junio 24, 2006

Vigilia Poética: Centro Poesía José Hierro (2.2)

Y llegó la hora, las 21 según la información facilitada, y empezó a y media, pero no nos molestó. Allí estaban, como siempre, Gonzalo Escarpa y Tacha, más otro muchacho presentador cuyo nombre aún no he memorizado, pese a haberlo visto también en la entrega de premios del pasado mes de ¿mayo? del Certamen Literario organizado por el Ayuntamiento de Getafe, conjuntamente al primer premio internacional de poesía Margarita Hierro, madre de Tacha Romero, fallecida en junio de 2004 -la vigilia poética de ese año coincidió con el Homenaje a los Republicanos, combatientes en la Guerra Civil, que aún permanecen vivos, y ofrecido por el ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid, un ejemplo de ayuntamiento comprometido y que hace honor a su nombre: ajuntamiento, aunamiento-.
Dicha coincidencia supuso que Blas estuvo en la Vigilia y yo en el Homenaje a los excombatientes de la República -nos dividimos, nos repartimos-. Ambos actos estuvieron cargados de emoción.
Tras la presentación inicial, y la actuación del cantautor Moncho Otero, que nos ofreció 5 canciones -especialmente bonita fue la última, sobre un poema de Gloria Fuertes- abrió la "brecha" un señor mayor -como 70 años- que me hizo comprender el valor de "la libertad de expresión" por que le dejamos que largara el "muerto" que llevaba preparado sin cortarle, a saber: un poema a la Virgen de la Cabeza, o cosa así, de unas 7 hojas, enfocado, exclusívamente, como denuncia de las prácticas abortivas de "algunas" mujeres, y de los "niños" no nacidos ¡manda huevos!
Toda su problemática estaba centrada en el niño no nacido, al nacido ¡que le den!
Gracias a la virgen no nos puso dolor de cabeza y pudimos disfrutar de algún momento valioso, como fue el poema en gallego de Luz Pichel, con su traducción simultánea por una muchacha de voz preciosa y entonación de lujo, y aquella señora -también 70 años- con dos poemas divertidos dedicado uno de ellos al gato de Manolo Romero, padre de Tacha. También merecen mención dos muchachas que dijeron un poema a dúo, la joven, genial como lo decía.
A las 12 de la noche, apareció una charanga tamborileando a todo trapo, simultáneamente, otros muchachos echaron pompas de jabón al aire con dos cañones preparados para ello y empezó el frenesí, porque fue eso, los más lanzados no nos hicimos de rogar y atendimos rápidamente la petición de los organizadores para que participáramos actívamente en el momento solsticio. Gracias a la juerga subsiguiente, Mercedes, que vino atendiendo mi comunicado, no me mandó a hacer gárgaras, viendo a algunos que se lanzaron al ruedo para tener su minuto de gloria, y era de pura pena. Vamos, que te reías por no lllorar, como la exhibición de aquella señora que nos declamó un poema, de los aprendidos memorísticamente en la época colegial de algunos -según el colegio al que se acudiera- largo como él sólo e interrumpido por ella misma en varias ocasiones por su olvido ocasional. Eso sí, aplaudimos, de vacío no se fue.
Antes de la charanga Ara Malikian, un violinista ¿griego? interpretó varias piezas de ritmo desenfrenado, le aplaudimos a rabiar.
La vigilia dura toda la noche -la más corta del año- pero a la una y media nos despedimos de mi primo Pedro y Elia, que también acudieron -él como lector de dos poemas suyos- ¡Hay que ver que mi primo escribe bien! pero que mal dice, y, todo, por que es muy callado, no practica lo suficiente el lenguaje oral, lo suyo es la escritura. Y Pedro, no te me ofendas por ésto, que tú, al menos, te has subido al escenario, y yo no sé qué comportamiento tendría en dicho trance.

PAQUITA

Nota Añadida: Buscando el poema de Gloria Fuertes que me gustó encontré otros estupendos, en particular uno titulado "Todavía" que termina ... Y que cuando se ama se ama/ y que sólo es pecado el mal comportamiento.

El 11 de julio leo en un periódico local el resumen que hicieron de este día y en él hablan de Ara Malikian, reconocido violinista armenio, actualmente concertino de la Orquesta Sinfónica de Madrid. Valga esto como rectificación y ampliación.

No hay comentarios: