Aunque
estos días los expertos y los científicos están recibiendo la atención
que merecían antes de la pandemia, no debemos olvidar lo que han puesto
de manifiesto tantas veces los estudios de Ciencia, Técnica y Sociedad:
cuando los científicos comienzan a formar parte de paneles de expertos
como asesores de las instituciones, las fracturas políticas son
prácticamente las mismas que se encuentran en la sociedad. Esto es una
lección que no debemos olvidar pues la democracia incluye
estos conflictos y no hay ciencia libre ni de valores ni de opciones
políticas. Esto no tiene que ver nada con el científico del que habla el
artículo, sino en general. Hay una zona gris entre los modelos
matemáticos de los epidemiólogos (por muy jóvenes y nuevos que sean) y
la complejidad de las medidas políticas y económicas. Y esa zona gris es
la zona donde verdad y democracia se mezclan. Vamos a aprender mucha
filosofía y sociología de la ciencia estos días.
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Expertos: solo los míos son buenos sinpermiso.info 12/04/2020
La
vuelta a la actividad en los servicios no esenciales ha sido recibida
con recelo por algunos de los expertos que aconsejan al gobierno en la
emergencia sanitaria y social en la que nos encontramos. La tentación de
considerar que en esta situación las decisiones deberían tomarlas
epidemiólogos o economistas es más comprensible que nunca. Sus recelos son naturales:
necesitamos su conocimiento, aunque quizá no solo el suyo. Por eso nos
ocupamos, en tanto que filósofos, de este asunto. Para señalar algo con
claridad: aunque actuar al margen de lo que digan los expertos es
suicida, ni en este ni en ningún otro contexto que involucre tomas de
decisión de carácter político, la última palabra puede recaer en ellos.
Creemos que, incluso sin salir de una situación tan favorable al
conocimiento experto como la presente, las razones para ello son
contundentes. (...)