Copiado de la página de Paco http://minombre.es/pacohuelva/ y publicado el 18/Junio/2007 en ARTÍCULOS.
LA NOCHE DE SAN JUAN
El día más largo del año está cercano. En el hemisferio norte, donde habitamos, el solsticio de verano comienza el 21 de junio. Justo ese día, dice la creencia popular, las hadas y otras deidades andan sueltas por los campos desparramando en quienes se toparen influjos maléficos o benéficos, según las propiedades intrínsecas de la tal.
La celebración de esta circunstancia se ha trasladado desde hace tiempo al fin de semana, concretamente, a la madrugada del día 24, festividad de San Juan Bautista. El próximo sábado, por tanto, se celebrarán en multitud de pueblos y ciudades un rito pagano consistente en realizar infinidad de piras luminosas que colorearán la noche más corta del año, exorcizando o invocando el poder destructor o sanador de las mismas. En esas inmensas teas se quemarán muebles viejos o exquisitos y artísticos monumentos de cartón piedra. Se trata de un acercamiento al fuego, uno de los tres elementos esenciales que según la génesis de la filosofía que hemos heredado por estos pagos, conformaban la totalidad de lo existente en el universo junto con el agua y la tierra.
En esa noche, pueden ocurrir infinidad de cosas. Ha de saberse que, los demonios, pueden estar escondidos en el bosque con el rijoso y lascivo objetivo de seducir a hermosas jovencitas. Que el sol, al amanecer, puede salir bailando. Que si pasamos a un herniado tres veces por la hendidura de un roble podría sanar. Que si tenemos dolencias varias, debemos saltar sobre el fuego y recobrarnos.
Las puertas de los espejos se abrirán –tal vez por ello, Borges, tenía pavor a verse reflejado- y de él, saldrán, una tras otra, todas las personas que alguna vez se miraron en los mismos y que quedaron, no se sabe por qué arte, escondidas en algún lugar del azogue. También se abrirán las puertas y ventanas de palacios, grutas y castillos encantados. Los dragones bramarán; las sirenas se orillarán en las playas a la luz de la plateada luna, en busca de romances con humanos, hartas ya, de tanto líquido elemento. Los tesoros escondidos, debido al crepitar del fuego y a la fuerza que impone la ilusión colectiva, se removerán en sus sitios para que algún necesitado pueda apropiarse de ellos… Que nadie lo dude, esa noche, un aliento sobrenatural navegará por el planeta y en él, como siempre, desde que la humanidad tiene conciencia, se entablará una lucha entre el bien (el Bautista) y el mal (el Demonio).
Si alguien llegó hasta aquí –leyendo- podría decir que no escribo más que sandeces. Pero bueno, la escritura no hace daño a nadie. Sí hace daño, sin embargo, -sólo como ejemplo- que un elemento ¿sobrenatural? como Bush declare una guerra “contra el mal” a estas alturas y que otros gobiernos lo secunden; y que millones de personas los amparen con sus votos; y que la cárcel de Guantánamo se mantenga abierta conteniendo los despojos de seres humanos maltratados por el Bautista de turno. Que Fidel, desde su observatorio sanitario, mantenga encarcelados a narradores y poetas para salvar como pueda su caduco régimen unipersonal. Que Israel siga haciendo lo que le apetezca con los palestinos. Que las pateras y cayucos sigan hundiéndose en la mar. Que no seamos capaces de resolver el terrorismo por, y solo por, cuestiones partidistas de no cesión.Ante tanta mentira, es preferible soñar, fabular… Tanta irrealidad hay en lo que nos hacen tragar y en lo que observamos a nuestro redor, como en las fábulas que nos contaron nuestras abuelas.
junio 23, 2007
junio 21, 2007
El Moncayo II. La excursión. Club J.O., 16 junio 2007
Las fotos llevan una explicación y al relato lo precede un *asterisco. Lo copiado aparece "entrecomillado". Para
VER las FOTOS, sus detalles, DEBEN AGRANDARSE clicando sobre ellas. Fueron tomadas con cámara analógica y ahora
escaneadas, 9/6/2015 Crónica día anterior http://paqquita.blogspot.com.es/2007/06/el-moncayo.html
3.- Senda. Jose Mari y Antonio, ambos Quilez sin ser familia
* Nos levantamos sin prisas -el recorrido es corto- antes de las 8 de la mañana y a las 8h. 50´estamos iniciando la senda en el final de la pista, el llamado Santuario de Virgen del Moncayo, en las Peñas Negras (1620m)
Arranca a su izquierda y va subiendo inicialmente entre pinos, brezo en flor -blanca- y en las partes más soleadas frambueso -sin flores aún-. La senda se situa sobre el santuario, superando las peñas negras. A las 9 y media salimos del bosque y ya todo el recorrido será a la intemperie
4.- En imagen: Antonio
* Cruzamos por canchales y a eso de las 10 y cuarto estamos en un collado entre dos cimas, las de San Martín y la de San Miguel -o Moncayo, tiene los dos nombres, me entero ahora-.
5.- Cima del Moncayo (2.315m) y su vértice geodésico. En imagen: Blas, Antonio, Jose Mari, Amalio y yo=Paquita
* Tomamos la derecha y en poco rato estaremos en la cima, a la 1 hora 45 minutos del inicio, tal y como ponen en el panel que leímos. Desde que abandonamos el bosque se hizo notar el aire, algo propio de aquí, y frío, sobre todo en la cima, cosa que se resuelve yendo siempre prevenidos de ropa adecuada.
A un lado, hacia abajo, vemos la llamada depresión del Ebro, y atrás tenemos Soria y las tierras de Ágreda, Ólvega y Gómara. No he perdido oportunidad de escribir sus nombres, me encanta su sonido, esas esdrújulas.
El día no es deslumbrante, está cubierto, pero los he conocido más duros. La vez anterior llovía, hacía ventisca, la visibilidad... imagínese.
Subiendo nos adelantaron tres hombres y nos los encontramos en la cima, al poco llegarán una pareja y perro que dicen venir por Agramonte, y se acabó. Bueno... no, que ella se ofreció para echarnos una foto cimera y aceptamos. Wiski, wiski ¡ya!
Para tomar "un bocado" nos guareceremos en uno de los varios cortavientos que hay montados -paredes de piedra semicirculares de medio metro de altura, construidas por los propios usuarios-.
El Moncayo, que en principio es fácil, puede resultar traicionero si se echa la niebla encima. Ya le pasó a un compañero que se bajó a Soria desorientado total.
