Fernando Broncano R · 18/4/2019
Manuel Rivas Es
probable que cada modo de comunicación tenga su lugar en el arte del
intercambio y confrontación de ideas, opiniones, experiencias.
Según el momento, el interlocutor, el tema. O quizás, del conjunto de estas cosas, sea preferible elegir comunicación verbal o a través de pantallas.
Esta última forma permite leer al interlocutor y repensar antes de contestar. Un estilo que se está perdiendo en la conversación oral directa.
Lo que hemos perdido totalmente es la conversación de intercambio epistolar manuscrita.
Aquello sí que daba tiempo a repensar.
Según el momento, el interlocutor, el tema. O quizás, del conjunto de estas cosas, sea preferible elegir comunicación verbal o a través de pantallas.
Esta última forma permite leer al interlocutor y repensar antes de contestar. Un estilo que se está perdiendo en la conversación oral directa.
Lo que hemos perdido totalmente es la conversación de intercambio epistolar manuscrita.
Aquello sí que daba tiempo a repensar.
Paquita Caminante Posiblemente,
si nuestra manera de afrontar el contacto con los otros fuera
espontánea, sin enmascaramientos, la diferencia entre un intercambio
-conversación física- y otro -conversación virtual- no sería
significativa; salvo por los errores propios del directo. Saludos a todos