PUEDE MORIR LA PERSONA PERO NUNCA SUS IDEALES.
Tal día como hoy, 5 de julio, nacía BLAS INFANTE (1885-1936), ideólogo, ensayista, notario y político andaluz.
El golpe de estado y el estallido de la guerra civil provoca la suspensión y anulación de todo proceso emprendedor.
Blas Infante fue ejecutado en el verano de 1936, siendo una de las primeras víctimas políticas, fusiladas por el bando sublevado.
Sus restos yacen en una de las 8 fosas comunes que se encuentran en un cementerio sevillano, un total de 3500 seres humanos se encuentran allí, sin identificar y sin recibir sepultura digna.
Son crimenes que permanecen impunes, muertes silenciosas, anónimas y en muchos casos solo son números en estadísticas.
Con la muerte de nuestro máximo representante por la lucha de una autonomía independiente, defensor de la libertad y en contra de todo manifiesto fascista, fallece uno de los símbolos más emblemáticos de España y Andalucía, sin embargo puede morir la persona, pero no sus ideales.
Blas Infante en nuestro recuerdo seguirá vivo. Sirvan honores a su dedicación hacia la LIBERTAD, en su máximo y justo concepto.
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