumnos comprendan lo que leen, el enunciado de los problemas. Por eso lo fundamental es que lean. Y también es muy importante la enseñanza de lenguas extranjeras. El finés es una lengua minoritaria. Los alumnos también estudian sueco e inglés obligatoriamente. Y alemán, francés o italiano como optativas. Pero tienen una gran ventaja. Las películas y series de televisión extranjeras no están dobladas. Todas se pasan con subtítulos. Los niños se acostumbran desde pequeños a escuchar otros idiomas y, además, adquieren destreza lectora. Hay que leer rápido los subtítulos para no perder el hilo del programa», apunta Tuija Yrjö-Koskinen, profesora de inglés. Envidio la fluidez con la que todos hablan el idioma de Shakespeare en la clase de Sailu. E incluso chapurrean algunas palabras de español porque Los Serrano es la serie de moda.
La jornada de Saili es intensiva, de 8 de la mañana a 3 de la tarde. Pero las clases son muy breves: 45 minutos mal contados. Hay un recreo obligatorio al aire libre (los adolescentes se apretujan en la entrada porque en el patio hace frío) y una pausa de media hora para comer. Todo el horario está salpicado de breves descansos que hacen llevadero el día. Terminan frescos. No se los abruma con una montaña de materias. Las carteras son livianas. Se estimula el razonamiento crítico antes que la memorización. Hay clases distendidas, como baile de salón, teatro, arte digital, peluquería, artes marciales, hockey sobre hielo, esquí de travesía, ¡cocina! (Saili y su hermano Mikael aprendieron a cocinar en el colegio y preparan la cena en casa cuando les toca). También primeros auxilios, carpintería, soldadura o música. Los alumnos tocan el violín, la guitarra eléctrica u otros instrumentos, según sus preferencias. Y, sobre todo, se estimula el pensamiento crítico. Se invita a discutir. El sistema español margina el debate y la expresión oral. El alumno toma apuntes pasivamente, bosteza.
Saili vuelve a casa, juega un rato al hockey y hace los deberes. «Tardo de una a dos horas. Luego cuido de mi hermano Joel o cocino si no hay nadie más en casa. A las siete hemos cenado. Me conecto un rato al Messenger si mi padre no está trabajando en el ordenador. O juego a videojuegos de rol y de estrategia. Luego, me acuesto y me quedo leyendo hasta las once. Mis libros preferidos son las novelas de Julio Verne y todos los de Harry Potter. El último lo voy a leer en inglés».
Finlandia presume del mayor índice de lectura de libros y prensa de Europa. Tres veces por semana la familia toma la sauna en casa. «Lo hacemos juntos. Es el lugar donde se comentan las preocupaciones y los proyectos, donde se planean las vacaciones. Siempre buscando el sol. Hemos ido a Madeira, París y Túnez», explica Leena, su madre. Saili todavía no tiene claro qué quiere ser de mayor. «Químico, veterinario o diseñador de videojuegos.» Le pregunto si es feliz. Y me responde sin pestañear que sí.
Otro artículo de interes del mismo autor en el siguiente enlace: http://xlsemanal.finanzas.com/web/articulo.php?id=75100&id_edicion=6907
mayo 07, 2012
Sin muertos, tampoco hay culpables, de Patricia Campelo
CONOCIDO gracias a la página de fb de Paco Jerez. COPIADO de
blogs.publico.es/memoria-publica/2012/03/27/sin-muertos-tampoco-hay-culpables/ Memoria Pública. El sumario de la causa del juez Baltasar Garzón contra el franquismo - "Sin muertos, tampoco hay culpables” Por Patricia Campelo. Publicado en 27 marzo 2012
El testimonio de Natividad Rodrigo, hija de dos burgaleses fusilados en septiembre de 1936, evidencia el modo en que el franquismo operaba bajo apariencia de legalidad para incautar los bienes de los desaparecidos. El proyecto ‘Rapiña’, del grupo de trabajo Recuperando la Memoria de Andalucía ha documentado estas prácticas en una iniciativa que sigue abierta a la participación de quienes quieran aportar su testimonio.
Perseguir la verdad ha sido una constante en la vida de Natividad Rodrigo (Burgos, 1931). Cuando apenas contaba con 5 años, su madre, embarazada de cinco meses, y su padre, un labrador de Villanueva de Odra, “desaparecieron”. Según las autoridades franquistas, el matrimonio había abandonado a sus tres hijos. Pero en casa sabían la verdad.
