1.- Marisa Peña · 14 Abril 2019
La República había venido por sus cabales, de un modo perfecto, como resultado de unas elecciones…
Desde aquel día, -no sé si vivido o soñado-, hasta el dia de hoy, en que vivimos demasiado despiertos y nada soñadores, han transcurrido seis años repletos de realidades…, yo los resumiría con unas pocas palabras.
Unos cuantos hombres honrados tuvieron la insólita y genial ocurrencia
de legislar atenidos a normas estrictamente morales, de gobernar en el
sentido esencial de la historia, que es el del porvenir…”
Antonio Machado, 1937.
El otro día leí este texto a mis alumnos más pequeños. Hay que leer a los clásicos, les digo siempre. Esta es mi trinchera. Mi aportación a la causa republicana.
Antonio Machado, 1937.
El otro día leí este texto a mis alumnos más pequeños. Hay que leer a los clásicos, les digo siempre. Esta es mi trinchera. Mi aportación a la causa republicana.
2.- Marisa Peña · 14 Abril 2019
©Marisa Peña, Enredando memoria.
Gracias a todos, compañeros, compañeras, por la fraternidad republicana.
3.- Marisa Peña · 14 Abril 2019. En la foto: Carmen Martín, su abuela.
Porque muchos no olvidamos y sabemos que el 14 de abril de 1931 quiso entrar en España la primavera.
"Yo pisaré las calles nuevamente... "(Pablo Milanés)
No dejaré que pase, sin rozarme,
este milagro de la primavera,
esta antorcha heredada,
esta dulce marea,
este abril en Madrid ,
que me reclama.
Y pisaré las calles nuevamente,
las de un Madrid lejano y reencontrado
aquellas que pisaron mis abuelos,
un 14 de abril...
©Marisa Peña, Mi bella miliciana.
A mis abuelos, que llevaban un mundo nuevo en sus corazones, y fueron represaliados por su osadía de defenderlo. Siempre en mi memoria. Carmen Martín y Manuel de la Peña. Que vuestro nombre no se borre en la historia, que vuestra lucha no haya sido en vano.
4.- Marisa Peña · 15/4/2019
Me considero una persona muy afortunada. Comparto valores e ideología con grandes hombres y mujeres que me ayudaron con sus escritos, sus actos y sus enseñanzas a ser la mujer que ahora soy. Me miro al espejo y veo a Machado, a Aub, a Maria Teresa León, a María Zambrano, a Miguel Hernández, a León Felipe, a Angela Figuera, a Gregorio Morales, a Miguel Sánchez Ostiz, a Chirbes, a Federica Montseny, a Emma Goldman, a Malatesta, a Marx, a Bakunin, a Angelina Gatell, a Camus, a Simon de Beauvoir, a Lola Iturbe, a Eduardo Guzmán, a Beltord Bretch, a Walter Benjamin, a Steinbeck, a Alfonso Sastre, a César Vallejo, a Benedetti, a García Márquez, a Ángel González, a Isla Correyero, a Lorca, a Cernuda, a todos los que, con sus palabras, me dotaron de luz para sobrevivir a los infiernos. Veo también a mi padre, a mis abuelos y a mis bisabuelos, ejemplos de lucha y dignidad, a mis guardianes de la memoria, a tantos amigos y amigas inteligentes, luchadores, que caminan conmigo. No sé con quién caminan los que difaman la memoria republicana, los que insultan y odian a mis muertos y a sus ideas. No sé a quién ven cuando se miran al espejo, no sé quiénes son sus referentes y sus modelos... No lo sé, pero me lo imagino, y me dan mucha pena. Con esos compañeros de viaje y una maleta llena de ignorancia nunca, nunca, ganarán la luz. Yo, con estos compañeros de viaje la tengo asegurada.
©Marisa Peña