"Hoy
estoy para penas solamente"... decía M. Hernandez. Pero es que yo no
estoy para otra cosa y no es una impostura literaria. No estoy para
poesía, ni para lecturas, ni para retos, ni para introspecciones. Paso
todo el día teletrabajando, aunque parezca que los profesores no hacemos
nada, y limpiando todo para poder cumplir el protocolo de vivir con un
profesional sanitario en tiempos de covid. Mi angel blanco, tan bonita y
tan ausente... Estoy cansada porque tengo una enferm
edad
autoinmune que desgasta mucho. Soy la loca de la casa que no encuentra
lo que necesita en los cajones, y sólo encuentra su propio dolor en los
espejos. Una extraña pena oscura y desconocida se ha enseñoreado de mi
día a día. Aprovechad los que podéis, y llenad vuestra vida de amor y de
belleza en estos días de confinamiento, porque sólo la belleza y el
amor salvan el mundo. Hacedlo, y cuando lo hagáis, si no os importa,
hacedlo también por mí.
+ 18/5/2020 Marisa Peña ·
¿Y desde la izquierda no podemos inventar una forma segura y creativa de demostrar que los fascistas no son los dueños de la calle y que no todo el mundo queremos derrocar al gobierno?
Son golpistas y quieren hacer lo mismo que sus abuelos y bisabuelos en medio de una crisis sanitaria sin precedentes. Son insufribles y tienen a las fuerzas que deberían impedirlo de su parte.
:(
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EN PERROFLAUTAS DEL MUNDO: La mala muerte de nuestros mayores debería matar al sistema que la provoca
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