“Lo que más rabia me daba era que dijeran que se habían marchado dejando a tres niños pequeños”. Y en el pueblo también conocían lo sucedido, hasta el punto de saber el lugar en el que enterraron a las 18 personas fusiladas aquella noche del 2 de septiembre de 1936, una información que nadie quería proporcionar. “Cuando en 2006 abrimos la fosa donde estaban mis padres enterrados con otros vecinos, nadie decía nada, incluso un primo mío dio una patada en el suelo de rabia cuando la máquina encontró el punto exacto. No querían que abrieran la fosa. Sin muertos, tampoco hay culpables”,relata Natividad, quien además cuenta, por la memoria de su abuela, cómo antes del 18 de julio estaba todo preparado: “Había armas guardadas en el pueblo y, a las afueras, estaban excavadas dos fosas enormes”.
Para los hermanos Rodrigo Fernández el sufrimiento no terminó con el asesinato de sus padres. Una providencia judicial fechada el 20 de mayo de 1937 requería al padre de Natividad en un proceso de incautación de bienes. Restituto Rodríguez Pérez llevaba ocho meses muerto, pero toda la maquinaria judicial del franquismo se puso en marcha para legitimar el robo de las propiedades que tenían él y su mujer, Natividad Fernández Calvo.
Transcurrido el plazo de diez días para que el afectado por el expolio se personara en el juzgado de incautaciones, el siguiente paso era la petición de informes sobre la conducta de la víctima al alcalde de la localidad, al juez municipal y al párroco, quienes se hacían valer a su vez de testimonios de vecinos. En el caso del padre de Natividad, todos los informes que integran su expediente de incautación -al que ha tenido acceso Memoria Pública- apuntaban en un único sentido: se trataba de un hombre de izquierdas que había participado en una comisión gestora del Ayuntamiento y que asistió a la manifestación del primero de mayo por los derechos de los trabajadores. “En las últimas elecciones votó al Frente Popular”, testimonió un vecino de Villanueva de Odra. “Se mostró contrario al movimiento y se le consideraba afiliado al Partido Socialista”, rezaba el informe de octubre de 1937 del regidor municipal.
De la madre de Natividad, en cambio, los informes decían que se le observó “una conducta irregular con anterioridad al movimiento” pero “sin que se demostrara pertenecer a ningún partido político”. Incluso el juez municipal aseveró en un documento del 22 de octubre de 1937 que Natividad Fernández Calvo “demostró unirse al movimiento”. Pero estas consideraciones llegaron más de un año después del asesinato de la pareja, el 2 de septiembre de 1936. Ese día ella llevaba “un vestido fino de fiesta”, y él “un traje de paño fino, boina y calzaba zapatos”, según el escrito del juez municipal que certificaba la desaparición de ambos.
Agotado el procedimiento, que incluía la tasación de todos los bienes del afectado – en este caso se valoraron en 1.279 pesetas e incluían una casa, varias fincas, un huerto y todo tipo de enseres – se procedió al embargo en 1939. “Se lo dieron todo al marido de una tía mía que se afilió a Falange”, recuerda Natividad. El mismo hombre que se oponía a retirar la tierra encima de sus padres. A pesar de la incautación, esta burgalesa no cejó en su empeño de recuperar el nombre y las propiedades de sus progenitores. “Ellos no habían desaparecido, les habían matado”, vuelve a insistir, dejando claro que fue su perseverancia lo que la condujo, en 1956, a recuperar sus pertenencias cuando su primo se dispuso a venderlas. “Nos dieron una parte del dinero de la venta”, aclara Natividad.
ENTRAMADO JURÍDICO DEL ROBO
“Los rojos no solo perdieron la vida o la libertad, también sus bienes”. Bajo esta premisa arranca el proyecto ‘Rapiña’, la iniciativa de un grupo de investigadores pertenecientes a una asociación andaluza de memoria que está documentando las prácticas de pillaje, incautaciones, robos y expolios de bienes a ciudadanos durante la represión franquista.
El Grupo de Trabajo Recuperando la Memoria de la Historia Social de Andalucía (CGTA) ha buceado en el entramado jurídico que posibilitaba estas prácticas. Cecilio Gordillo, uno de sus integrantes, explica que se trata de una iniciativa abierta a la participación de quienes puedan aportar su testimonio.
