abril 01, 2025

CTXT. Carta a la comunidad 393 I Álex Blasco: Una teta y una esvástica

 22/2/2025

El 1 de febrero de 2004, una teta revolucionó el mundo. Aquel día los New England Patriots y los Carolina Panthers jugaban la Super Bowl XXXVIII, una competición que en nuestro país es más famosa por el desmesurado consumo de cerveza y pollo frito durante la final y por el espectáculo musical del intermedio que por lo deportivo. Nadie sabe si ganaron los patriotas o las panteras, pero sí que en el intermedio Janet Jackson, la menor de la prolífica y turbia familia Jackson, interpretó una serie de temas propios que terminaron en una performance histórica. Un joven Justin Timberlake, en un gesto más insulso que sexy, arrancó de un tirón una de las copas del traje de la cantante para dejar su teta derecha al aire. Un pecho que no duró tres segundos en pantalla pero que dio mucho que hablar. Yo era muy pequeño, pero recuerdo que aquí no se hablaba tanto de la decencia como de si fue un destape voluntario o no, y que mi madre repetía una y otra vez que habían copiado a Sabrina Salerno –Rigoberta Bandini no fue tan transgresora, que no os engañen–.

 

        En los puritanos EEUU la cosa fue muy distinta. 150 millones de espectadores gringos vieron un destape de tres segundos que hizo que la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) excluyese a MTV, empresa responsable del espectáculo musical, de futuros intermedios; que la Comisión Federal de Comunicaciones multase a la CBS, cadena que emitía el partido, con 550.000 dólares por “actos indecentes” y que tanto CBS como MTV incluyeran a la artista en una lista negra por la cual fue cancelada durante años de radios y televisiones de todo el mundo. Justin Timberlake continuó con normalidad su carrera. Algunos, pocos, levantaron la voz sobre la censura y la libertad de expresión.

 

        El 9 de febrero de este año, lo de la esvástica no sorprendió a nadie. Los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles jugaron la Super Bowl LIX –insisto en que esto no le interesa a nadie–. Lo que sí interesó a muchos fue la presencia de Donald Trump, invitado por Gayle Benson, propietaria de los New Orleans Saints y persona investigada por asesorar legalmente y encubrir varios casos de pedofilia de la Archidiócesis católica de Nueva Orleans. Hasta este año, ningún presidente de los EEUU había asistido al partido, principalmente por una cuestión de seguridad –el gasto público fue de unos 15 millones de dólares–. Algunos medios dicen que el estadio al completo ovacionó al magnate fascista, otros que los abucheos fueron silenciados. Lo que es seguro es que el espectáculo continuó. En el intermedio, Kendrick Lamar, junto a una bandera de Palestina, animó el evento con Not like us, su beef a Drake, que, según los Grammy, es la mejor canción del año –esto es como si Quevedo hubiese ganado un Griffin por A una nariz–. Y Kanye West puso su granito de arena en la normalización del fascismo en forma de anuncio televisado durante el descanso del partido. El artista grabó un vídeo vertical tumbado en el dentista en el que invitaba a visitar su tienda virtual. En ella se vendía un único producto: una camiseta blanca con una esvástica en el pecho. Ni la NFL ni Donald Trump hicieron comentarios.

 

        Al parecer esto formaba parte de un “ejercicio” que había empezado unos días antes, cuando declaró en Twitter/X que sometía a su mujer, que amaba a Hitler y que era nazi; operación cerrada con cientos de camisetas vendidas, una ¿reflexión? sobre la libertad de expresión y un agradecimiento a Musk por las políticas neonazis de su plataforma.

 

        En tan solo 20 años hemos pasado de escandalizarnos por una teta a ni siquiera sorprendernos porque los gobernantes del mundo sean abiertamente fascistas. Hay quienes achacan este cambio a un estado emocional de supervivencia generalizado en Occidente que se ha ido cociendo lentamente. Una ansiedad existencial asociada a los costes económicos y de oportunidad de la crisis de 2008, primero, y de la invasión de Ucrania, después, y a la desconfianza provocada por la pandemia hacia las autoridades científicas y políticas.

 

        Un estudio publicado recientemente en Alemania destaca la relación directa entre el aumento del precio de los alquileres y el apoyo a la AfD en zonas urbanas tradicionalmente progresistas. Según el estudio, tanto el miedo a una crisis económica como a la crisis del mercado del alquiler provocan una movilidad del voto instrumental en los segmentos de inquilinos con menos recursos, y aquí entra la desconfianza creada por el covid, la equidistancia con la que tanto medios como gobiernos han tratado las crisis humanitarias de refugiados de los últimos años y la proliferación de teorías conspiranoicas, como la del gran reemplazo.

 

        No tengo una conclusión optimista sobre el porvenir del mundo, ni tan siquiera sobre las elecciones en Alemania. ¿Qué podemos hacer? No lo sé. Por suerte, y como hemos visto esta semana, aunque las cabras se asomen a los alféizares con intenciones suicidas, aún pueden ser salvadas por los bomberos de turno (siempre que sean bomberos y no toreros). Quizá la decencia de muchos solo esté siendo empañada por el odio de unos pocos que hacen ruido de más. Puede que el que aquí escribe y el que lee seamos capaces de iluminar este momento tan oscuro. La idea siempre fue plantar cara y por eso estamos aquí. Como dijo Chaplin: “Luchemos por el mundo de la razón. Un mundo donde la ciencia, el progreso, nos conduzca a todos a la felicidad”.

 

        Gracias por estar. Gracias por acompañarnos. 

Álex Blasco

marzo 31, 2025

Identifican el verdadero origen del material radiactivo que nos traen las tormentas de polvo sahariano, de Antonio Martínez Ron

 

Antonio Martínez Ron   2/2/2025


Un nuevo análisis entierra el mito de que las calimas procedentes de Argelia contienen partículas radiactivas de las pruebas nucleares francesas de los años 60: el material, incouo para la salud humana, tiene un origen diferente


La intensa calima registrada en marzo de 2022 en la península ibérica, procedente del sur de Argelia, transportaba pequeñas cantidades de material radiactivo, sin riesgos para la salud humana, cuyo origen no es el que se creía, según un estudio publicado este viernes en la revista Science Advances

Este nuevo trabajo revela que el material radiactivo adherido a las partículas de polvo no procede de las pruebas nucleares realizadas por Francia en el Sáhara en los años 1960, como se suele afirmar en este tipo de episodios. Para sorpresa del equipo liderado por Germán Orizaola, de la Universidad de Oviedo, y Olivier Evrard, de la Universidad París-Saclay, su procedencia son los ensayos nucleares realizados por la Unión Soviética y Estados Unidos durante décadas, que dejaron una señal reconocible en todo el planeta.

"El instituto fantasma": la historia de cómo Ayuso construyó un centro educativo imaginario a base de notas de prensa.


PUBLICO.ES   Tremending   21/02/2025

La voluntariosa escudería mediática que rodea al Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid se encarga de publicitar una labor de gobierno.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en la Asamblea de Madrid, a 28 de enero de 2025, en Madrid.Eduardo Parra / Europa Press


marzo 30, 2025

Ayuso, ¿compañía tóxica o un activo?, de FERNANDO HIDALGO

   

FERNANDO HIDALGO     5/2/2025


Ayuso desatada. La lideresa del PP en Madrid sigue sorprendiéndonos por su capacidad infinita para hiperventilar. Anteayer acusó al Gobierno de haberle pinchado el teléfono: «Qué medios no estarán utilizando, qué habrá que no se vea y qué otras barbaridades no estarán cometiendo. En esta operación de Estado contra mí, que es algo inaudito en Europa y que no sé cómo Europa permite, han entrado la Abogacía del Estado que está defendiendo a la familia y a todos los ministros, han entrado en juicio ministros y operaciones entre gentes de no sé qué niveles por las que se roban ordenadores o se acaba con pruebas. Yo no sé si tengo los teléfonos pinchados», acusó Ayuso en una entrevista con la periodista Ana Rosa Quintana.

Obviamente, de ser verdad lo que dice la política madrileña estaríamos ante un caso gravísimo. Pero, como suele ocurrir entre quienes recurren a la estrategia del ventilador, Ayuso no aporta prueba alguna. Lo dice, su discurso se expande y se queda tan ancha. Es cierto que ella también es víctima de esta forma de actuar, pero desde luego no la legitima para hacerlo.

En cualquier caso, su salida de pata de banco nos pone sobre la mesa, una vez más, la conveniencia o no para Feijoo y, por extensión, para el PP, de una Ayuso desatada que confronta directamente y sin intermediarios con el presidente del Gobierno de España y que marca la agenda de tirios y troyanos, sin someterse a las necesidades de quien en realidad es el líder del partido conservador. Una y otra vez demuestra que va por libre e intenta mantener un perfil que, en el fondo, pretende hacernos ver que ella es la inminente alternativa dentro del Partido Popular a Núñez Feijoo.

Feijoo se encuentra enredado por una madeja difícil de solucionar. Ayuso es una paradoja andante, porque, al mismo tiempo que es una compañía tóxica, también es un importante activo para el partido. Madrid son muchos votos y ella está en la cresta de la ola de la autonomía. Si el expresidente de la Xunta se pone en su sitio y hace valer su liderazgo para frenar a una Ayuso expansionista, entrará en una guerra que erosionará al PP en una comunidad en la que gobierna plácidamente. Pero si deja hacer a la presidenta a su antojo, lo que se verá erosionado es el propio liderazgo de Feijoo, como de hecho se está viendo ya mismo.

Es un jeroglífico de difícil resolución, cosa que sabe perfectamente Pedro Sánchez. El presidente del Gobierno utiliza constantemente a Ayuso para polarizar todo lo que puede y movilizar a la izquierda ante la que considera no solo una política conservadora, sino el paradigma de la ultraderecha y adalid de las políticas liberales que tanto daño (según el PSOE) pueden hacer al estado del bienestar.

Hasta ahora, Feijoo no ha conseguido resolver este problema. Parece más bien resignado a tener que convivir con el desgaste que le ocasiona Ayuso.

La agricultura ecológica saldrá reforzada si Bruselas impone aranceles del 100% a los fertilizantes rusos

 Daniel Lara   3 de febrero de 2025 

Este tributo se sumaría al arancel actual del 6,5% y se iría incrementando hasta alcanzar en tres años entre 315 y 430 euros por tonelada, lo que equivaldría a un arancel del 100%, acabando de facto con la entrada de fertilizantes rusos.

La Comisión Europea planteó la semana pasada a los Estados miembros introducir un arancel de hasta el 100% a la importación de una serie de productos agrícolas rusos, incluidos los tipos más comunes de fertilizantes, que en los últimos años se han disparado pese a la guerra. La medida encarecerá a corto plazo las frutas y verduras, y obligará al sector primario a reconvertirse, pero los expertos creen que permitirá también fomentar la agricultura ecológica y fortalecer la soberanía europea en el sector alimentario.     agricultores europeos, sin (...)embargo, han cargado contra la propuesta porque golpearía la rentabilidad del sector, aunque los expertos creen que su impacto será limitado en España, donde los fertilizantes rusos representan el 15% de las importaciones.