6.- Bajando por otra ladera
* La vuelta la hacemos por otro lado, cerrando el círculo imaginario.
Son las 11 y veinte cuando comenzamos la bajada. El inicio es ¡apáñate como puedas! triscando por la gravera, todo piedra descompuesta hasta alcanzar un pinar que hay más abajo.
6.- Pino y piñas brotando. Color rosáceo
* Llegamos enseguida. Como encuentro curioso el color de los gérmenes de futuras piñas, rosado-violáceo frente al amarillo habitual, tiro una foto.
Tras el pinar vendrá un trozo sin arbolado, pero sí brezo, siempre blanco, gayuba en el suelo -como en la sierra madrileña y en muchas más, es la uña de oso que da frutos rojos, no ahora, bajita, de hoja carnosa y pegada al suelo-.
Más adelante entramos en el hayedo, estupendo hayedo este del Moncayo. Por delante van Antonio y Amalio. Cuando parecen haber llegado al destino nos gritan, les decimos que vayan pidiendo las cervezas, pero... las cervezas tendrán que esperar. Hemos desembocado algo más abajo de la meta, en un aparcamiento anterior al último, y al poco ya estamos en el "santuario" tomándonos el "agua bendita".
Hemos participado 5 y al final del día acabaremos siendo 30.
DATOS DE INTERÉS:
* Desnivel subido y bajado: 700 metros
* Tiempo Ida: 1h. 45´
* Tiempo Vuelta: 1h. 40´
* Dificultad: Ninguna en esta época, con un cierto grado de entrenamiento -para la bajada inicial-. En invierno la subida guapa es por los llamados "gendarmes" y es más dura ¡y fría! recuerdo haber sentido que se me congelaba la línea de los labios la primera vez que allí fui.
Para descripción detallada y fotos pinchar en http://www.mendikat.net/monte.php?numero=352
También en: http://www.naturalezadearagon.com/enmoncayo.php
Crónica siguiente paqquita.blogspot.com/2007/06/el-moncayo-iii.html
PAQUITA
* Nos levantamos sin prisas -el recorrido es corto- antes de las 8 de la mañana y a las 8h. 50´estamos iniciando la senda en el final de la pista, el llamado Santuario de Virgen del Moncayo, en las Peñas Negras (1620m)
Arranca a su izquierda y va subiendo inicialmente entre pinos, brezo en flor -blanca- y en las partes más soleadas frambueso -sin flores aún-. La senda se situa sobre el santuario, superando las peñas negras. A las 9 y media salimos del bosque y ya todo el recorrido será a la intemperie
4.- En imagen: Antonio
* Cruzamos por canchales y a eso de las 10 y cuarto estamos en un collado entre dos cimas, las de San Martín y la de San Miguel -o Moncayo, tiene los dos nombres, me entero ahora-.
5.- Cima del Moncayo (2.315m) y su vértice geodésico. En imagen: Blas, Antonio, Jose Mari, Amalio y yo=Paquita
* Tomamos la derecha y en poco rato estaremos en la cima, a la 1 hora 45 minutos del inicio, tal y como ponen en el panel que leímos. Desde que abandonamos el bosque se hizo notar el aire, algo propio de aquí, y frío, sobre todo en la cima, cosa que se resuelve yendo siempre prevenidos de ropa adecuada.
A un lado, hacia abajo, vemos la llamada depresión del Ebro, y atrás tenemos Soria y las tierras de Ágreda, Ólvega y Gómara. No he perdido oportunidad de escribir sus nombres, me encanta su sonido, esas esdrújulas.
El día no es deslumbrante, está cubierto, pero los he conocido más duros. La vez anterior llovía, hacía ventisca, la visibilidad... imagínese.
Subiendo nos adelantaron tres hombres y nos los encontramos en la cima, al poco llegarán una pareja y perro que dicen venir por Agramonte, y se acabó. Bueno... no, que ella se ofreció para echarnos una foto cimera y aceptamos. Wiski, wiski ¡ya!
Para tomar "un bocado" nos guareceremos en uno de los varios cortavientos que hay montados -paredes de piedra semicirculares de medio metro de altura, construidas por los propios usuarios-.
El Moncayo, que en principio es fácil, puede resultar traicionero si se echa la niebla encima. Ya le pasó a un compañero que se bajó a Soria desorientado total.
6.- Bajando por otra ladera
* La vuelta la hacemos por otro lado, cerrando el círculo imaginario.
Son las 11 y veinte cuando comenzamos la bajada. El inicio es ¡apáñate como puedas! triscando por la gravera, todo piedra descompuesta hasta alcanzar un pinar que hay más abajo.
* Llegamos enseguida. Como encuentro curioso el color de los gérmenes de futuras piñas, rosado-violáceo frente al amarillo habitual, tiro una foto.
Tras el pinar vendrá un trozo sin arbolado, pero sí brezo, siempre blanco, gayuba en el suelo -como en la sierra madrileña y en muchas más, es la uña de oso que da frutos rojos, no ahora, bajita, de hoja carnosa y pegada al suelo-.
Más adelante entramos en el hayedo, estupendo hayedo este del Moncayo. Por delante van Antonio y Amalio. Cuando parecen haber llegado al destino nos gritan, les decimos que vayan pidiendo las cervezas, pero... las cervezas tendrán que esperar. Hemos desembocado algo más abajo de la meta, en un aparcamiento anterior al último, y al poco ya estamos en el "santuario" tomándonos el "agua bendita".
Hemos participado 5 y al final del día acabaremos siendo 30.
DATOS DE INTERÉS:
* Desnivel subido y bajado: 700 metros
* Tiempo Ida: 1h. 45´
* Tiempo Vuelta: 1h. 40´
* Dificultad: Ninguna en esta época, con un cierto grado de entrenamiento -para la bajada inicial-. En invierno la subida guapa es por los llamados "gendarmes" y es más dura ¡y fría! recuerdo haber sentido que se me congelaba la línea de los labios la primera vez que allí fui.
Para descripción detallada y fotos pinchar en http://www.mendikat.net/monte.php?numero=352
También en: http://www.naturalezadearagon.com/enmoncayo.php
Crónica siguiente paqquita.blogspot.com/2007/06/el-moncayo-iii.html
PAQUITA
El traje gris
Recreando a Dudu en su blog http://enfinyetcetera.blogspot.com/ escrito de fecha 21/6/07.