La arquitectura legal que dio cobertura a estos expolios comenzó, en todo el Estado, con la Comisión Central de Incautaciones, creada el 10 de enero de 1937, de la que dependían las comisiones provinciales, presididas por gobernadores civiles. El nuevo estado franquista “se benefició de todos los procesos de incautación que se siguieron contra partidos políticos, sindicatos, colectivos sociales y personas”, subraya el CGTA. La posterior ley de Responsabilidades Políticas, de febrero de 1939, continuó el proceso de represión económica, estableciendo que “todas las condenas conllevaban sanción pecuniaria y, en caso de fallecimiento, ésta recaía sobre la familia”, explica el Grupo de Trabajo. Una estructura de 60 juzgados posibilitó la aplicación de la norma.
En 1941 ya había más de 114.000 expedientes, una cifra que, según estima el CGTA, pudo alcanzar el cuarto de millón a finales de ese mismo año. El colapso administrativo obligó a reformar la ley “suavizando los supuestos de responsabilidad y restructurando la jurisdicción para agilizar los trámites”.
blogs.publico.es/memoria-publica/2012/03/27/sin-muertos-tampoco-hay-culpables/ Memoria Pública. El sumario de la causa del juez Baltasar Garzón contra el franquismo - "Sin muertos, tampoco hay culpables” Por Patricia Campelo. Publicado en 27 marzo 2012
El testimonio de Natividad Rodrigo, hija de dos burgaleses fusilados en septiembre de 1936, evidencia el modo en que el franquismo operaba bajo apariencia de legalidad para incautar los bienes de los desaparecidos. El proyecto ‘Rapiña’, del grupo de trabajo Recuperando la Memoria de Andalucía ha documentado estas prácticas en una iniciativa que sigue abierta a la participación de quienes quieran aportar su testimonio.
Perseguir la verdad ha sido una constante en la vida de Natividad Rodrigo (Burgos, 1931). Cuando apenas contaba con 5 años, su madre, embarazada de cinco meses, y su padre, un labrador de Villanueva de Odra, “desaparecieron”. Según las autoridades franquistas, el matrimonio había abandonado a sus tres hijos. Pero en casa sabían la verdad.
“Lo que más rabia me daba era que dijeran que se habían marchado dejando a tres niños pequeños”. Y en el pueblo también conocían lo sucedido, hasta el punto de saber el lugar en el que enterraron a las 18 personas fusiladas aquella noche del 2 de septiembre de 1936, una información que nadie quería proporcionar. “Cuando en 2006 abrimos la fosa donde estaban mis padres enterrados con otros vecinos, nadie decía nada, incluso un primo mío dio una patada en el suelo de rabia cuando la máquina encontró el punto exacto. No querían que abrieran la fosa. Sin muertos, tampoco hay culpables”,relata Natividad, quien además cuenta, por la memoria de su abuela, cómo antes del 18 de julio estaba todo preparado: “Había armas guardadas en el pueblo y, a las afueras, estaban excavadas dos fosas enormes”.
Para los hermanos Rodrigo Fernández el sufrimiento no terminó con el asesinato de sus padres. Una providencia judicial fechada el 20 de mayo de 1937 requería al padre de Natividad en un proceso de incautación de bienes. Restituto Rodríguez Pérez llevaba ocho meses muerto, pero toda la maquinaria judicial del franquismo se puso en marcha para legitimar el robo de las propiedades que tenían él y su mujer, Natividad Fernández Calvo.
Transcurrido el plazo de diez días para que el afectado por el expolio se personara en el juzgado de incautaciones, el siguiente paso era la petición de informes sobre la conducta de la víctima al alcalde de la localidad, al juez municipal y al párroco, quienes se hacían valer a su vez de testimonios de vecinos. En el caso del padre de Natividad, todos los informes que integran su expediente de incautación -al que ha tenido acceso Memoria Pública- apuntaban en un único sentido: se trataba de un hombre de izquierdas que había participado en una comisión gestora del Ayuntamiento y que asistió a la manifestación del primero de mayo por los derechos de los trabajadores. “En las últimas elecciones votó al Frente Popular”, testimonió un vecino de Villanueva de Odra. “Se mostró contrario al movimiento y se le consideraba afiliado al Partido Socialista”, rezaba el informe de octubre de 1937 del regidor municipal.
