Otra crónica Lobereña. Gredos Cara Sur, Nov. 2010

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1.- Entrada peatonal a La Lobera. Foto del día después.* Son las 5h 10´ pm cuando salgo de casa. A los pocos minutos ya estoy en la M-50, con bastantes coches pero tráfico fluído. La alegría dura poco, la vía de incorporación a la autovía de Extremadura va congestinada... ¡claro! no es un viernes corriente, el lunes es la festividad de Todos los Santos ¡no lo pensé bien! de haberlo hecho me hubiera puesto en ctra. bastante antes. Ya no hay cuestión, sólo procede tener paciencia


2.- Cartel cerámico.

* Flema, mucha, la que hay que tener para estas ocasiones. La velocidad no pasa de los 10 km. hora y a las 7 veo que rebasamos el punto kilométrico 63. A esta hora calculé que sería mi llegada a destino. Anochece, lo que para mí supone como si un velo espeso me tapara la cara. Nunca tuve agudeza visual, miope desde niña, y con los años y los accidentes "delavida" lo llevo oscuro.


3.- Casa dormitorios Cerezo ¿o era Castaño?. A su izda. casa comedor y sala multiusos.

* Por momentos llueve torrencialmente, no hay peligro alguno, considerando la velocidad que llevamos. Traje el mapa de carreteras por si... , me dejo llevar por la memoria. Pasada, por fin, Talavera de la Reina las entradas varias que tiene, he de tomar la primera desviación a la derecha, camino de Arenas de San Pedro. En el cartel sólo menciona Ávila, que está más arriba, por aquí será.


4.- Casa familiar, hortensias y castaño en fruto.

* Este tramo que creía corto, habiéndolo hecho de día, se me hace eterno sin luz, porque no hay ninguna -carretera nacional-, es estrecha y llueve y llueve. No paso de 70, los coches que me siguen me adelantan en cuanto pueden ¡se sabrán el camino! Supongo que voy bien, esa incertidumbre me acompañará durante todo el recorrido por la misma, hasta que llego a Ramacastañas, ¡Bendita ella! iluminada, puesto que se atraviesa. La primera desviación, esta vez izda.


5.- Cascadas en el río, vistas desde la finca de La Lobera.

* Y comienza de nuevo otra travesía por la oscuridad ¡Qué largas se me hacen las distancias de noche! Supongo, sólo supongo, puesto que no veo los carteles, que estoy en la dirección correcta. Casi de contínuo el arbolado me acompaña. Entro en población y reconozco la pendiente de bajada que preside su entrada. Estoy en Arenas de San Pedro. La atravieso y en la bifurcación Guisando o El Hornillo, opto por el último. Sé que no debo ir a Guisando... pero la desviaión a La Lobera debía estar al poco y no aparece. En el km 2 enciendo luz, reviso documentación y confirmo que estoy errada. Vuelta. Ahora sí, aparece un cartel indicador a la derecha al poco de ir por la otra. Llevo los ojos abiertos como las lechuzas, un segundo cartel ahora a la izda. y un tercero, de nuevo derecha.


6.- Pista que sale de la carreterilla y Embalse de Arenas de San Pedro.

* Al poco noto, por los movimientos del vehículo, ciertas protuberancias en la carretera y, al frente, una pendiente pronunciada y con fisuras ¡Hasta aquí hemos llegado! Paro, bajo, miro -con las luces del coche, olvidé la linterna-, veo que estoy en una pista de tierra y junto a la rueda trasera derecha hay una enorme grieta. Llamo por teléfono -móvil- y acude en mi auxilio Ángeles, traída por Rita y su pareja. A mi derecha tengo una superficie brillante, es el embalse. Por los datos deduce que estoy cerca y así es, en la última curva pronunciada salí de frente. Ven las luces. Son las diez menos cuarto cuando llegamos al comedor, hora de cenar.


7.- Olivo y sus frutos.

* Al día siguiente, a la tarde, decido ver claramente donde me confundí. En la salida de la finca hay un pinar, enseguida aparecen plantaciones de cerezos, con sus hojas rojas- otoñándose-, olivos, alguna higuera con fruto aún y pequeñas parras, delimitando las fincas. Paso junto a lo que fue majada de cabras y poco más adelante, tras una fuerte pendiente y en curva, aparece "el lugar del crimen". Ahora sí puedo valorarlo con exactitud.


8.- Serrería y chimenea

* Continuo de bajada, ya puestos, llevo paraguas, llueve, no es novedad. Se ve bonito el embalse, las nieblas, los árboles coloreándose. Luego leeré, en un cartel cercano al mismo, que lo califican como "pantano del río Cuevas", más adelante me incorporo a otra carretera y llego hasta la bifurcación, a la salida de Arenas. La vuelta me costará media hora, quizá más. Toca lectura poética.








9.- Pantano del río Cuevas. Al fondo, derecha, la carreterilla en su tramo casi final.






10.- Vista desde la casa Cerezo.
Fondo: Los Galayos.
Foto similar a otra de Ángeles, del año anterior




11.- Granado y sus frutos.

* Además de los castaños, los propietarios tienen plantados granados y madroños.
Todos ellos, ahora, en fruto.

Las fotos expuestas fueron tomadas -por mí- el sábado, excepto las dos últimas, que corresponden al lunes.

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