El traje gris ... -muy a mi pesar- no lo quiero, pero ahí está.
PAQUITA
El traje gris ... -muy a mi pesar- no lo quiero, pero ahí está.
PAQUITA
Vigilia Poética: C.P.J.Hierro (2.11)
Mañana 22 de junio, viernes, se celebra la Vigilia Poética 2007 que anualmente viene desarrollando el Centro de Poesía José Hierro de Getafe.
Contra lo habitual, este año no será en la plaza anexa del centro de poesía sino en el Hospitalillo de San José, en pleno centro urbano de Getafe (C/ Hospital de San José, 4)
A las 21 horas será el inicio de la misma y en la tarjeta que he recibido pone que actuarán entre otros -menos afamados, supongo- Javier Krahe y Pepe Viyuela. La presentación, como siempre -ya sea en solitario o compartida- la hará Gonzalo Escarpa.
Yo iré, en principio. Os lo comunico a los que esto leéis y pueda que tengáis interés en ello.
Un beso. PAQUITA
Contra lo habitual, este año no será en la plaza anexa del centro de poesía sino en el Hospitalillo de San José, en pleno centro urbano de Getafe (C/ Hospital de San José, 4)
A las 21 horas será el inicio de la misma y en la tarjeta que he recibido pone que actuarán entre otros -menos afamados, supongo- Javier Krahe y Pepe Viyuela. La presentación, como siempre -ya sea en solitario o compartida- la hará Gonzalo Escarpa.
Yo iré, en principio. Os lo comunico a los que esto leéis y pueda que tengáis interés en ello.
Un beso. PAQUITA
Mediterráneo
MEDITERRÁNEO (de Pedro Bernal)
En esta piedra espero su venida.
(Tu espalda se solaza.)
Remolinos
de cañas, conchas, algas, caracolas
y cordeles (azules, rojos, verdes,)
huérfanos olvidados del estero,
forman paraísos
donde juega la brisa con la duna.
La lengua de la ola lava y lame,
en un ir y venir acompasado,
el espejo salobre: traza trazos
como si dibujara la inocencia.
Larga la espera, breve la partida,
un cerco palpitante de deseo y frontera,
(arena, sol, espuma…)
avanza descubriendo barcarolas
hasta donde tu cuerpo se solaza.
Mientras, en esta piedra, yo la espero.
En esta piedra espero su venida.
(Tu espalda se solaza.)
Remolinos
de cañas, conchas, algas, caracolas
y cordeles (azules, rojos, verdes,)
huérfanos olvidados del estero,
forman paraísos
donde juega la brisa con la duna.
La lengua de la ola lava y lame,
en un ir y venir acompasado,
el espejo salobre: traza trazos
como si dibujara la inocencia.
Larga la espera, breve la partida,
un cerco palpitante de deseo y frontera,
(arena, sol, espuma…)
avanza descubriendo barcarolas
hasta donde tu cuerpo se solaza.
Mientras, en esta piedra, yo la espero.
junio 20, 2007
El Moncayo. Club J.O., junio 2007
Las fotos llevan una explicación y al relato lo precede un *asterisco. Lo copiado aparece "entrecomillado". Para
VER las FOTOS, sus detalles, DEBEN AGRANDARSE clicando sobre ellas. Fueron tomadas con cámara analógica y ahora
escaneadas, 9/6/2015
* Acudimos al evento organizado por el JO de Zaragoza este pasado fin de semana y al paso subir al Moncayo (2.315 m) ¿Dónde está el Moncayo? Al noroeste de Zaragoza, lindando con Soria / Castilla y León y muy cerca de La Rioja y Navarra.
Nos alojaremos en un albergue municipal de Tarazona, el Refugio La Paridera, situado en la falda de la propia sierra, de camino al santuario, arranque habitual de las excursiones.
Para llegar hasta aquí hemos venido por la A-2 hasta Morata de Jalón, allí la abandonamos y nos dirigimos a Tierga y luego Borja.
Chodes se pasa por su mismo centro, algo de lo más curioso porque es una pequeña plaza circular con dos puertas enfrentadas con todo el aspecto de haber servido en tiempos para festejos taurinos.
Este tramo del camino es bello, de una belleza agreste, bravía, poco domesticada por el hombre, muy despoblado.
Poco antes de Borja está Ainzón. Paramos porque vemos una bodega y el vino de la zona es muy bueno. Se llama Viñedos y Crianzas Santo Cristo. El señor que atiende la venta nos explica las distintas variedades que están expuestas y a petición del enterado del grupo nos da a probar dos, los mismos que nos llevaremos. Su relación calidad/ precio es interesante, a saber: un crianza 2004 cuesta 3,15 euros.
En Borja pararemos también en Bodegas Borsao, pero al comprobar que el precio del que ya conocemos -su vino joven- es 2,5 -el mismo que en el hipermercado habitual- no cargamos.
Pasamos Bulbuente y en Vera de Moncayo, poco antes de Tarazona -visita recomendada para quien no conozca esta hermosa ciudad. Una página guapa parece http://www.tarazonayelmoncayo.es/ - nos desviamos y lo cruzamos.
1.- Foto día siguiente. Momento cumbre: la comida
En imagen: Pili, Mari, yo, Ángel, Antonio, ¿?, Cochi y Araceli
* Al salir del pueblo aparece el desvío al Monasterio de Veruela a la izquierda y al monte del Moncayo a la dcha., nuestro destino. Del monasterio de Veruela solo puedo decir que es encantador, cisterciense, se vió afectado por el tema de la desamortización de Mendizábal, pero lo están rehabilitando y tiene un claustro precioso, así como una sala capitular de las más bellas que conozco, si no la más. Una página interesante parece http://www.arteguias.com/monasterio/veruela.htm.
Nosotros vamos hacia la sierra del Moncayo, por el camino voy viendo unas pequeñas flores rosas ¡ya está deben ser jaras! pero no de las que tenemos en Madrid, la pringosa, sino de la que es más pequeña de porte, más claro su verde y como pelillos en sus hojas.
Han colocado antes de iniciar la subida, cuando tienes toda la panorámica del macizo frente a ti, un panel explicativo del mismo, contándote los distintos árboles que lo pueblan según la altitud. Confirmo lo que pensé, estamos rodeados de jaras con bonitas flores rosa y algún rosal silvestre del mismo color.
Continuamos camino siguiendo las indicaciones de "al santuario" que no es tal, sino un bar-restaurante.
