mayo 06, 2009

Andando: Mª Molina-Príncipe de Vergara

O: Andando... otro medio de transporte urbano... desconocido para muchos -percepción mía, sujeta a crítica-.

Tengo que hacer una comanda -me gusta la palabra, es similar a encargo o tarea pero está en desuso- ineludible, necesito que me visen la autorización para la nª intervención quirúrgica ¡cómo suena... intervención quirúrgica! es menos grave de lo aparente, casi superficial, diría yo. Pues eso, debo estar antes de las 18h 30´pm en las oficinas de mi aseguradora -hora de cierre- y tengo toda la tarde disponible.
Algún cálculo sencillo y sí, ideo ir andando desde Nuevos Ministerios, parada del tren de cercanías a la que se accede directamente desde Getafe, desde no hace mucho en que alargaron la línea C-4 de Parla, siendo final del recorrido Alcobendas y San Sebastián de los Reyes.
De casa a Getafe-Centro hay 15 minutos a paso ligero -debe ser algo más de 1 km., poco más-. Ando deprisa, que no con prisas -al menos no ahora- porque, además de que me gusta, estoy convencida de sus beneficios sobre mis extremidades inferiores -la circulación sanguínea de mis piernas- y sobre el corazón. Ambos muy necesarios, junto con todo lo demás, para andar en montaña y... en cualquier parte, para que nos vamos a engañar! Eso sin contar con el efecto euforizante que cualquier estudio le atribuye al acto de caminar.
En la estación estoy poco, pasan con frecuencia. De allí a Nuevos Ministerios hay como 20 minutos y llego a eso de las 5 y media. La tarde es estupenda, segunda quincena de abril, cielo despejado y calor suave. Bajo por el Pº de la Castellana, me paso a la izquierda y dejo de lado el Museo de Ciencias Naturales y el "cubo" vacío que adorna el jardín por el que se accede al mismo. También la estatua de "La reina católica" que hay allí mismo, colocada en la fuente. ¿Qué pinta allí esa estatua? Alguna respuesta habrá, pese a que yo la ignore.
En María de Molina giro a la izda. y subo por ella -literal-, se sube porque la numeración empieza aquí y porque es cuesta arriba, a la izda de aquí y por detrás del Museo de Ciencias Naturales está la colonia del Viso, privilegiada, sobre un altozano, y que desconocía "visualmente" hasta no hace mucho en que me pasé por La residencia de Estudiantes para ver una exposición sobre... Juan Ramón Jiménes, esa fue, relatado aquí el evento... en su momento.
Antes de lo que piensas llegas a la confluencia de Mª de Molina con Príncipe de Vergara y Avenida de América. Cumplo mi cometido, son las 6h. 20´de la tarde.
¿Y ahora? Como voy sin prisas ¡que suerte! decido volver por Príncipe de Vergara, calle que no recorrí nunca andando y mira ¡hoy puede ser un buen dia!
Sí sé donde acaba -conozco ese tramo- o dónde empieza, porque la numeración nace allí, punto más cercano al centro, el mismo Retiro, el madrileño, el Parque del Retiro. Y hacia allí me encamino, estoy recorriendo la jet madrileña, la "auténtica" no las imposturas modernas de barrios residenciales "Fuera de..." tipo Pozuelo o Majadahonda ¡No! eso es cosa de nuevos ricos, aquí están los valores de "siempre", cruzo una gran plaza que se llama... Pza. del Marqués de Salamanca ¡vaya! además de al barrio también le dieron su nombre a la plaza. Pues, no recuerdo haber pasado nunca por ella, ni siquiera en coche.
Sigo por mi derecha y al poco ¿qué me encuentro? una extraña construcción tipo iglesia acabada en torres puntiagudas, acompañada por edificios similares, uno a cada lado ¿qué será esto? me digo mientras busco alguna información cercana a la puerta desde la que observo el panorama ¡y hay niños! muchos niños... y un par de madres de charleta, pues a ellas, disculpad... esto... ¿esto que es?
¡Ángela maría! El colegio del Pilar, el renombrado colegio del Pilar donde tan ilustres hijos de la patria han cursado sus "saberes". Pues... ni un cartelito que lo diga, nada, como confirma una de ellas que comenta que antes había una placa en que decía que tenía 200 años... y algo más. Ya que estamos en estas, continuo... preguntando. Y ¿cuantos niños hay aquí? dos mil quinientos me responden. Y... la enseñanza ¿que tal? ¡muy exigente! enfatiza la otra, la más arreglada -de pintura y peinado me refiero yo-. Bueno, si la exigencia es coherente con la materia dada por el profesorado... bien está! digo. Pues eso... eso va a ser otra cosa! dice la última y asiente la primera. Me despido ¡qué amables! no parecen barriosalmantinas. Al otro lado de la calle, de frente, hay otro extraño edificio -cuando mire el plano del callejero veré que es un colegio religioso, otro-.
