14/12/2024
Querida comunidad de CTXT:
El post de Facebook en el que la aseguradora sanitaria UnitedHealthcare, líder del mercado en Estados Unidos, lamentaba el asesinato a tiros de su CEO, Brian Thompson, fue retirado tras acumular más de 23.000 reacciones con el emoticono de la risa, según cuenta la periodista Taylor Lorenz. Lorenz argumenta que las redes sociales han permitido emerger toda la rabia acumulada por la crueldad de un sistema sanitario que se ha llevado por delante muchas vidas, y que los medios de comunicación tradicionales, que han adoptado un enfoque escandalizado ante los chistes, han sido incapaces de reflejarlo o de comprenderlo. ¡Oh! ¡Hemos normalizado la violencia! ¿En qué momento? ¿Cómo puede ser?
«Todos nos deshumanizamos un poco en Internet», decía en un vídeo reciente el youtuber Mozo Yefímovich. A mí personalmente me trae de cabeza que, en una época en la que las posibilidades de conexión son máximas, en la que puedes seguir en tiempo real lo que está sucediendo en cualquier parte y tu vecino puede haber nacido a miles de kilómetros, sea tan sencillo deshumanizarnos y odiarnos unos a otros por cuestiones raciales, de género, de origen o similares. Entre otras cosas, hay toda una industria muy bien financiada que facilita que así sea, claro.
Al influencer de ultraderecha y «guerra cultural» Ben Shapiro, enemigo del derecho al aborto y del matrimonio gay, se le ha llenado el vídeo en el que celebraba la detención del sospechoso del asesinato de Thompson de comentarios negativos. Sus seguidores afirmaban que este asunto va más allá de izquierdas y derechas, comprendían súbitamente a Shapiro como una persona que gana dinero con el odio, y contaban historias en las que la racanería de las aseguradoras llevó a la muerte o el sufrimiento a amistades y familiares.
El presunto asesino, Luigi Mangione, no es precisamente un socialista. Procede de una familia rica y su rastro digital indica que cree en las criptomonedas y en las buenas intenciones de Elon Musk para la humanidad. Sin embargo, parece que sufre dolores de espalda crónicos.
En España, un caso similar de desubicación mediática podría ser el de Daniel Sancho, hijo del actor Rodolfo Sancho, juzgado por el asesinato y descuartizamiento del doctor colombiano Edwin Arrieta en Tailandia, suceso que ha sido cubierto por la televisión y otros medios tradicionales desde una desconcertante compasión por Sancho.
Está muy documentado que la estrategia neoliberal de desregulación y financiarización, y la exigencia de reducción de costes que esta conlleva, ha empeorado la calidad de los servicios en múltiples sectores, dejando la vida muy lejos del centro. En torno al 60% del capital bursátil mundial está invertido en empresas estadounidenses. El índice SP500, que reúne a las 500 compañías más grandes del país, no deja de marcar máximos históricos. Estados Unidos es, con diferencia, el país con el mayor gasto sanitario per cápita del mundo (más de 12.000 dólares), pero tiene una esperanza de vida significativamente menor a la de Europa occidental, Japón, Australia o Canadá.
Observemos algunas de las series más aclamadas de las últimas décadas: en Los Soprano, una representante de la aseguradora aparece para echar al capo Tony del hospital de mala manera cuando se recupera de una herida de bala. Mantener algún empleo falso en las empresas de basuras es un asunto fundamental para los ricos mafiosos por la cobertura sanitaria que los sindicatos garantizan. En Breaking Bad, la necesidad de pagar un tratamiento de cáncer es el pretexto del humilde profesor Walter White para reciclarse como narcotraficante.
Al escritor Cory Doctorow le llama la atención que, en un país como Estados Unidos, donde el acceso a las armas es tan sencillo y las muertes por herida de bala tan frecuentes (de nuevo, una excepción entre los más ricos), donde en las escuelas se enseña a los niños a protegerse de un tiroteo y la gente tiene presente la posibilidad de llevarse un tiro en cualquier encontronazo de tráfico o similar (aunque en realidad no sea tan probable), algo como el asesinato de Thompson no hubiera sucedido antes.
Aquí termina esta carta. Esta carta no contiene ninguna conclusión. Solo he querido aprovechar el tiempo de descuento antes de que el espíritu navideño se apodere completamente de nuestros corazones para reunir esta serie de datos y referencias. Buenas noches, queridos suscriptores y suscriptoras. Gracias por estar ahí.
Elena de Sus
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