noviembre 12, 2009

La mitomanía como forma moderna de estupidez... (+ Lansky)

(Publicado por Lansky el 12-ago-2009 en su blog. Le tenía olvidado... PAQUITA) www.lansky-al-habla.com/

"Oigo el tren viniendo
está doblando en la curva
y no he visto el brillo del sol desde no se cuando,
pero estoy pegado en la prisión de Folson, y el tiempo sigue prolongándose
pero ese tren sigue rodando abajo a San Anton ..
Cuando yo era sólo un bebé mi mamá me dijo. Hijo,
siempre sé un buen chico, nunca juegues con armas.
Pero le disparé a un hombre en Reno solo para mirarlo morir
ahora cada vez que escucho ese silbido cuelgo mi cabeza y grito ..

Apuesto a que hay gente rica comiendo en un vagón restaurante de lujo
ellos están probablemente bebiendo café y fumando grandes cigarros
Bueno yo se que tenia que venir, se que no puedo ser libre
pero esa gente sigue moviéndose
y eso es lo que me tortura ...

Bueno si ellos me liberaran de esta prisión
si ese tren de ferrocarril fuera mío
Apuesto a que movería solo un poco más abajo la línea
lejos de la prisión de Folson, ahí es donde quiero estar
y dejaría a aquel silbido solitario llevarse mi blues"
Johnny Cash

- Me apena que se haya muerto súbitamente (¿cómo si no?) ese joven futbolista de El Español, y hasta lo de Michael Jackson, que se lo andaba buscando en su enloquecido camino de agraciado joven negro a señora blanca de mediana edad, pero francamente no comprendo a esos miles de imbéciles que les lloran desconsoladamente sin que sean parientes ni amigos suyos. La mitomanía es una de las formas de idiotez que más se consolida en estos tiempos.

Con lo del futbolista uno se pregunta cuantos albañiles y operarios de obras públicas que andan picando a pleno sol este verano habrán caído fulminados sin ninguna cobertura informativa. Un sorprendente efecto benéfico del incremento del paro es el descenso precisamente de muertes laborales, igual si prohibimos el fútbol se evitan muertes de deportistas y tantos sensibleros forofos se ahorran disgustos. Hay que tener cuidado con ese duro método de razonamiento que se conoce como reducción al absurdo (porque lo absurdo jamás se reduce).

Como señala ese enorme columnista que es Enric González, puestos a deglutir basura prefiero la tele basura de una exoftálmica (le aprieta el culo y por eso se le saltan los ojos) histérica como la Belén Esteban que la impúdica basura realidad de las declaraciones del presidente de la patronal española.

Un grado más, ya no basura, sino podredumbre mierdera, es la ETA, que lleva a sus últimos extremos aquel nefasto ‘la letra con sangre entra’ para afirmar “Debemos seguir empleando la lucha armada como método de enseñanza”; la pedagogía de la Goma 2. Estos, claro, son los más imbéciles de todos.

No el perfecto imbécil, sino el imbécil perfecto, el ‘cero absoluto’ de la inteligencia emocional, creo, sería aquel que llora en el funeral del futbolista, asiste a los festejos taurinos de vaquillas de su pueblo y tortura con saña al animalito y en el tiempo del aperitivo comenta que él entiende que los etarras luchan por la libertad del pueblo vasco.


1 comentario:

Pocomancha dijo...

Pues tiene toda la razón, coincido en todo. Qué le voy a hacer.