A media camino vemos a parte de la tropa, son: Antonio, Ángel Bagíl y Mesonero, nos hacen gestos, van a colocar los carteles para que no haya confusiones.
2.- FOTO comida día siguiente. Otra
*Algo más adelante vemos la edificación, es muy chula, en piedra y unas columnas cónicas. Se merecía mejor trato del que debe tener, porque por dentro está bastante desangelado y a la entrada las hortigas campan alegremente. ¿Qué pasa con las hortigas? Pues que en caso de supervivencia pueden venir fantásticamente -son comestibles-, pero si esa no es la cuestión pican al roce ¡y de lo lindo! un par de horas no te las quita nadie. Eso sí, tiene su habitación múltiple -para 30- con literas corridas a dos alturas, muy holgadas -como un metro para cada uno- su colchoneta, manta y almohada "sin funda" -nosotros nos paseamos a todas partes con nuestros sacos de dormir y las almohadas-. Dispone de cocina con frigoríco -y los utensilios de cocina-, amplio salón y servicios sobrios. Precio fijo por noche: 100 euros -vayan los que vayan, creo-.
María y Cochita dejaron la mesa preparada -sabían que veníamos-.
Más tarde llegarán Amalio, Jose María y las Pilares, el resto lo hará a lo largo del sábado.
Crónica siguiente http://paqquita.blogspot.com.es/2007/06/el-moncayo-ii-la-excursin.html
PAQUITA
* Acudimos al evento organizado por el JO de Zaragoza este pasado fin de semana y al paso subir al Moncayo (2.315 m) ¿Dónde está el Moncayo? Al noroeste de Zaragoza, lindando con Soria / Castilla y León y muy cerca de La Rioja y Navarra.
Nos alojaremos en un albergue municipal de Tarazona, el Refugio La Paridera, situado en la falda de la propia sierra, de camino al santuario, arranque habitual de las excursiones.
Para llegar hasta aquí hemos venido por la A-2 hasta Morata de Jalón, allí la abandonamos y nos dirigimos a Tierga y luego Borja.
Chodes se pasa por su mismo centro, algo de lo más curioso porque es una pequeña plaza circular con dos puertas enfrentadas con todo el aspecto de haber servido en tiempos para festejos taurinos.
Este tramo del camino es bello, de una belleza agreste, bravía, poco domesticada por el hombre, muy despoblado.
Poco antes de Borja está Ainzón. Paramos porque vemos una bodega y el vino de la zona es muy bueno. Se llama Viñedos y Crianzas Santo Cristo. El señor que atiende la venta nos explica las distintas variedades que están expuestas y a petición del enterado del grupo nos da a probar dos, los mismos que nos llevaremos. Su relación calidad/ precio es interesante, a saber: un crianza 2004 cuesta 3,15 euros.
En Borja pararemos también en Bodegas Borsao, pero al comprobar que el precio del que ya conocemos -su vino joven- es 2,5 -el mismo que en el hipermercado habitual- no cargamos.
Pasamos Bulbuente y en Vera de Moncayo, poco antes de Tarazona -visita recomendada para quien no conozca esta hermosa ciudad. Una página guapa parece http://www.tarazonayelmoncayo.es/ - nos desviamos y lo cruzamos.
1.- Foto día siguiente. Momento cumbre: la comida
En imagen: Pili, Mari, yo, Ángel, Antonio, ¿?, Cochi y Araceli
* Al salir del pueblo aparece el desvío al Monasterio de Veruela a la izquierda y al monte del Moncayo a la dcha., nuestro destino. Del monasterio de Veruela solo puedo decir que es encantador, cisterciense, se vió afectado por el tema de la desamortización de Mendizábal, pero lo están rehabilitando y tiene un claustro precioso, así como una sala capitular de las más bellas que conozco, si no la más. Una página interesante parece http://www.arteguias.com/monasterio/veruela.htm.
Nosotros vamos hacia la sierra del Moncayo, por el camino voy viendo unas pequeñas flores rosas ¡ya está deben ser jaras! pero no de las que tenemos en Madrid, la pringosa, sino de la que es más pequeña de porte, más claro su verde y como pelillos en sus hojas.
Han colocado antes de iniciar la subida, cuando tienes toda la panorámica del macizo frente a ti, un panel explicativo del mismo, contándote los distintos árboles que lo pueblan según la altitud. Confirmo lo que pensé, estamos rodeados de jaras con bonitas flores rosa y algún rosal silvestre del mismo color.
Continuamos camino siguiendo las indicaciones de "al santuario" que no es tal, sino un bar-restaurante.
A media camino vemos a parte de la tropa, son: Antonio, Ángel Bagíl y Mesonero, nos hacen gestos, van a colocar los carteles para que no haya confusiones.
*Algo más adelante vemos la edificación, es muy chula, en piedra y unas columnas cónicas. Se merecía mejor trato del que debe tener, porque por dentro está bastante desangelado y a la entrada las hortigas campan alegremente. ¿Qué pasa con las hortigas? Pues que en caso de supervivencia pueden venir fantásticamente -son comestibles-, pero si esa no es la cuestión pican al roce ¡y de lo lindo! un par de horas no te las quita nadie. Eso sí, tiene su habitación múltiple -para 30- con literas corridas a dos alturas, muy holgadas -como un metro para cada uno- su colchoneta, manta y almohada "sin funda" -nosotros nos paseamos a todas partes con nuestros sacos de dormir y las almohadas-. Dispone de cocina con frigoríco -y los utensilios de cocina-, amplio salón y servicios sobrios. Precio fijo por noche: 100 euros -vayan los que vayan, creo-.
María y Cochita dejaron la mesa preparada -sabían que veníamos-.
Más tarde llegarán Amalio, Jose María y las Pilares, el resto lo hará a lo largo del sábado.
Crónica siguiente http://paqquita.blogspot.com.es/2007/06/el-moncayo-ii-la-excursin.html
PAQUITA
La vergonzosa actuación de los abogados de la AVT: molinos de papel
Copiado de http://molinospapel.blogspot.com/ artículo fechado el 19 junio, 2007
La vergonzosa actuación de los abogados de la AVT
Queridos todos, Reproduzco a continuación un artículo publicado hoy en el diario El País, escrito por Pablo Ordaz. Creo que reproduce perfectamente la actuación de los abogados de la Asociación víctimas del Terrorismo (dirigida por Francisco Alcaraz) en el juicio por la mayor masacre terrorista de la historia de España. Debería divulgarse a los cuatro vientos, el papel que están jugando los abogados de ésta asociación de víctimas para tratar de vincular a ETA en el atentado del 11-M y encontrar un sentido político a la matanza, colaborando con los abogados defensores de los acusados, retirando acusaciones, diciendo que Aznar no participó en la guerra de Iraq, vinculando este atentado con el proceso de paz... En pocas palabras, dejando claro lo que son, y produciendo una tremenda verguenza ajena.
