septiembre 23, 2010

Pablo Neruda (19.13), el comité central de la Poesía... (+ Edu)


Pablo Neruda, el Homero de los pobres. Golpeado de un 11 de Septiembre desdichado y de tumba de 1973.
E.Andradas www.kaosenlared.net/noticia/pablo-neruda-comite-central-poesia

Pablo Neruda, es un poeta Glam en una época de Jazz, pone viagra a los versos, hablaba a la luz con gramática y pensaba que la primavera era la cólera de las flores.

Llevaba a la España que le puso crisantemos a la Legión y a su Cabra del Gobierno de Burgos, en las orillas del Manzanares, se la metió como equipaje en su corazón. El Somme y Francia, eran mucho peso para un poeta que con 20 poemas y una canción desesperada publicaba un libro.

Quiso escribir Koljós y le salía poesía de chuchería para amantes de parque. El 23 de Septiembre no le enterró el mármol, sino un Pol Pot Neoliberal, de risa recta y chistera de general sin alma, Augusto Pinochet. Le mató una epidemia de brutos de estado mayor de Henry Kissinger.

A Pablo Neruda, no le ejecutó el fin de la vida, sino un 11-S en Blanco y negro. Ese día de un septiembre serio e intolerable, que situó un Dachau a Chile, voluntariamente metió sus ojos en la UVI y entró en coma. Murió con la misma bala del AK-47 que mató a Allende, si la primera estaba formada de plomo, la suya la cargó la pena.

El del Parral y habitado de Santiago de Chile, es más del Oriente de Alejandro Magno, que de la Roma tardorrepublicana de Cayo Julio Cesar, del Berlín del Este quinquenal, que de el Bonn de Ludwig Van Beethoven.

Embellecía las estrofas de tildes y adjetivos y escribía odas como tribunales populares. Pablo se atavió de silencio y burlo al ataúd que le disponía para él la Junta de Patricio Carvajal. Se hizo libro para no abandonarnos a los desamores y a los malos de cuartel y patria.

A veces parece que los cipreses de gallardos son Volodia Teitelboim y la brisa elegante Violeta Parra. Que las alamedas nuevas y las espigas estajanovistas que fabrica el campo, son Salvador Allende. Las selvas ponen pasos de Roque Dalton, Silvio Rodríguez parece que le canta a las lunas rojas y Juan Gelman es la amnistía del desaparecido de milico.

Tú, Pablo Neruda, eres el chasquido de los arroyos contagiados de mar, el ruido de la lluvia que tapa el cristal de nube y el puñal a la tripa, de los gobiernos que sólo dejan desahuciados en este mundo gordo de azul.

Eduardo Andradas. Colectivo Poesía – Cultura Indigente-


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