Masacres falsas que justifican un genocidio real |
Querida comunidad contextataria:
En nuestro último editorial hemos pedido que no se trate como un mero chismorreo la supuesta relación adúltera de Letizia Ortiz con Jaime del Burgo, “uno de esos reaccionarios recalentados con la renovación de Pedro Sánchez como presidente”. Y lo hacemos porque, como bien sabe la prensa internacional –ante el silencio de la española–, se trata de una maniobra de chantaje a la monarquía que puede debilitar la democracia. Ejemplos tenemos, y muchos, con el emérito.
Con respecto al genocidio palestino, esta semana hemos publicado una detallada investigación en la que Max Blumenthal (The Grayzone) desvela de dónde surgen algunas de las mentiras que se han fabricado alrededor del ataque terrorista de Hamás el 7 de octubre. ZAKA, una organización ultraortodoxa fundada por un violador en serie, está detrás de invenciones que hablan de bebés decapitados, fetos arrancados de los cuerpos de sus madres y muchas otras barbaridades de las que, en un ejercicio negligente de desprecio absoluto por el periodismo, se han hecho eco grandes medios de comunicación e incluso gobiernos occidentales.
La difusión de historias falsas forma parte de una estrategia de desinformación que incluye también la colocación de los y las periodistas en el punto de mira de las matanzas israelíes. Según cuenta Paco Audije, ya son al menos setenta y tres las personas asesinadas en los dos últimos meses mientras informaban de lo que ocurre en Oriente Medio.
El objetivo siempre ha sido justificar el genocidio perpetrado por el sionismo, a través de un ejercicio de deshumanización cuyas consecuencias pueden llegar mucho más lejos de lo que nos imaginamos. Laura Restrepo y Pedro Saboulard explican las implicaciones biopolíticas y advierten de que “alrededor del mundo, otros Estados observan y aprenden la tétrica lección del ejército israelí”. La meta: que “los derechos humanos dejen de ser un obstáculo”.
También entran en juego los intereses económicos de la industria de la guerra. Alejandro Pozo es un investigador especializado en conflictos armados y ha hablado con Gorka Castillo acerca de los negocios que atan a España con Israel y que convierten a este en un país “intocable”.
Por su parte, el excorresponsal de TVE en Jerusalén, Daniel Peral, ha escrito una fantástica pieza sobre las explicaciones ofrecidas por Israel para masacrar a la población palestina y cómo su crédito se está viendo reducido en el seno de la comunidad internacional. “Pase lo que pase, Bibi Netanyahu está acabado”, aventura.
En esa misma línea se expresa Franco ‘Bifo’ Berardi, en una tribuna en la que relata un episodio de brutalidad policial para explicar que Israel, como instrumento colonial de Occidente, está al borde de una “implosión psíquica”.
Hasta que ese final llegue, la violencia sionista sigue escalando, y en este caso empieza a expandirse hacia territorio libanés. Allí, Israel ya ha empezado a bombardear poblaciones civiles, auspiciando su agresión en una nueva narrativa de guerra de la que nos habla Marta Maroto desde Beirut en su nuevo vídeo. |
Mientras tiene lugar todo este horror, la Unión Europea negocia un nuevo Pacto de Migraciones y Asilo que, según cuentan José Sánchez Sánchez e Irene Águila Rodríguez, estará centrado en el levantamiento de nuevos muros que incrementarán la gravedad de la crisis migratoria, y en el fortalecimiento de políticas racistas.
Javier Milei ya ha jurado como presidente de Argentina, en un acto que la crónica de Emiliano Gullo define como un “festejo por la pobreza y la represión”. En él se encontraba parte de la plana mayor de la ultraderecha española, que acudió para mostrar sus respetos al anarcocapitalista con el que comparten ese “antibuenismo” que Gerardo Tecé reformula como “hijoputismo”, para que nos entendamos mejor.
Allí, Santiago Abascal superó los límites democráticos al afirmar que llegará un momento en el que “el pueblo querrá colgar de los pies a Pedro Sánchez”. Una incitación al odio y al golpismo sobre la que habla Isabel Serrano en su último vídeo para CTXT.
Paco Cano escribe sobre estos “muchoespañoles” como patriotas, sí, pero cuya única patria es la destrucción, el odio y el deseo de exterminio del adversario. Buen ejemplo de ello es la introducción, por parte de PP y Vox, de “comisarios políticos” que vigilarán las aulas para evitar que algún “profesor ideologizado” le diga al alumnado “que el hombre viene del mono, que el calentamiento global es un hecho o que el machismo es un problema”, en palabras de Gerardo Tecé.
Regresar a la verdadera radicalidad de izquierdas, sostenida por la escucha y la hospitalidad, es el camino que propone Aurora Fernández Polanco para huir de los “lapsus identitarios”.
Terminamos con un vistazo al Ministerio de CTXT, donde Gudrun Palomino ha reivindicado un cambio de acercamiento a la lectura de Anne Sexton, Sylvia Plath y Adrienne Rich, puesto que enfocar sus escritos desde el mito que encarnan resta importancia a la enorme calidad literaria de su obra.
En Deportes, nuestro infatigable Ricardo Uribarri denuncia cómo la saturación del calendario de competición está teniendo consecuencias muy negativas para la salud de los futbolistas. Los intereses económicos están provocando un insano incremento del número de partidos anuales que, además, repercute directamente en el agotamiento del espectáculo y de los y las aficionadas.
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Un abrazo de parte de todo el equipo. ............. |