Con todo, ¿Está la AVT, sus portavoces y sus abogados, a la altura de lo que representan?, ¿Está la AVT legitimada para portar la voz de tantas víctimas del terrorismo?
EL FACTOR HUMANO
El abogado Boyé no es un blandengue precisamente, pero algunos días, sentado al final de la sala, casi oculto por el resto de los abogados de la acusación, siente que sus ojos se humedecen y los deja hacer. Permite que su mirada se quede un rato en un hombre de pelo corto, pantalón vaquero y camisa a rayas que sigue el juicio cada día desde el mismo sitio, sin perder un detalle ni tampoco la compostura. Es el padre del acusado Iván Granados Peña, uno de los jóvenes de Avilés a los que Suárez Trashorras intentó captar para que transportaran los explosivos hasta Madrid. El abogado Gonzalo Boyé mira a ese hombre pero en realidad ve a otro.-Ese hombre me recuerda a mi padre. Casi ciego por la diabetes, cogía un avión y se cruzaba el Atlántico para venir a visitarme. Mi padre nunca perdió su fe en mí.
Porque el abogado Gonzalo Boyé, de nacionalidad chilena, estuvo una larga temporada entre rejas. Un juzgado lo condenó -junto a dos miembros del MIR chileno- por pasar información a ETA sobre el industrial Emiliano Revilla, secuestrado en 1989. A Boyé lo interrogaron entonces policías de información que han venido a declarar a este juicio, y la fiscal Olga Sánchez lo acusó de prestar su propio coche para que otros siguieran a Revilla. Él siempre defendió su inocencia, pero fue condenado a 14 años, ocho meses y un día. Cuando se le pregunta por el día que entró en la cárcel, responde que su hija mayor tenía cuatro años y la pequeña seis meses, y que sin duda por eso decidió ponerle fecha de caducidad a su rabia.-Sentí que me habían condenado injustamente, pero no se puede vivir eternamente enrabietado. Decidí estudiar Derecho y, cuando conseguí salir en tercer grado, trabajé repartiendo hielo de madrugada. Reuní algún dinero y me compré mi primer ordenador para ejercer de abogado.
Ayer, a eso de las cinco de la tarde, el abogado Boyé, que representa a una chilena cuyo marido murió en los trenes, se subió al estrado para defender sus conclusiones definitivas, pero para entonces ya habían pasado muchas cosas.
Por ejemplo, a media mañana, hubo un abogado que dio, por fin, en la clave del juicio.-Al Qaeda no está aquí porque no está procesado Bin Laden.Una vez descartado el terrorismo islamista, el mismo abogado se preguntó.-¿Está ETA? Pues no lo sabemos porque no se ha investigado...
Así que, sin ver claro el asunto de Al Qaeda y esperando a que ETA aparezca de un momento a otro, el abogado fue tomando decisiones:-Voy a retirar la acusación contra Jamal Zougam [al que varios testigos recuerdan haberlo visto en los trenes la mañana del 11 de marzo]. Los testigos tienen un problema (...). No creemos que alguien que está poniendo bombas pueda dedicarse a tropezar con la gente.
Así que Juan Carlos Rodríguez Segura -sí, habían acertado-, uno de los tres abogados de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, borró de su lista a Jamal Zougam, y éste, desde el otro lado del cristal blindado, le sonrió con gratitud, momento que recogieron las cámaras de la sala, extremo este que a algunos de los presentes, aunque ya sobradamente avisados, les volvió a provocar una sensación muy rara. ¿Un presunto terrorista agradecido a un abogado acusador? ¿Un abogado de la acusación dedicando el 90% de su alegato final a poner de vuelta y media a la fiscal, al juez instructor, a la policía?-Felicidades, Juan Carlos, lo has hecho muy bien.
Cuando terminó su intervención, el abogado de la AVT fue calurosamente felicitado... por los abogados defensores.
Luego sucedió en la sala una de esas cosas que no se suelen ver en los telediarios. Un abogado al que apenas nadie conoce, en parte por su juventud y sobre todo porque no ha participado en conciliábulos extraños, sube al estrado para defender sus conclusiones definitivas. Habla en representación de una de las víctimas, Roberto Pericalli. Durante las 49 sesiones del juicio, ha preguntado cuando ha venido a cuento y se ha callado cuando así le convenía. Luego, colgaba la toga y se iba a su casa. Casi nadie sabía su nombre, pero ayer le tocó subir al estrado justo unos minutos después de que terminara Rodríguez Segura. La comparación resultó brutal. Un abogado con 18 años de trabajo a sus espaldas en la Audiencia Nacional -el propio Rodríguez Segura se encargó de explicar ese detalle de su currículo- buscando manos negras que ponen mochilas para derribar gobiernos al tiempo que retira la acusación de uno de los presuntos autores materiales de la matanza. Y otro, muy joven y muy digno, que presenta ante los magistrados un alegato impecable, bien trabado, repleto de datos pero a la vez ameno, sobrio pero sin olvidar a las víctimas y a la emoción que de su recuerdo emana. Ese abogado se llama Álvaro Sanz Marlasca. Y cuando terminó su alegato también fue felicitado, pero en esta ocasión por las víctimas y por los abogados que a ellas defienden. Sonrió, colgó su toga y se fue a su casa.
Más tarde llegó Boyé y se puso a defender el Estado de derecho. El mismo Estado de derecho que a él le condenó por un delito tan feo, el mismo que le permitió estudiar la carrera en la cárcel y ejercer después. El mismo que concede a Rodríguez Segura la libertad para decir las cosas que dice y para llevar en el reloj una banderita con el águila, el yugo y las flechas.
