No todo lo que se vende con formato de libro es literatura, de Marisa Peña

COPIADO de la pág de fb de Marisa Peña el 7/7/2016

Al principio de cada curso les explico a mis alumnos, especialmente a los de literatura universal, que no todo lo que se vende con formato de libro es literatura. La literatura es un ancla, una huella profunda, un surco que araña un tiempo y lo trasciende, una emoción compartida que se transmite a lo largo de los siglos. Un texto literario no es un producto perecedero, una moda, un pañuelo de usar y tirar. La literatura no es un trampolín para la fama ni una alfombra roja para los que necesitan ser admirados. Es una patria común, un lugar al que ir y regresar una y otra vez, un refugio, un catalejo, un laberinto, un aprendizaje, un descubrimiento. Y no lo es sólo porque lo digan los estudiosos de ella, que también, sino porque el tiempo, ese " gran escultor " que diría la Yourcenar, Marguerite Yourcenar, pone cada cosa en su lugar y sobrevivir a su implacable paso es una prueba de fuego. Esa y la emoción, la conmoción y el desasosiego que nos produce un texto bien escrito. " En fin literatura..." nos dijo Cortazar, Julio Cortázar. Nada más, nada menos. Imposturas, las justas.
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo:  Hoy -6 de enero de 2016- ha fallecido José Alcubierre

Contar la vida oveja a oveja

Un pastor inglés describe en un libro que ha sido un fenómeno editorial su vida en la granja y cómo cambió Oxford por el ganado. CARMEN MORÁN - 07/10/16 

http://cultura.elpais.com/cultura/2016/10/06/actualidad/1475769585_036248.html

James Rebanks es pastor en el Distrito de los Lagos, una dura zona rural al noroeste de Inglaterra donde viven unas 40.000 personas o, si se quiere, una bella postal de prados, agua y cielo que recibe 16 millones de turistas. James fue un mal estudiante, solo quería ovejas y heno, seguir la tradición de su padre y de su abuelo. Despreció los consejos de los maestros para que cambiara la cayada por el lápiz y solo de mayor retomó los estudios en Oxford, con gran éxito.

Este salto tiene una explicación sencilla: era un gran lector, una costumbre que alentó su madre. Pero el mundo académico no logró disuadirle de su opción profesional, él quería ser pastor y pastor es. Sin embargo, reconoce que el campo no permite vivir con holgura. Él completa su economía escribiendo libros; en el último relata en primera persona su vida en la granja, desde que su abuelo era la voz de mando hasta las 900 ovejas que ahora pastorea él con la ayuda infantil de sus hijos. Ha sido un pelotazo editorial en los países donde ya está a la venta. En España acaba de salir: La vida del pastor. La historia de un hombre, un rebaño y un oficio eterno (Debate). En sus páginas la rutina y la paz se alternan y se complementan como la lluvia y el sol sobre los prados.

Rebanks tiene el pelo rubio y los ojos claros, y una piel tan morena como puede conseguirse en Inglaterra. Su aspecto es de buen comer y sus manos gordotas delatan su actividad: “Se me encogieron cuando fui a Oxford. Al volver a la granja, los amigos me decían que se me habían encogido también los hombros”, se ríe.

El trabajo en el campo, no digamos cuando se trata de ganado, es igual de rutinario que el de la ciudad, o más; es sacrificado, a veces penoso e irremediablemente injusto, pero tiene algunas ventajas: aire libre, por ejemplo. Y la mayor de todas: cuando se alcanza autonomía, no hay jefes que valgan. Hay algo más.

Un hogar y una cultura

Rebanks aprendió cuando trabajaba para la Unesco “que hay 2.000 millones de granjas de cría, si todo eso se deja el mundo entraría en caos. El campo no solo es hermoso, es un hogar, una cultura, una buena comida. Es una opción: si pensamos que la cría tradicional es buena para los animales, para el territorio, para el medio ambiente, pues hay que elegir cómo compramos y cómo votamos para mantener ese estilo de vida”.

Pero este pastor no se engaña: “No se trata de volver románticamente a la dureza del arado, hay que tener un pie en el pasado y otro en el presente”. La diferencia actual, sostiene, es que quedarse en el campo ya no es estar en el lado equivocado, como él sentía de joven. “Hoy los jóvenes están orgullosos y muestran sus ovejas campeonas en las redes sociales”.

Su libro sería otro ejemplo de orgullo rural. De amor por la tierra, pero sabiendo muy bien qué partes del pasado no son dignas de repetirse y cuáles otras, por más que parezcan crueles, no son más que la realidad sin azúcar. “Muchos me han escrito para criticarme porque en el libro aparecen corderitos degollados. Así es la vida en la granja”. En el libro triscan las ovejas, nacen o mueren de mala manera los corderillos, se recolecta el heno, o se pudre por culpa de la lluvia; los granjeros acuden a los concursos de la comarca con sus carneros más pintones o pasan horas agarrotados esquilando el vellón, se adiestran los perros para carear el rebaño, y vuelve la primavera que trae el verano que llama al otoño que abre la puerta al invierno.

¿Por qué vende un libro que cuenta la vida sencilla y común de una familia, sin epopeyas ni novelería? “Porque todo el mundo lo relaciona con su vida, con sus padres, con sus abuelos, con la tradición. Hay gente en todo el mundo que comparte estos sentimientos. Cuando voy de gira para presentar el libro muchos me paran y me cuenta la historia de sus abuelos”, vuelve a reírse. “Normalmente se cuenta la dureza de la vida en el campo, pero hay otra hermosa y llena de significado. Y otra cosa: estos libros normalmente los escriben los que se marcharon. Rara vez el que vive y trabaja con el ganado, con el apego y el amor por la tierra”.
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo: Yak-42, símbolo de ignominia, y artículos relacionados.
 

Miedo. (Del lat. metus), de Pelayo Martín .

COPIADO de la pág de fb de Pelayo Martín ·  Cadena__SER  el  6/8/2016

Miedo. (Del lat. metus).
Decimos “miedo” cuando pensamos en una emoción caracterizada por un fuerte sentimiento desagradable. Esa sensación puede llegar a ser provocada ya sea por la percepción de un peligro (no importa si éste es supuesto o real) pasado, presente o futuro. El miedo es inherente al animal que somos, es algo grabado en lo profundo de nuestro ser más primario. Con el tiempo, el miedo se ha convertido en un arma, un potente virus que se propaga fácilmente, de muy difícil cura y que puede llegar a conformar el carácter, no ya de una persona, sino de toda una sociedad.

El miedo es al fin, un simplísimo sistema de reglas según el cual se ofrecen dos posibilidades de las que solo podremos elegir una… dentro o fuera, seguridad o libertad, precariedad o trabajo, guerra o supervivencia…
El miedo es algo muy trascendente en nuestras vidas, las condiciona, las cimenta, las define hasta el punto que su carencia es el mejor indicativo de todo grado de civilización. Sabemos que el miedo paraliza y que el poder lo utiliza para mantener en una falsa indiferencia a los ciudadanos.
Hoy nos preguntamos a menudo sobre dónde estarán esos millones de parados, esas multitudes desesperadas que ya carecen de todo, nos extraña que no se manifiesten cada día en todas las ciudades del planeta… pero la respuesta es sencilla. Ellos, los nadie, los aterrorizados, los nosotros de mañana, los que han visto como su "vivir" se ha convertido en un “sobrevivir”, esos que en algún momento de la caída perdieron toda esperanza... ellos siguen respirando con toda naturalidad, deambulan por nuestras calles con un solo pensamiento en su cabeza, llevar algo de comer a casa, cada mañana, cada noche. Esa es la razón de que no llenen las plazas, de que su protesta no sea visible... La pobreza es un trabajo agotador, un trabajo que ocupa todo el día.
Por eso no es casualidad que el sector más afectado por el paro sean los jóvenes, para este nuevo y perverso sistema que se pretende instalar resulta vital que ellos, los que por naturaleza son menos sensibles al miedo y a la parálisis, sean los más castigados, los que reciban "el tratamiento" con mayor intensidad.
Habrá quien piense, y con razón, que ese miedo que aquí describo son sólo palabras, palabras que bien pueden ser rebatidas con otras palabras, y todas ellas enterradas bajo montañas de más y más palabras... y por eso traigo esto. Algo que tocar, algo que sentir, algo irrebatible e imposible de fingir.
Es el de Laura… el miedo de Laura... de Laura a secas… es el miedo que rompe a hervir en una hoya vacía, es el miedo de los que una vez lo han perdido todo, solo temen al miedo mismo. Es el miedo que se construye lágrima sobre lágrima... el que una vez aprendido, ya no se olvida jamás.