Y sigo mi marcha, y veo la Torre de Valencia, señal de que el Retiro está cerca y me encuentro con las Escuelas Aguirre de frente -nada que ver este sr. con la acaparadora del apellido en la actualidad- final de esta calle.
Cruzo la calla Alcalá, paso junto al edificio, lo han vuelto a limpiar, está precioso y leo Casa Árabe ¿? si la última vez que pasé por él había unas oficinas municipales del distrito Retiro. En la puerta por la que se accede, de hierro forjado como toda la valla que lo rodea, hay una muchacha que me confirma lo leído y me induce a entrar, es entrada libre y hay una exposición de fotografías del barrio de Lavapiés, de los años 50 hasta ahora, su multiculturalidad, su paisanaje. El edificio es una pequeña joya -no tan pequeña- recojo algo de documentación y en la salida me dan dos entradas para una película: 400 años de la salida de los Moriscos, 1.609. Teatro de la Zarzuela. Día 28 de abril (Repiten la película al mes).
Estoy cavilando eso mientras entro en el Retiro por el Paseo de coches, nombre por el que lo conocemos y no el que consta en el callejero que estoy manejando mientras esto escribo, a saber: Pº del Duque de Fernán Núñez. Está de fábula el Retiro este mes de abril, mucha gente paseando, con o sin niños, los pájaros... se escucha a los pájaros ¡un descubrimiento! porque a veces se los echa a faltar. La culpa, de los pesticidas... que me digo yo.
Los castaños de Indias están con sus hojas de un verde renovado, lustrosas, y sus flores imponentes. El parque abunda en estos castaños, además de plátanos de sombra -árbol que en algún tiempo se plantó a ambos lados de todos los paseos- habitual en muchas plazas, y hermosos pinos, de una variedad totalmente aérea, por lo alto que eleva su copa. Son algunos de los ejemplares más bonitos que conozco, que admiro.
El paseo desemboca en la Rosaleda, me acerco, están haciéndo fotos a una pareja de recién casados -llevan puestos los trajes oportunos- acompañados de unos cuantos "amigos". Todos chinos, me lo parece, todos sonrientes, normal.
Hay pocas rosas abiertas, de éstas unas color rojo grana aterciopeladas huelen de maravilla, las demás... nada. Paso por la Glorieta del Ángel Caído, recuerdo a Blanca, fotografió el ángel que extiende su mano hacia el cielo. Una mano hacia la tierra, otra arriba buscando...
Y ya, bajo hacia Atocha por el Pº del Duque de Fernán Núñez, mantiene el nombre pese a haber dado un giro de 90º a la izquierda. Bajan algunos patinando. Una pareja con niño mira hacia lo alto, hacia las ramas de un árbol, el sonido proviene de unas aves exóticas, de esas que la gente trae y luego abandona, o quizá se han escapado ¿alguna? Vuelan agrupadas, son de color verde ¿loros?
No bajo por la Cuesta de Moyano, me dirijo al tren por lo que me meto por la de su izda. que desemboca frente a la estación de Atocha, a la parte nueva. Aún es de día, hay luz solar, serán... son las 8 menos cuarto. Miré el reloj.

RECOMENDABLE: Habituarse a utilizar el callejero -guía urbana- de Madrid. La mejor manera, además de andar, de saber adonde vas o por donde fuiste -caso presente-. PAQUITA

5 comentarios:

Concha dijo...

A mí también me gusta mucho caminar, salgo todos los días, y procuro caminar una hora. Saludos.

Elena dijo...

Soy una gran desconocedora de mi ciudad, conozco 3 sitios y en coche...andando o me llevan o me pierdo...me ha encantado tu caminata, un besote.

Milena dijo...

Andando

¿eso no es un gerundio ? je je je

que nos pasamos con el cohe, contra! que nos pasamos...

¡Enga , a caminar pa ponernos "tipositas" ! jaja ja

Milena dijo...

coche, coche "restifico"

Milena dijo...

Ahora en serio: Qué bonitos esos
paseos por ahí, por esos parques de la ciudad, escuchando los pajarillos, disfrutando del verdor de los árboles primaverales....Qué grande... y yo aquí, en Praga, pasando más frío que...la leshe !
abrazos, muchos