Publicado por Eduardo Madina
La vergonzosa actuación de los abogados de la AVT
Queridos todos, Reproduzco a continuación un artículo publicado hoy en el diario El País, escrito por Pablo Ordaz. Creo que reproduce perfectamente la actuación de los abogados de la Asociación víctimas del Terrorismo (dirigida por Francisco Alcaraz) en el juicio por la mayor masacre terrorista de la historia de España. Debería divulgarse a los cuatro vientos, el papel que están jugando los abogados de ésta asociación de víctimas para tratar de vincular a ETA en el atentado del 11-M y encontrar un sentido político a la matanza, colaborando con los abogados defensores de los acusados, retirando acusaciones, diciendo que Aznar no participó en la guerra de Iraq, vinculando este atentado con el proceso de paz... En pocas palabras, dejando claro lo que son, y produciendo una tremenda verguenza ajena.
Con todo, ¿Está la AVT, sus portavoces y sus abogados, a la altura de lo que representan?, ¿Está la AVT legitimada para portar la voz de tantas víctimas del terrorismo?
EL FACTOR HUMANO
El abogado Boyé no es un blandengue precisamente, pero algunos días, sentado al final de la sala, casi oculto por el resto de los abogados de la acusación, siente que sus ojos se humedecen y los deja hacer. Permite que su mirada se quede un rato en un hombre de pelo corto, pantalón vaquero y camisa a rayas que sigue el juicio cada día desde el mismo sitio, sin perder un detalle ni tampoco la compostura. Es el padre del acusado Iván Granados Peña, uno de los jóvenes de Avilés a los que Suárez Trashorras intentó captar para que transportaran los explosivos hasta Madrid. El abogado Gonzalo Boyé mira a ese hombre pero en realidad ve a otro.-Ese hombre me recuerda a mi padre. Casi ciego por la diabetes, cogía un avión y se cruzaba el Atlántico para venir a visitarme. Mi padre nunca perdió su fe en mí.
Porque el abogado Gonzalo Boyé, de nacionalidad chilena, estuvo una larga temporada entre rejas. Un juzgado lo condenó -junto a dos miembros del MIR chileno- por pasar información a ETA sobre el industrial Emiliano Revilla, secuestrado en 1989. A Boyé lo interrogaron entonces policías de información que han venido a declarar a este juicio, y la fiscal Olga Sánchez lo acusó de prestar su propio coche para que otros siguieran a Revilla. Él siempre defendió su inocencia, pero fue condenado a 14 años, ocho meses y un día. Cuando se le pregunta por el día que entró en la cárcel, responde que su hija mayor tenía cuatro años y la pequeña seis meses, y que sin duda por eso decidió ponerle fecha de caducidad a su rabia.-Sentí que me habían condenado injustamente, pero no se puede vivir eternamente enrabietado. Decidí estudiar Derecho y, cuando conseguí salir en tercer grado, trabajé repartiendo hielo de madrugada. Reuní algún dinero y me compré mi primer ordenador para ejercer de abogado.
Ayer, a eso de las cinco de la tarde, el abogado Boyé, que representa a una chilena cuyo marido murió en los trenes, se subió al estrado para defender sus conclusiones definitivas, pero para entonces ya habían pasado muchas cosas.
Por ejemplo, a media mañana, hubo un abogado que dio, por fin, en la clave del juicio.-Al Qaeda no está aquí porque no está procesado Bin Laden.Una vez descartado el terrorismo islamista, el mismo abogado se preguntó.-¿Está ETA? Pues no lo sabemos porque no se ha investigado...
Así que, sin ver claro el asunto de Al Qaeda y esperando a que ETA aparezca de un momento a otro, el abogado fue tomando decisiones:-Voy a retirar la acusación contra Jamal Zougam [al que varios testigos recuerdan haberlo visto en los trenes la mañana del 11 de marzo]. Los testigos tienen un problema (...). No creemos que alguien que está poniendo bombas pueda dedicarse a tropezar con la gente.
Así que Juan Carlos Rodríguez Segura -sí, habían acertado-, uno de los tres abogados de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, borró de su lista a Jamal Zougam, y éste, desde el otro lado del cristal blindado, le sonrió con gratitud, momento que recogieron las cámaras de la sala, extremo este que a algunos de los presentes, aunque ya sobradamente avisados, les volvió a provocar una sensación muy rara. ¿Un presunto terrorista agradecido a un abogado acusador? ¿Un abogado de la acusación dedicando el 90% de su alegato final a poner de vuelta y media a la fiscal, al juez instructor, a la policía?-Felicidades, Juan Carlos, lo has hecho muy bien.
Cuando terminó su intervención, el abogado de la AVT fue calurosamente felicitado... por los abogados defensores.
Luego sucedió en la sala una de esas cosas que no se suelen ver en los telediarios. Un abogado al que apenas nadie conoce, en parte por su juventud y sobre todo porque no ha participado en conciliábulos extraños, sube al estrado para defender sus conclusiones definitivas. Habla en representación de una de las víctimas, Roberto Pericalli. Durante las 49 sesiones del juicio, ha preguntado cuando ha venido a cuento y se ha callado cuando así le convenía. Luego, colgaba la toga y se iba a su casa. Casi nadie sabía su nombre, pero ayer le tocó subir al estrado justo unos minutos después de que terminara Rodríguez Segura. La comparación resultó brutal. Un abogado con 18 años de trabajo a sus espaldas en la Audiencia Nacional -el propio Rodríguez Segura se encargó de explicar ese detalle de su currículo- buscando manos negras que ponen mochilas para derribar gobiernos al tiempo que retira la acusación de uno de los presuntos autores materiales de la matanza. Y otro, muy joven y muy digno, que presenta ante los magistrados un alegato impecable, bien trabado, repleto de datos pero a la vez ameno, sobrio pero sin olvidar a las víctimas y a la emoción que de su recuerdo emana. Ese abogado se llama Álvaro Sanz Marlasca. Y cuando terminó su alegato también fue felicitado, pero en esta ocasión por las víctimas y por los abogados que a ellas defienden. Sonrió, colgó su toga y se fue a su casa.
Más tarde llegó Boyé y se puso a defender el Estado de derecho. El mismo Estado de derecho que a él le condenó por un delito tan feo, el mismo que le permitió estudiar la carrera en la cárcel y ejercer después. El mismo que concede a Rodríguez Segura la libertad para decir las cosas que dice y para llevar en el reloj una banderita con el águila, el yugo y las flechas.
Publicado por Eduardo Madina
junio 19, 2007
Repitiendo
He vuelto a hacerlo -nunca más de tres al año- ... ¿?
Ayer ... doné parte de mi sangre.
(Quiero creer que la aplicación que le den será la más ética, no sujeta a la subjetividad de individuo alguno)
PAQUITA
Ayer ... doné parte de mi sangre.