Laura, 54 años, nos cuenta en qué se traduce para ella la 'austeridad
http://play.cadenaser.com/widget/audio/20120515csrcsrsoc_4.Aes/

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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo:  Carta abierta a un rey desnudo, de Manuel Ruiz Robles 

Poema: Mis abarcas desiertas, de Miguel Hernández

COPIADO de la pág. de fb de María Torres el 5/1/2017 

Autor: Miguel Hernández

Por el cinco de enero,
cada enero ponia
mi calzado cabrero
a la ventana fria.

Y encontraba los dias
que derriban las puertas,
mis abarcas vacias,
mis abarcas desiertas.
Nunca tuve zapatos,
ni trajes, ni palabras:
siempre tuve regatos,
siempre penas y cabras.
Me vistio la pobreza,
me lamio el cuerpo el rio
y del pie a la cabeza
pasto fui del rocio.
Por el cinco de enero,
para el seis, yo queria
que fuera el mundo entero
una juguetería.
Y al andar la alborada
removiendo las huertas,
mis abarcas sin nada,
mis abarcas desiertas.
Ningun rey coronado
tuvo pie, tuvo gana
para ver el calzado
de mi pobre ventana.
Toda gente de trono,
toda gente de botas
se rio con encono
de mis abarcas rotas.
Rabie de llanto, hasta
cubrir de sal mi piel,
por un mundo de pasta
y unos hombres de miel.
Por el cinco de enero
de la majada mia
mi calzado cabrero
a la escarcha salia.
Y hacia el seis, mis miradas
hallaban en sus puertas
mis abarcas heladas,
mis abarcas desiertas.
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo:  Europa, la censura y la maquinaria más cruel

Poema: BULLA, de Luisa Arellano

http://elblusdelasencinas.blogspot.com.es/2016/12/bulla.html

Tristes días para gozar la vida,
oscuridades gratis,
augurios gangrenados,

los niños tienen hambre, dolor y frío.

Triunfa Pilatos lavándose las manos,
y la miseria teje 
telarañas de roña en las conciencias.

Fuera se exhibe el siglo XXI.

De nuevo los jinetes cabalgan
y el polvo ciega.


Luisa Arellano 5 diciembre 2016
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo: Compartir la luz y la solidaridad con los refugiados 

Poema: Camaradas, a las doce todos los pulsos en hora, de Marcos Ana

Marisa Peña... Empiezo el nuevo año con poesía y memoria.

Romance para las doce menos cuarto. Nochevieja en el penal de Burgos.

Camaradas, a las doce
todos los pulsos en hora.
Que suenen como campanas,
En una campana sola
Que se fundan los corazones en un corazón y todas
Las ramas del pulso sean
Árbol de luz en las sombras
Amig@s, todas en pie
sobre las montañas rojas
De nuestra sangre sin yugos
La voz erguida en la boca.
Si alguno siente que tiene
Las alas del pulso rotas
Que las componga! A las doce,
Todos los pulsos en hora

Marcos Ana
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo: Entrevista al exteniente Luis Gonzalo Segura “Los denunciantes de corrupción somos unos apestados”

Poema: Decidme cómo es un árbol, de Marcos Ana

COPIADO el 13/12 del blog http://creacionpoetica.blogspot.com.es que lo publicó el martes, 6 de diciembre de 2016

Decidme cómo es un árbol,
contadme el canto de un río
cuando se cubre de pájaros,
habladme del mar,
habladme del olor ancho del campo
de las estrellas, del aire.
Recitadme un horizonte sin cerradura
y sin llave como la choza de un pobre,
decidme cómo es el beso de una mujer,
dadme el nombre del amor
no lo recuerdo.
¿Aún las noches se perfuman de enamorados
tiemblos de pasión bajo la luna
o solo queda esta fosa,
la luz de una cerradura
y la canción de mi rosa?
22 años, ya olvidé
la dimensión de las cosas,
su olor, su aroma,
escribo a tientas el mar,
el campo, el bosque, digo bosque
y he perdido la geometría del árbol.
Hablo por hablar asuntos
que los años me olvidaron.
No puedo seguir:
escucho los pasos del funcionario.