De la madre de Natividad, en cambio, los informes decían que se le observó “una conducta irregular con anterioridad al movimiento” pero “sin que se demostrara pertenecer a ningún partido político”. Incluso el juez municipal aseveró en un documento del 22 de octubre de 1937 que Natividad Fernández Calvo “demostró unirse al movimiento”. Pero estas consideraciones llegaron más de un año después del asesinato de la pareja, el 2 de septiembre de 1936. Ese día ella llevaba “un vestido fino de fiesta”, y él “un traje de paño fino, boina y calzaba zapatos”, según el escrito del juez municipal que certificaba la desaparición de ambos.
Agotado el procedimiento, que incluía la tasación de todos los bienes del afectado – en este caso se valoraron en 1.279 pesetas e incluían una casa, varias fincas, un huerto y todo tipo de enseres – se procedió al embargo en 1939. “Se lo dieron todo al marido de una tía mía que se afilió a Falange”, recuerda Natividad. El mismo hombre que se oponía a retirar la tierra encima de sus padres. A pesar de la incautación, esta burgalesa no cejó en su empeño de recuperar el nombre y las propiedades de sus progenitores. “Ellos no habían desaparecido, les habían matado”, vuelve a insistir, dejando claro que fue su perseverancia lo que la condujo, en 1956, a recuperar sus pertenencias cuando su primo se dispuso a venderlas. “Nos dieron una parte del dinero de la venta”, aclara Natividad.
ENTRAMADO JURÍDICO DEL ROBO
“Los rojos no solo perdieron la vida o la libertad, también sus bienes”. Bajo esta premisa arranca el proyecto ‘Rapiña’, la iniciativa de un grupo de investigadores pertenecientes a una asociación andaluza de memoria que está documentando las prácticas de pillaje, incautaciones, robos y expolios de bienes a ciudadanos durante la represión franquista.
El Grupo de Trabajo Recuperando la Memoria de la Historia Social de Andalucía (CGTA) ha buceado en el entramado jurídico que posibilitaba estas prácticas. Cecilio Gordillo, uno de sus integrantes, explica que se trata de una iniciativa abierta a la participación de quienes puedan aportar su testimonio.
La arquitectura legal que dio cobertura a estos expolios comenzó, en todo el Estado, con la Comisión Central de Incautaciones, creada el 10 de enero de 1937, de la que dependían las comisiones provinciales, presididas por gobernadores civiles. El nuevo estado franquista “se benefició de todos los procesos de incautación que se siguieron contra partidos políticos, sindicatos, colectivos sociales y personas”, subraya el CGTA. La posterior ley de Responsabilidades Políticas, de febrero de 1939, continuó el proceso de represión económica, estableciendo que “todas las condenas conllevaban sanción pecuniaria y, en caso de fallecimiento, ésta recaía sobre la familia”, explica el Grupo de Trabajo. Una estructura de 60 juzgados posibilitó la aplicación de la norma.
En 1941 ya había más de 114.000 expedientes, una cifra que, según estima el CGTA, pudo alcanzar el cuarto de millón a finales de ese mismo año. El colapso administrativo obligó a reformar la ley “suavizando los supuestos de responsabilidad y restructurando la jurisdicción para agilizar los trámites”.
mayo 06, 2012
Genocidio a la española, de David Torres
ENVIADO por Roberto M. el 6/2/2012 - Para leer CLICAD sobre el texto.
(...) manchas de sangre que salpican toda la geografía espeñola. De un bando y de otro, sí, pero de uno ya se levantó acta y se dictó justicia hace mucho tiempo. Desde la célebre Causa General, la derecha tiene sus cementerios, sus mártires, sus placas y sus Paracuellos. Del otro, más de 70 años después, sólo hay oscuridad, silencio, cicatrices en las cunetas, malas hierbas sobre ninguna tumba (...)
(...) manchas de sangre que salpican toda la geografía espeñola. De un bando y de otro, sí, pero de uno ya se levantó acta y se dictó justicia hace mucho tiempo. Desde la célebre Causa General, la derecha tiene sus cementerios, sus mártires, sus placas y sus Paracuellos. Del otro, más de 70 años después, sólo hay oscuridad, silencio, cicatrices en las cunetas, malas hierbas sobre ninguna tumba (...)
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