Publicado en 14 de Junio de 2011, en su página de fb.
Autor: Amador Muñoz
La creatividad en sus múltiples aspectos, ha sido poco estudiada, pero empieza a serlo en amplios sectores de la vida humana.
Evito cuatro conocidas definiciones la de Stein, Sillamy, Koestler y de la Cibernética y me quedo con la que sigue: la creatividad como “la capacidad o aptitud humana de producir contenidos mentales de cualquier tipo que básicamente pueden ser considerados como nuevos y desconocidos para quienes los producen. (…) Puede implicar la formación de nuevos sistemas y la creación de nuevas combinaciones de informaciones ya conocidas así como la conversión de asociaciones ya conocidas a situaciones nuevas” (de un libro de texto de psicología)
>>> A título personal me gustaría comentar –soy músico compositor- que el común de las personas, al menos en mi experiencia, consideran que la creatividad es patrimonio exclusivo de los artistas, los pintores, los escritores, los músicos, etc. Nada más lejos de la realidad, la creatividad es una facultad humana que nos acompaña en mayor o menor medida durante toda la vida y en todos nuestros momentos vivenciales. Necesitamos creatividad para vivir un nuevo día, necesitamos creatividad para cambiar una situación psicológica, anímica o emocional adversa, necesitamos creatividad para relacionarlos con los demás y con nosotros mismos, necesitamos creatividad para vivir un amor, necesitamos creatividad, si se me permite, hasta para relacionarnos con nuestro perro.
La creatividad está en el campo artístico, en la política –cada vez menos- , en la técnica, en la ciencia, en la medicina, etc. y sobre todo en el ámbito de las relaciones humanas, por esta última razón la creatividad que tiene que ver con la comunicación, oral o escrita resulta de vital importancia en nuestras vidas.
Las posibilidades expresivas humanas son enormes y se manifiestan ya desde la infancia. Resulta importantísimo por tanto desde el punto de vista educativo fomentar la creatividad verbal y facilitar a los niños un repertorio adecuado de formas de expresarse que a su vez él con su propia creatividad irá transformando en otras. Este es un aspecto que creo que no debemos descuidar en ningún estadio de nuestra vida, siempre existen posibilidades para mejorar “creativamente” nuestra comunicación y por ende nuestra vida y nuestras relaciones interpersonales.
Y para terminar, subrayo que nuestro sistema educativo, fuera del marco de las enseñanzas artísticas no fomenta el cultivo de la creatividad y “la creatividad se puede enseñar y se enseña”. Tal vez sea porque la creatividad nos hace libres.
©AMS Cádiz. Junio de 2011
1 comentario:
Paquita gracias por publicar mi artículo en tu blogg, me siento profundamente halagado, no lo había visto hasta ahora. Espero verte pronto, bien en Madrid, bien en la Lobera, bien en Córdoba. Sé feliz hoy y siempre. Un beso amiga mía. Amador
Publicar un comentario