©Marcos Ana
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo:   Nos la van a colar, de Elisa Beni 

Pedriza. Ana. Tolmo-Laberinto-Integral-Tolmo, 16/12/2016

Las fotos llevan una explicación y al relato lo precede un *asterisco. Para VER las FOTOS, sus detalles, DEBEN AGRANDARSE clicando sobre ellas. Lo copiado aparece "entrecomillado". Subida anterior al Laberinto, en 14/5/2016 http://paqquita.blogspot.com.es/2016/05/pedriza-canto-cochino-laberinto-cancho.html

1.- Río Manzanares, bajo la pasarela que lo cruza. Aparcamiento Inferior de Canto Cochino. Ana

* Ana propone que hagamos la Integral de La Pedriza, el viernes 16 dic. Blas contrapropone hacer el Laberinto, recorrido más corto. Está previsto que llueva y llueve; también en la Pedri, lo confirma Pedro desde Manzanares el Real
No nos arredramos ¡puede que escampe!
Iniciamos el recorrido con paraguas. Son las 10h. 30´ La pasarela que cruza el Manzanares está hecha un charco.

"Las 3200 hectáreas que ocupa aprox. La Pedriza pertenecen al Parque nacional de la Sierra de Guadarrama"

2.- Tolmo a dcha. Risco El Pájaro (1549 m), al  frente. Laberinto, parte aérea, tras el Tolmo.

3.- Amanita phalloides. Es Anto el que las descubre.

4.- Foto de Blas. Hacia abajo. Ya sin paraguas
Pedro, Anto, Ana y yo. Sigue lloviendo pero, necesitamos las manos para sujetarnos a las rocas.







4.- Mismo sitio. Hacia arriba.
Subiendo por camino marcado.

Pedro, Blas, Anto y Ana. Cavidad a izda.



5.- Pedro.

* Pasamos cerca de Las Buitreras y, a diferencia de otras veces, no vemos ni uno. Deben estar a resguardo. Más precavidos, ellos, que nosotros.











6.- Cancho Amarillo. Anto y Ana.

* Lo que son las cosas; estoy viendo una cara en la roca. Mentón, boca, nariz, pómulos y ojos, frente con arrugas... El ojo y pómulo izdo. deteriorado, accidentado, aplastado, como si fueran los míos.

7.- Entrada al Laberinto, al fondo, detrás cabeza Anto.

8.- Foto de Blas. Nieva.

Ahí esta la puerta de entrada al Laberinto.

Paquita, Ana y Anto.

* ¡Ah! Dejó de llover a partir de cierta cota. A partir de aquí nieva; flojo, pero nieva.
Ana viene acatarrada y teme que con esto vaya a peor.
No ha sido así. Ha funcionado como tratamiento de choque y ha mejorado, algo.
En un principio se empaparon Anto y ella.
Cuando acabemos la jornada lo estaremos todos; a excepción del tronco, cintura para arriba.
 Son las 12h. 40´ según foto de Blas.

8.- Mirada a la inversa, hacia donde Blas echó la foto anterior.

9.- Tras la entrada. Adonde vamos.

 



10.- Mirada atrás. Entrada. De donde venimos.

11.- Más adelante. El Capuchino, arriba. Pedro y Blas.

* Comienza a fallar la cámara. Es muy sensible a las bajas temperturas; además de a la humedad. Las cortinillas del visor se quedan ateridas. Al menos, no llega a quedarse inmóvil del todo, como me paso en El Nevero, a principio de este año

12.- Pequeño llano y robledal. Jardín del Centinela. Cancho "de las fotos". Ana y Blas.

13.- Tras culminar el Laberinto y dar con La integral.