(Quiero creer que la aplicación que le den será la más ética, no sujeta a la subjetividad de individuo alguno)
PAQUITA
La importancia del terrorismo... (+ Júcaro)
Del blog http://14deabril.wordpress.com/. Artículo publicado el lunes 11/6/07.
La importancia del terrorismo
¿Por qué damos tanta importancia a todo lo relacionado con el terrorismo? Considerando los fríos datos de las estadísticas, resulta que el terrorismo no produce más víctimas que otras actividades y sin embargo todos contribuimos a magnificar sus repercusiones y ponemos en bandeja, a sus secuaces, la invitación para que continúen con su actividad criminal.
El número de muertes en el tajo o en la carretera, es mayor que las producidas por esos iluminados de las pistolas y coches bombas. La muerte encontrada de manera violenta, en sus múltiples formas incluida la violencia de género, multiplica con creces las producidas por los actos criminales de esta panda de asesinos. Nos hemos acostumbrado a vivir con otras causas de muerte escandalosas y apenas si nos sobrecogemos: la producida por el hambre, la que encuentra el inmigrante en la búsqueda desesperada del paraíso inexistente, la de las víctimas de las guerras embozadas en conceptos como libertad, democracia o derechos humanos, y otras tantas. Sin embargo, sucede que la muerte a manos de los terrorista es más conmovedora, más próxima, más mediática; cuando se produce, una especie de escalofrío nos sobrecoge.
Joaquín Leguina define a los terroristas como grupo de fanáticos, de asesinos, de psicópatas que cubren sus miserables actos con sentimientos, aparentemente políticos, de carácter identitario. Si la diéramos por buena ¿por qué no les tratamos como asesinos, fanáticos y psicópatas? Probablemente nunca les trataríamos como tales y no precisamente sólo porque si así fuera, al ser juzgados en vez de enviarlos a la cárcel se les recluiría en el frenopático. Considero que Leguina simplifica en exceso la cuestión; es cierto que la conjunción de fanatismo, de un extremismo nacionalista exacerbado y una suficiente dosis de paranoia aparecen como elementos comunes en estos terroristas pero seguramente hay otras causas que expliquen, aunque no justifiquen, la existencia del terrorismo. Pero de ser cierta esta percepción, y aunque el político bitacorero se refiere a los terroristas etarras, ¿se podría concluir que todos los terrorismos son iguales?, ¿alguien puede equiparar el terrorismo separatista con el terrorismo de carácter supuestamente religioso? Los terroristas lo son no por ser separatistas o religiosos; existen independentistas que trabajan con métodos democráticos y religiosos que predican su credo con otras formas. Todos los terroristas no son iguales aunque todos los terrorismos sean igualmente execrables.
Toda acción terrorista es un acto de propaganda. Eso lo saben los terroristas y lo sabemos nosotros, pero siempre estamos dispuestos a ofrecerles la cobertura que no disponen. Nuestras bitácoras escriben con demasiada frecuencia de ellos, las portadas de los periódicos impresos y digitales les regalan portadas con una frecuencia mayor que a otros exaltados, asesinos y desequilibrados; los editorialistas, columnistas y tertulianos, tres cuarto de lo mismo. Es cierto que ahora esta proliferación es más obscena que en otros periodos pero siempre tuvieron el privilegio de contar con este enorme aparato de propaganda que les ofrecemos.
Cuando la prensa regala portadas a los terroristas, está invitando de manera involuntaria a otros terroristas potenciales a convertirse en otras tristes estrellas de telediarios y noticieros. Si la labor informativa no buscara otros intereses distintos al periodístico, las noticias del terrorismo serían tratadas con menor relevancia y alardes tipográficos. Si de una vez por todas los actos de propaganda no se difundieran con tanta profusión, el producto vendería menos y su aislamiento social aumentaría.
Que los terroristas no son sólo asesinos, fanáticos y psicópatas, lo demuestra el que los periódicos principales y los pensadores más prestigiosos debatan continuamente sobre las causas del terrorismo o que, como escribe Eduard Punset, antropólogos, psicólogos y servicios secretos se dediquen al análisis de cuanto subyace detrás de los actos terroristas.
La importancia del terrorismo
¿Por qué damos tanta importancia a todo lo relacionado con el terrorismo? Considerando los fríos datos de las estadísticas, resulta que el terrorismo no produce más víctimas que otras actividades y sin embargo todos contribuimos a magnificar sus repercusiones y ponemos en bandeja, a sus secuaces, la invitación para que continúen con su actividad criminal.
El número de muertes en el tajo o en la carretera, es mayor que las producidas por esos iluminados de las pistolas y coches bombas. La muerte encontrada de manera violenta, en sus múltiples formas incluida la violencia de género, multiplica con creces las producidas por los actos criminales de esta panda de asesinos. Nos hemos acostumbrado a vivir con otras causas de muerte escandalosas y apenas si nos sobrecogemos: la producida por el hambre, la que encuentra el inmigrante en la búsqueda desesperada del paraíso inexistente, la de las víctimas de las guerras embozadas en conceptos como libertad, democracia o derechos humanos, y otras tantas. Sin embargo, sucede que la muerte a manos de los terrorista es más conmovedora, más próxima, más mediática; cuando se produce, una especie de escalofrío nos sobrecoge.
Joaquín Leguina define a los terroristas como grupo de fanáticos, de asesinos, de psicópatas que cubren sus miserables actos con sentimientos, aparentemente políticos, de carácter identitario. Si la diéramos por buena ¿por qué no les tratamos como asesinos, fanáticos y psicópatas? Probablemente nunca les trataríamos como tales y no precisamente sólo porque si así fuera, al ser juzgados en vez de enviarlos a la cárcel se les recluiría en el frenopático. Considero que Leguina simplifica en exceso la cuestión; es cierto que la conjunción de fanatismo, de un extremismo nacionalista exacerbado y una suficiente dosis de paranoia aparecen como elementos comunes en estos terroristas pero seguramente hay otras causas que expliquen, aunque no justifiquen, la existencia del terrorismo. Pero de ser cierta esta percepción, y aunque el político bitacorero se refiere a los terroristas etarras, ¿se podría concluir que todos los terrorismos son iguales?, ¿alguien puede equiparar el terrorismo separatista con el terrorismo de carácter supuestamente religioso? Los terroristas lo son no por ser separatistas o religiosos; existen independentistas que trabajan con métodos democráticos y religiosos que predican su credo con otras formas. Todos los terroristas no son iguales aunque todos los terrorismos sean igualmente execrables.