* Creímos que lo íbamos a tener más fácil, por ser sitio recorrido. No es así, la niebla hace su trabajo y desorienta. Yo, incluso, me quedo con la idea de que no llegamos a culminar el Laberinto; a la especie de plataforma mirador. Blas dice que sí. Sí vimos las marcas blanquiamarillas de La Integral, dos. A partir de ahí, todo me resultó desconocido. Pedro mira en su aparato, no caminamos por la Integral, sí por algo en paralelo, situado más cerca del Tolmo. Continuamos bajando. Pedro y Anto van de ojeadores, a la búsqueda de un mojón o el mejor paso. Blas cree que los mojones están puestos un poco al azar, por alguien voluntarioso.

14.- Bajando por senda equivocada, a dcha. de Integral, directo al Tolmo.

* Uno de los pasos fue atravesando un charco, como de 20 cms de alto. No hay paso mejor, metemos los pies y adelante. Otro, escondido, pasando por el hueco dejado por los bloques. Uno, dos, tres, aquello parecía un pasadizo subterráneo. Sabemos que la orientación es buena; es cuestión de paciencia, cuidado y fortaleza. A las 17h. llegamos a nuestro vehículo. Ya no llueve. En los útimos metros, hemos comenzado a ver a gente, los primeros del día.

15.- Ya en la Autopista de La Pedriza. Arroyo de La Majadilla. Brezo, pino, enebro y jara.

PAQUITA
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo: Marisa Pineau, la referente argentina en cuestiones de esclavitud “Hoy tenemos la mayor cantidad de esclavos de la historia”

 

 

Sierra Rincón. Puerto de la Puebla-Pico Porrejón, 3/12/2016

Las fotos llevan una explicación y al relato lo precede un *asterisco. Lo copiado aparece "entrecomillado". Para VER las FOTOS, sus detalles, DEBEN AGRANDARSE clicando sobre ellas.  Visita anterior al Porrejón, Octubre 2013
http://paqquita.blogspot.com.es/2013/10/pto-quesera-porrejon-hayedo-de-tejera.html

* Encarni y Epi han ideado ir a la Sierra del Rincón; nos invitan a participar.

 1.- Puerto de la Puebla, 1636m. Sentido ctra. a Puebla de la Sierra

* El sábado 3 de diciembre, estamos en el punto de arranque. Son las 10h. menos 10´
Hay un grupo ya; caminan en sentido contrario al nuestro. Parecen ser sordomudos.

2.- Al poco de iniciado el camino. Epi, Encarni y Blas.

 3.- A izda. y dcha. de la imagen, dos construcciones de la Guerra Civil Española (1936–1939).

4.- Otra construcc., cercana a anteriores.

* El fin de semana se había vaticinado lluvioso. Aquí, no llueve. Sólo estamos rodeados por la Niebla y así permanecerá casi todo el tiempo.
El final de la excursión será más luminoso y, ya en la ctra., tendremos una tarde de sol.
Pasamos por unos restos de la guerra provocada por el golpe de estado de 1936.

5.- Foto de Epi. Restos mencionados: aquí y junto a caseta de electricidad.

6.- Paso entre rocas. Al otro lado, fondo, tres localidades. Una de ellas El Cardoso de la Sierra

7.- Por senda. Cinta de plástico; vestigio de carrera, trail de montaña, reciente.

8.- Puesto de caza, con ventana.
Otoñando: roble melojo = Quercus robur

* Encontramos varios puestos de caza, hechos en piedra. Quizás estemos pasando por la Reserva de caza de Sonsaz

9.- Otro paso en las rocas. Mancha de nieve.

10.- Hacia lo que parece paso y resultó no serlo. Sí a dcha. donde Encarni.

11.- Foto de Epi. Rocas anteriores, lado dcho.

 12.- Foto de Epi. Mirada atrás. Los árboles rojos son serbales

 13.- Foto de Epi. Paquita y Encarni.

14.- Mirada atrás, más adelante. De donde venimos: Encarni y Epi.

15.- Hacia donde vamos. Blas. Manchas de nieve.

16.- En la senda. brezos. Hito. 