Toda acción terrorista es un acto de propaganda. Eso lo saben los terroristas y lo sabemos nosotros, pero siempre estamos dispuestos a ofrecerles la cobertura que no disponen. Nuestras bitácoras escriben con demasiada frecuencia de ellos, las portadas de los periódicos impresos y digitales les regalan portadas con una frecuencia mayor que a otros exaltados, asesinos y desequilibrados; los editorialistas, columnistas y tertulianos, tres cuarto de lo mismo. Es cierto que ahora esta proliferación es más obscena que en otros periodos pero siempre tuvieron el privilegio de contar con este enorme aparato de propaganda que les ofrecemos.
Cuando la prensa regala portadas a los terroristas, está invitando de manera involuntaria a otros terroristas potenciales a convertirse en otras tristes estrellas de telediarios y noticieros. Si la labor informativa no buscara otros intereses distintos al periodístico, las noticias del terrorismo serían tratadas con menor relevancia y alardes tipográficos. Si de una vez por todas los actos de propaganda no se difundieran con tanta profusión, el producto vendería menos y su aislamiento social aumentaría.
Que los terroristas no son sólo asesinos, fanáticos y psicópatas, lo demuestra el que los periódicos principales y los pensadores más prestigiosos debatan continuamente sobre las causas del terrorismo o que, como escribe Eduard Punset, antropólogos, psicólogos y servicios secretos se dediquen al análisis de cuanto subyace detrás de los actos terroristas.
junio 18, 2007
Sobre el valor de la Amistad, del amor a los demás: delokos
Publicado por mundo de lokos http://el-blog-de-delokos.blogspot.com/ el jueves 14 de junio.
Amigos hasta la muerte... y dos historias más
El batallón se había replegado del campo de batalla a un refugio. La contienda era cruelmente combativa. El soldado, muy triste, pidió permiso a su oficial para rescatar al amigo del alma que no había regresado:- "Mi amigo no ha regresado del campo de batalla, señor. Solicito permiso para ir a buscarlo".- “Permiso denegado, soldado. No quiero que arriesgue usted su vida por un hombre que probablemente ha muerto”
El muchacho no encontraba consuelo y sentía una necesidad poderosa de buscar a su compañero.
Siguiendo un impulso superior se escapó sin autorización. Al poco tiempo regresó mortalmente herido, arrastrando con gran esfuerzo el cuerpo de su querido amigo. El oficial lo recibió furioso:- “¡Ya le dije yo que había muerto! ¡Ahora he perdido a dos hombres! Dígame, ¿merecía la pena salir allá para traer un cadáver?”- "¡Claro que merecía la pena, señor!. Cuando llegué, él todavía estaba con vida, maltrecho. Cuando me vio, su rostro se iluminó, y alcanzó a decirme en voz baja:- "¡Mario... estaba seguro que me vendrías a buscar!"... y murió.
(para seguir leyendo -dos más en la página de lokos- pinchar más arriba. Son: Las puertas del cielo y Ofensas y perdón)
Amigos hasta la muerte... y dos historias más
El batallón se había replegado del campo de batalla a un refugio. La contienda era cruelmente combativa. El soldado, muy triste, pidió permiso a su oficial para rescatar al amigo del alma que no había regresado:- "Mi amigo no ha regresado del campo de batalla, señor. Solicito permiso para ir a buscarlo".- “Permiso denegado, soldado. No quiero que arriesgue usted su vida por un hombre que probablemente ha muerto”
El muchacho no encontraba consuelo y sentía una necesidad poderosa de buscar a su compañero.
Siguiendo un impulso superior se escapó sin autorización. Al poco tiempo regresó mortalmente herido, arrastrando con gran esfuerzo el cuerpo de su querido amigo. El oficial lo recibió furioso:- “¡Ya le dije yo que había muerto! ¡Ahora he perdido a dos hombres! Dígame, ¿merecía la pena salir allá para traer un cadáver?”- "¡Claro que merecía la pena, señor!. Cuando llegué, él todavía estaba con vida, maltrecho. Cuando me vio, su rostro se iluminó, y alcanzó a decirme en voz baja:- "¡Mario... estaba seguro que me vendrías a buscar!"... y murió.
(para seguir leyendo -dos más en la página de lokos- pinchar más arriba. Son: Las puertas del cielo y Ofensas y perdón)
junio 17, 2007
Escrito el 10/2/06.VII (35.8)
(1.- Da doble luz a tu verso, para leído de frente y al sesgo.
2.- Verso libre, verso libre ... líbrate mejor del verso ... cuando te esclavice.
3.- Prefiere la rima pobre, la asonancia indefinida. Cuando nada cuenta el canto, acaso sobra la rima.
TODOS en "Proverbios y Cantares" de Antonio Machado)
* ¿Qué hago? ¿Para qué plancho?
Las arrugas pretendo quitar ... y todo, todo, allanar.
* ¿Por qué me entrometo? me dices, pregunto, intercedo?
Nada del otro me es ajeno, ni como ajeno lo considero.
* ¡Vaya caída tonta! a poco me rompo la cara.
Y yo -que iba- pensando en como combinar las palabras.
* ¡Qué importante son las palabras! -aunque alguno no lo crea-
Nos marcan la diferencia entre ... y ... -o: este simio y mi sobrina Andrea-.
* Vanidad de vanidades ... -el creerse importante- cuando todos salimos de las mismas oquedades.
PAQUITA
2.- Verso libre, verso libre ... líbrate mejor del verso ... cuando te esclavice.
3.- Prefiere la rima pobre, la asonancia indefinida. Cuando nada cuenta el canto, acaso sobra la rima.
TODOS en "Proverbios y Cantares" de Antonio Machado)
* ¿Qué hago? ¿Para qué plancho?
Las arrugas pretendo quitar ... y todo, todo, allanar.
* ¿Por qué me entrometo? me dices, pregunto, intercedo?
Nada del otro me es ajeno, ni como ajeno lo considero.
* ¡Vaya caída tonta! a poco me rompo la cara.
Y yo -que iba- pensando en como combinar las palabras.
* ¡Qué importante son las palabras! -aunque alguno no lo crea-
Nos marcan la diferencia entre ... y ... -o: este simio y mi sobrina Andrea-.
* Vanidad de vanidades ... -el creerse importante- cuando todos salimos de las mismas oquedades.
PAQUITA
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