17.- Subiendo por el paso. Todo brezos

* La piedra por la que transitamos es Gneis, dice Epi.

"Se denomina Gneis a una roca metamórfica compuesta por los mismos minerales que el granito (cuarzo, feldespato y mica) pero con orientación definida en bandas" 

 18.- Mirada a dcha. desde nuestra posición.

 19.- Mismo sitio a dcha. En rojo: serbales q ha perdido las hojas y conserva los frutos

20.- Continuando camino. Más manchas de nieve, más altura.

 21.- Mirasa atrás. El pico, o similar, subido poco antes.

22.- Foto de Epi. Hito en el centro. Blas, Encarni y yo.

23.-Antecima del Porrejóan a izda. Cima, vértice geodésico, centro. enebros rastreros

24.- Llegando a cima del Pico Porrejón (1827m)

 25.- Foto de Epi. Haciendo "lo propio", yo. También Blas
 

26.- Foto de Epi. Cima del Porrejón, detrás

27.- Cortado a izda. Vértice geodésico, abajo dcha.

* Continuamos camino. Más adelante vemos, tras una explanada, otros riscos, otro pico (foto 31). Nos acercamos. De camino nos cruzamos con tres jóvenes, treintañeros. Cruzamos algunas palabras. Nos advierten que, lo que vemos, lo acaban de bajar ellos y está un poco mal la subida. Nos despedimos. Más tarde, estando en la cima, veremos que ellos también están en la del Porrejón. Coincidencia en el tiempo.

28.- Foto de Epi. Vista en sentido contrario a anterior.

29.- Acercándonos a otra "torre"

 30.- Foto de Epi. Ésta. Encarni, estupenda.

31.- El último de nuestros "picos" subidos en el día, al fondo. brezos y pinos de repoblación

32.- Encarni en otro paso entre rocas y Blas delante.

33.- Blas subiendo. Epi observando.

34.- Encarni y Epi, subiendo a cima.

* No he comentado, quizás por obvio, que la roca está mojada.
Ello supone una dificultad añadida, no gravosa, pero sí a considerar.
Para subir esta última cima, Blas optó por darle la vuelta y acometerla por atrás. Epi a su vez comprobó el estado del costado dcho. de la mole rocosa. No le gustó y se unió al grupo.

35.- Los mismos, ya de bajada.

36.- Artilugio compuesto no sabemos para qué. 
Son dos troncos pareados utilizando las rocas.
 ¿Quizás para errar?

37.- Nuevo paso.  Más rocas como cuchillos. En el suelo: cantueso.

38.- Bajando al Collado de las Palomas. Luego a izda. Árboles rojos en línea: serbales

 39.- Pista, hasta el final. (incluídos 2 km de ctra. asfaltada) pinos de repoblación 

40.- Troncos de pinos apilados 

junto a pista de tierra.

41.- Maquinaria utilizada en la extracción de los árboles.
Dos tractores "orugas"

* Pasamos por otro collado, el Collado Salinero.
Aprovechamos un cierto cobijo de las rocas para hacer la comida. Son las 14 h. 
Retomamos la andadura a los 45´ siguientes.

 42.- En la pista. Colorista.

43.- Un serval = Sorbus aucuparia que aún no tiró las hojas.

44.- Foto de Epi.

Plano cercano de los frutillos del serval.

De interés http://www.revistaiberica.com/Rutas_y_destinos/mad/senderismo_sierra_rincon_madrid.htm

45.- Con nieve: pico del Lobo (2274 m) Dcha. arriba; caseta electricidad de foto 5

46.- La Tornera (1866m) Abajo, en el valle: Puebla de la Sierra

47.- La cuerda recorrida. Panel informativo.

48.- Fuente, plaza e iglesia 

49.- Prádena del Rincón. Tumbas antropomorfas junto a iglesia, cubiertas y protegidas.

* A las 16h. estamos de vuelta al Puerto de La Puebla. Ya en ctra. paramos en Prádena.
La recorremos, tras tomarnos, tranquilamente, la cerveza o café, correspondiente.

PAQUITA
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OTRO ASUNTO. Hoy en Perroflautas del Mundo:  Los productos que estás consumiendo estas navidades y llevan aceite de palma